SI, SI ES CONTIGO

"Tal vez"

Ya casi es fin de semana y es increíble la forma en la que los días han pasado.
Nada más hoy hacen cuatro días en el que era lunes y me encontraba viendo mi reflejo frente al espejo para ir a mi primer día de trabajo y hoy resulta que ya tengo un grupo de amigos en el que hace mucho tiempo nisiquiera había estado. Ahora mi hermana comparte sus amigos conmigo.

Ahora me encuentro casi saliendo de casa ajunto a Erick, claro que cada quién en su auto ya que el se irá a sus empresas y yo me regreso a casa junto a mis nuevos amigos y Adam.
Alexis sale de su turno a las nueve de la mañana y regresa a las siete de la noche por lo que Gisell y yo hemos decidido pasar la tarde con todos, juntos. Y aprovechando que nuestro jefe es mi padrastro, y también dueño de la construcción, hoy nos ha dicho que sólo trabajaremos hasta la una de la tarde porque el tiene muchos pendientes por realizar. También quiere darle unas horas más de descanso a los muchachos que han trabajado incansablemente.

Por otra parte he estado pensando en que dentro de tres días es domingo, el día en que nuevamente tendré frente a mí a las hermanas Raymomd y posterior a eso tengo que hablar con Alexis para contarle todo y con Adam para asumir la responsabilidad de Gisell.

En realidad no sé que propósito tiene la vida en colocarme nuevamente en aquellos caminos. ¿Que querrá Allyson ?¿Que querrá Saray? Me pregunto una y otra vez y no logro entender absolutamente nada.

Aquello que me dijo Sofía no me convenció mucho sobre Saray. ¿Querer agradecerme después de tanto tiempo? ¿Para qué?
Es cierto que arriesgué mi vida por la de ella porqué tenía que hacerlo, debía salvarla a ella y a todas esas niñas, de alguna manera debía sacar a esas hermanas del hueco en el que estaban.

Se deshicieron de Janner y su banda de mal nacidos y por fin están viviendo en paz, ¿Para qué volver?.
No sé si será cierto todo ese rollo del agradecimiento o si tal vez me estoy apresurando a los hechos.

Tal vez ya ellas tengan una vida hecha y como en los cuentos de hadas estén viviendo felices, o tal vez no.

Tal vez, querrán volver para ganar o conseguir algo.

Tal vez quieran complicarme la vida y de paso la de ellas mismas.

Tal vez y sólo tal vez.
Ese que no me deja la cabeza quieta y me trae vuelta un lío.

Pero no me importa, si un día expuse mi vida por la de unas personas que nunca había en visto en mi vida, ahora no me importa exponerla nuevamente por los que han estado en mi lado incontables veces.

No es algo que quiera hacer del todo pero por alguna extraña razón quiero hacerlo, quiero volver a verlas, a tenerlas frente a mi.
Quiero saber que es lo que en realidad quieren buscar.

Tampoco era mi intención meter a mi hermana en medio de todo esto, pero ella tiene razón. Teniendo en cuenta que serán cuatro personas y sólo yo estaré con ellas es mejor que por lo menos mi hermana se ofrezca a hacerme compañía. Después de todo ella no tiene velas en este lío.

No me había dado cuenta que estaba tan sumida en mis pensamientos hasta que alguien novia su mano frente a mi cara y pude reaccionar. Nisiquiera había probado bocado del desayuno.

-¿Te pasa algo, mami?- Preguntó Matt.

- No mi amor, no me pasa nada ¿Porqué?.- Me gusta que me llame mami porqué el dice que cuando mamá no está su mamá soy yo. Pero siempre le he dicho y el sabe que su mamá siempre será nuestra madre, ni Alexis y mucho menos yo ocuparemos el lugar de nuestros padres en su corazón, aunque ellos no estén.

- Pues es que te quedaste como una estatua, y lo único que hacías era respirar. - Respondió con inocencia.

- Camila ya me voy ¿Vienes?- llamó mi atención la voz de Erick y ya no pude responderle a mi hermanito.

-Eh, si claro.

-Adiós.- Se despidieron Matt y Gisse.

Cuando llegamos a nuestro lugar de trabajo encontramos a Adam, Dayamelis, Juan y Miguel con unos papeles sobre unas mesas y unos planos pegados en la pared, discutiendo sobre algo.
Saludamos a todos e inmediatamente interviniendo en la conversación hasta que por fin tomamos una serie de desiciones, y así pasó el resto de horas, tomando decisiones, reparando las opiniones de cada quien y llegando a conclusiones para un bien común.

Tuve razón cuando dije que haríamos un gran equipo aquí y fuera.

Al llegar la hora de la salida, guardamos todo y cuando todos se habían ido entonces todos nosotros nos dirigimos a la casa.

Cuando llegamos encontramos a Matt, Gisell y Alexis jugando en la sala de juegos.
Matt salió corriendo a mis brazos, Adam le dio un beso a mi hermana y yo a Alexis.
Después de presentarlos comimos un poco, jugamos, charlamos, reímos.
En resumen la pasamos super bien y me gusta ver que cada persona que llega a nuestro grupo de amigos por parte de cualquiera de nostros, siempre se queda, congeniamos y nos volvemos totalmente inseparables. Algo así como cómplices de aventuras.

JUAN SARMIENTO EN MULTIMEDIA.