EL CONTRATO (J HOPE +TÚ ) +18🔞 (EN EDICIÓN)

Cap 7

NARRA T/N

Pasó una semana después de la última vez que estuve con Hoseok. Cada día era un martirio permanente. El trabajo, mi preocupación porque mis planes no salieran como los pienso, mi estrés... Últimamente estaba muy mal física y mentalmente. Tenía tantas cosas en la cabeza que ya no sabía ni qué pensar.

—Presidenta T/N, ¿Qué le parece la propuesta? —dijo uno de los inversionistas con los que empecé a trabajar.

—¿Perdón? —dije saliendo de mis pensamientos.

—T/N, después de esta junta lea los apuntes que he hecho y luego da su perspectiva si se siente mal —dijo Nina, siempre considerada —. Señores inversionistas, creo que por hoy se suspende la junta hasta nuevo aviso. Creo que la señorita T/N no se siente bien de salud —todos los inversionistas dieron una reverencia hacia mí y salieron de aquella enorme sala de juntas, que, aunque fuera enorme, de algún modo me sentía tan apretada y ahogada al mismo tiempo

>>T/N —dijo Nina sacándome de mis pensamientos.

—Dime.

—¿Se siente mal? —preguntó con cara de preocupación.

—¿Eso parece? —le pregunté sin ganas.

—Creo que necesita ir al doctor. Hace tiempo que no va gracias a su perfecta salud, pero veo que eso está cambiando.

-—Tienes razón. Tal vez sería una excelente idea. De todos modos, tenía que visitar uno pronto.

—¿Llamo a su antiguo doctor de pila o al que visitó la última vez?

—¿Quién es mi antiguo doctor? —pregunté confundida.

—El doctor Mark Tu... —interrumpí a Nina al escuchar ese nombre.

—¡NO! —dije un poco subida de tono asustando a Nina — Él no es mi doctor ya hace tiempo. Mejor avísale a mi nuevo doctor Gong Yoo.

—Está bien, señorita

—No me llames señorita. Deja las formalidades de lado. No hay nadie más que nosotras dos aquí —Me ignoró y se fue hacer unas llamadas mientras yo quedé sentada en aquella silla viendo hacia el techo. Al rato llegó ella.

>>Tienes una cita a las 15 hrs. Con el doctor Gong Yoo, SEÑORITA —dijo exagerando l última parte y yo la volteé a ver mal.

—Gracias, Nina. Puedes retirarte, y si no tengo nada que hacer, ahora me voy a retirar a mi departamento. Estoy cansada.

Llegó la hora de mi cita con el doctor. Llegué aquel hospital, aunque confesaré odio los hospitales. Siempre hay gente ya sea llorando, corriendo, o lo que sea, pero odiaba ir al hospital.

—Adelante —dijo una hermosa voz después de que tocara la puerta del consultorio.

—Hola doctor —dije entrando y tomando asiento.

—¡Oh, T/N! Tiempo sin verte, ¿Pero a qué has venido?

—Sí, lo sé. Es que casi no me enfermo.

—¿Estás enferma?

—No exactamente. Solo no me siento tan bien y menos animada últimamente. Solo quiero saber si estoy bien. Ya sabe, mis exámenes anuales. Sé que faltan semanas para eso, pero creo que en este momento necesito saber si estoy bien.

—Bueno, creo que según como te veo, estás algo pálida y te ves un poco decaída. Dime: ¿últimamente has comido tus comidas a tiempo o bebido tus vitaminas constantemente?

—Bueno —solté nerviosa — a veces me tengo que saltar las comidas, ya sabe, siempre estoy ocupada en una junta o en algún viaje, y pues no siempre tengo tiempo. Sobre las vitaminas, esas sí me las intento tomar en tiempo y forma. A veces se me saltan, pero no tanto como las comidas.