Tras la sangre

Capítulo 10

El pelirrojo suspiró y comenzó a hablar:

Osidia, año 2056.

Vice jugaba como capitán en el equipo de baloncesto del instituto. Se rumoreaba por el pueblo que podría acceder a una beca de estudios en Andrómeda la capital de Scilla, aquello era con lo que soñaban todas las personas del pequeño pueblo.
Las ciudades centrales podían hacer frente a un desastre natural de alta magnitud. Vivir en una de ellas era lo que cualquier persona hubiese deseado.
Vice alardeaba de ello todo el rato, recordando al resto lo miserables y desafortunados que eran.

Hasta que llegaba a casa.

–Recuerda que mañana jugaréis contra los Wolkers, necesitamos ganar ese partido.

–Lo se, si lo logramos llegaremos al Campeonato Nacional–musitó Vice pensativo.

–No puedes perder, habrá cazatalentos mirándote–afirmó el entrenador–Este partido es crucial para tu beca de estudios.

–¿Cuándo te he fallado entrenador?–sonrió confiado.

La puerta del vestuario se abrió levemente y tras ella el estilizado cuerpo de Azul apareció.

–Ahora tengo que irme, mi novia me espera.–sonrió con más fuerza dándole la espalda a su entrenador. Caminó apresuradamente hacia ella, la cual, rodeó el cuello de su novio y de puntillas lo besó en los labios.

[...]

–Todos nos miran...–le susurró Azul algo nerviosa.

–Nos tienen envidia porque somos la pareja perfecta–rodeó el cuello de su novia arrimándola hacia él.

–Solo llevamos un mes juntos y ya lo sabe todo el pueblo.

–¿Y eso no te encanta?–Vice no dejaba de sonreír, saludaba a todos aquellos que le miraban con admiración y cada segundo se paraba a charlar con algún que otro compañero de clase.

–Vice, ¿luego podríamos ir a tu casa y estudiar juntos?–Dijo Azul algo molesta por la cantidad de veces que se tenía que parar a saludar a gente que ni conocía.

–Mejor a la tuya nena.–contestó serio. Nunca llevaría a Azul a su casa. Jamás.

[...]

Vice se quedó un momento observando la puerta de la entrada de su casa. Había estado todo el día fuera, entre el entrenamiento y el estudio–más bien el sexo–con su novia no llegó a su casa hasta las 11 de la noche. Trago saliva y abrió la puerta.

–Ya he llegad...

Un plato salió disparado hacia su dirección impactando en la pared, Vice se protegió la cabeza completamente asustado.

–¡¿Donde cojones estabas?!–gritó su padre, alcoholizado.

–Estaba en el entrenamien...

–¡No me mientas!–se acercó hacia él con mirada inquisitiva–estabas con la hija de los Coleman...maldito pervertido.

–Azul es mi novi...

–¡Cállate! –le dio una bofetada–¡No me interrumpas cuando hablo!–Vice dio un paso atrás temblando–¡esa maldita puta es solo una distracción para ti!

–Entreno todos los días, no creo que...

–¡Que te calles!–volvió a golpearlo pero esta vez con mayor potencia, provocando que cayese al suelo al instante.

Vice ya estaba acostumbrado a las golpizas de su padre, se convirtió en una rutina para él. Pero ese día fue diferente, no encontró a su madre por ninguna parte del salón mirando sin decir nada, como siempre. Su madre no estaba en la casa.