One Shots - Multifandom

Es ella, ¿no? - Glitar

Respiro profundamente antes de bajar de  mi coche, no me siento lista para lo que esta por suceder.

En los últimos meses mi madre se ha unido a una fundación que ayuda a los animales en situación de calle, justamente hoy se llevará a cabo el registro para adopciones en nuestro patio.

No me mal entiendan, me parece un gran gesto de humanidad de parte de mi madre. Lo que no me agrada tanto es que... Catra sea una voluntaria.

He estado evitando a la castaña desde hace dos semanas, cuando casi nos besamos en clase de deportes, todo por culpa del idiota de nuestro profesor.

Estábamos jugando baloncesto con la clase, yo di un mal movimiento y Catra me sostuvo en sus brazos para no caer de bruces al suelo, pero debido a ello nuestros rostros quedaron a escasos centímetros de distancia, pude verla tragar saliva mientras miraba mis labios. Cosa que me puso bastante nerviosa. En cuanto hicimos contacto visual todo a nuestro alrededor había desaparecido, me permití en ese momento perderme en el mar azul y dorado de sus ojos, por lo menos así era hasta que la tos falsa de Scorpia rompió el momento.

En cuanto nos separamos la realidad me golpeó con brusquedad.

La realidad de que yo estoy en una relación con Bow, no estoy disponible. Él fue la principal razón por la que decidí poner distancia entre Catra y yo, claro, también el que mi mejor amiga esté interesada en ella me freno. No puedo hacerle eso a Adora, ella no lo merece.

Después de todo Adora tiene más posibilidades de llegar a algo con la morena, mis padres primero me envían a un internado a Alemania antes de permitirme salir con alguien que no sea de nuestra misma clase social o peor aún, con una chica. Ellos son bastante anticuados en esos aspectos.

Se podría decir que yo tengo el mundo a mis pies mientras Catra no tiene en que caerse muerta. Nuestras vidas, nuestros mundos... simplemente no encajan.

Yo obtengo todo lo que deseo gracias al estatus económico de mi familia, en cambio Catra no corre con la misma suerte, su familia es más sencilla, o eso es lo que me contó Adora cuando fue a su casa a hacer un proyecto de la universidad.

En cuanto pongo un pie en el patio comienzo a buscar con la mirada a la responsable de mi insomnio de las últimas semanas. Sonrío al verla jugar en un rincón con varios gatos, esa chica si que tiene una fascinación por los felinos.

Nuestras miradas se encuentran y ella sonríe, como me gusta esa sonrisa. Devuelvo el gesto, rio al ver como el gatito que estaba hace unos segundos en su cabeza comienza a descender por su hombro, parece que ni siquiera la molesta el hecho de que las pequeñas criaturas la estén arañando.

Siento un calor cálido en mi pecho, ella tiene ese efecto en mi.

Miro hacia otro lado, debo mantener mi distancia, no puedo quebrarme, no debo hacerlo. No saldré corriendo a estar junto a ella, Bow no se merece eso.

Soy una estúpida, no debí haber venido.

Debí haber aceptado la oferta de Mermista de ir al cine con ella y sus amigas. Eso hubiese sido menos difícil de hacer. O por lo menos me hubiera quedado en la residencia de la universidad, escuchar a Entrapta hablar en términos que no conozco sería mejor que intentar ignorar la mirada de la chica que me vuelve loca.

Siento una mano sobre mi hombro y me giro enseguida, parado frente a mi se encuentra Bow, mi novio. De quien se supone estoy perdidamente enamorada.