I need you

Capítulo 18. Páginas en blanco que rellenar.

Capítulo 18. Páginas en blanco que rellenar.

Estos últimos días han sido un poco agobiantes para todos. Luke ha estado en un plan un poco insoportable después de la operación, no hacía más que quejarse de que no quería estar en el hospital porque ya estaba lo suficientemente bien como para volver a su casa, a su trabajo y a su vida normal. A ratos conseguía hacerle entrar en razón, pero casi siempre terminábamos discutiendo por lo mismo. A demás, María terminaba de poner la guinda al pastel cada vez que venía. Si de normal no la soporta, ahora mucho menos.  No veía el momento para que llegara este día, no hago más que contar los minutos que quedan para salir de aquí, dejar esta maldita habitación de una vez y volver a nuestra vida normal ahora que estamos juntos de nuevo.

El doctor García nos dijo ayer que Luke recibiría el alta hoy por la mañana y Mason ha traído su ropa para poder irnos lo antes posible, así que solo le queda vestirse y recoger algunas cosas que le han ido regalando desde que está aquí. Yo solo me podía permitir regalarle unos lirios que resaltaban en la habitación blanca y que iba cambiando cada día que venía a visitarle.
Miro como Luke se viste y cuando termina se levanta para acercase a mí sonriendo.

-¿Nos vamos?- dice agarrándome la mano y tirando de mí hacía la puerta impaciente. 

-¿No puedes estar tranquilo ni un minuto?- me mira con esa cara de niño pequeño medio haciendo pucheros y le sonrío. -Está bien. Salgamos de aquí de una vez.

Me besa tiernamente y salimos de allí agarrados de la mano hasta el final del pasillo. 

Le miro, aunque aún parece débil porque es todo demasiado reciente, hay otro brillo en su cara. Como si pudiera leer en su cara que todo va a ir bien a partir de ahora y me siento mucho más tranquila. Adiós hospital, adiós a toda esa mierda que ha estado pasando durante tanto tiempo. Es lo que pienso nada más pisar la calle con el hombre al que quiero a mi lado, regalándome una pequeña y dulce sonrisa que echaba tanto de menos. Todo el sufrimiento, toda la preocupación y todas las lágrimas derramadas se ven recompensadas con solo saber que le tengo cerca y que está bien. Ahora es tiempo de disfrutar el uno del otro y de recuperar todo el tiempo perdido.
Cuando llegamos al coche, un hombre nos espera con la puerta abierta. Su cara me resulta familiar pero no recuerdo su nombre.

-Bienvenido de nuevo señor- le dice a Luke sonriendo pero sin dejar su postura y tono de voz formal.

-Gracias Michael- responde Luke alargando el brazo para que puedan estrecharse la mano.
Ya lo recuerdo. Michael nos llevó de compras a Emma y a mí cuando Luke no pudo acompañarnos. Noto que él me recuerda bastante bien por la manera en la que me mira y me sonríe.

-Buenos días señorita Evans- hace un gesto con la cabeza para saludarme y yo le devuelvo la sonrisa seguido de un "Buenos días".
Mason se une a nosotros poco después y salimos de allí dirección a casa de Luke. Me despido con la mirada de este hospital al que no pienso volver nunca, iré a cualquier otro pero aquí no pienso volver. Ya son demasiadas cosas vividas aquí y espero que no nos tengamos que vernos las caras de nuevo.

Llegamos a casa y la guerra continúa cuando Mason le dice a Luke que el doctor aconseja estar un par de días en reposo, intentando moverse lo menos posible. Y esto, como era de esperar, no es algo que Luke vaya a cumplir sin rechistar. Al contrario, creo que vamos a tener que hacer guardia en la puerta de la habitación para que en un descuido no se nos vaya. Espero que no tengamos que llegar a ese extremo.
Nada más llegar la noche,  a regañadientes conseguimos que Luke se meta en la cama y aunque se haya quejado mucho no tarda en quedarse dormido como un tronco.
Bajo con Mason a la cocina para prepararme un té.

-¿Quieres un té, un café o alguna otra cosa?

-No gracias. Yo ya me iba, creo que dejo a mi hermano en buenas manos y que aquí ya no se me necesita. ¿Puedes decirle que pasaré mañana a visitarle?