Capítulo 4. Caballero oscuro.

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Tengo dos horas para ponerme presentable antes de la entrevista de trabajo. Opto por unos jeans cómodos, una blusa blanca y unos zapatos de cuña blancos. No voy ni demasiado arreglada ni demasiado informal, está bien.

Tengo que coger el metro para ir hasta el restaurante ya que está en el centro de Barcelona.

Cuando llego a la puerta me aliso la blusa y me paso las manos por el pelo simulando un peine, estoy muy nerviosa porque es mi primera entrevista de trabajo y además tengo doble presión ya que mi madre cuenta con que me lo van a dar y podremos ir mejor económicamente.

Abro la puerta y veo que por dentro es aún más lujoso y bonito que por fuera. Me imaginaba un cuchitril de barrio pero en cambio estoy aquí rodeada de gente con collares de perlas y vestidos que para poder pagarlos yo tendría que nacer tres veces como mínimo.

En la recepción hay una mujer rubia muy elegante y con cara de buena gente. Me acerco a preguntar por los dueños del restaurante ya que tengo la entrevista con ellos.

De muy buena gana me acompaña hasta una gran sala con chimenea donde se encuentran los dueños.

Él parece un hombre rico pero tiene una apariencia bastante sencilla, mientras que ella es totalmente lo contrario, adornada con toda clase de accesorios caros y tiene cara de estirada.

Él me ofrece una silla y empieza la entrevista.

-Hola señorita Evans, soy George Tyler y esta es mi mujer, María.

-Señora Tyler. -Corrige ella echando una mirada fulminante a su esposo.

¿Señor Tyler? ¿Será una mera coincidencia o puede que no? Lo dejo estar al darme cuenta de que me he quedado embobada con mis pensamientos.

-Bueno, su madre nos informó sobre usted y como necesitábamos alguien que se ocupe de la limpieza...

-Perdone Sr. Tyler. -interrumpo- pensé que el puesto era de camarera.

-En un primer momento si, pero como comprenderá es un puesto muy solicitado y usted faltó a su primera entrevista por lo tanto ese puesto ya está ocupado.

-Entiendo- realmente estoy avergonzada por el motivo por el que tuve que faltar a la entrevista.

-Agradece que te estemos dando una segunda oportunidad- dice la amargada de la señora Tyler.

-Lo sé, realmente les estoy muy agradecida por esto- digo falsamente- Es un dinero extra para mi casa y eso nos vendría realmente bien.

-¿Qué horario le vendría bien?

-Pues todas las tardes y los fines de semana.

-Muy bien, como se trata de la limpieza puede venir todos los días a partir de las 6 de la tarde hasta las 9, los sábados tendría que ser de 7 hasta hora de cierre que normalmente es sobre la 1 o las 2 de la mañana y por último los domingos se libra.

-Se ajusta perfectamente a mi horario.

-Perfecto entonces, estarás una semana de prueba antes de concretar su sueldo pero iría al rededor de unos 700 euros, ¿le va bien comenzar mañana?

-Claro, mañana a las 6 entonces.

- Hasta mañana señorita Becker- me da un apretón de manos y María lo hace de mala gana, ¿qué demonios le pasa a esta mujer?

-Hasta mañana Sr. y Sra. Tyler.

Salgo de la sala y veo 2 puertas más y no recuerdo por cual he venido. Decido abrir la puerta de la izquierda y cuando la abro noto como le golpea a alguien.

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