Capítulo 10

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La luz de la ventana entra directamente a mi cama & no me deja siguir durmiendo. Intento cerrar mis ojos, pero la luz no me deja, además siento que algo me observa & no me quita la mirada de encima & lo veo, la silueta de un hombre a orillas de la cama, mirándome, le sonrió.

-Eres hermosa - Me dice acercándose para besarme en la frente.

Lo miro & me río.

-¿Cuanto tiempo llevabas ahi? - Pregunto levantandome.

-Lo suficiente para calcular cuanto mide la cicatriz de tu estómago & cuantos lunares hay en el.

Sonrió & lo abrazó, me dejo caer en sus brazos, sintiendo su aroma natural.

-Te amo - Dice en mi oído, lo dice con una voz tan baja que me causa escalofríos.

-& yo a ti Sebastián - Digo sin soltarlo.

Me levanta & comienza a besarme con tanta ternura, con delicadeza, con amor.

Lo golpeó para que me suelte & me meto al baño corriendo para que no me alcance.

-Sal de ahí - Grita golpeando la puerta - o tendre que tirar esto.

-Tirala entonces - Contesto riendome de el - Me metere a bañar.

Estoy recargada en la puerta, al parecer no insistió más & se marcho. Comienzo a desvestirme, abro la regadera & comienzo a bañarme. Mientras lo hago recuerdo sus manos tocando mi cuerpo & me estremecen cada uno de esos recuerdos, me dejó caer & mis lágrimas corren sin razón alguna. El pasado se apodera de mi & me veo ahí, humillada, desesperada, cansanda, intentando tener un amor que no me pertenece, un amor que ya alguien más tiene.

-Amor - Dice Sebastián en la puerta.

-Ya voy a salir - Respondo secando mis lágrimas.

-Esta bien, necesito que conozcas ha alguien.

Término de cepillarme el cabello, me pongo las bragas, el sostén & la bata de dormir encima.

Salgo & un hombre calvo, alto, & muy fuerte esta de espaldas frente a mi.

-Aquí esta - Dice Sebastián tomándome del brazo - Te presentó a mi prometida, Marisela.

-Mucho gusto - Me dice el hombre saludandome de mano.

-El es Adam, mi amigo - Dijo Sebastián - El fue quien nos ayudó con todos los preparativos.

-Muchas gracias - Le digo.

-No hay de que - Dice con su voz tan gruesa como la de un hombre, un verdadero hombre.

Pasaron 5 horas & se marcho, no me gustan las visitas & menos cuando tengo cosas que hacer. Rápidamente subí al cuarto & busque el mejor vestido que pude encontrar, un vestido de brillos dorados, con escote de corazón que hacia relucir perfectamente mis senos, largo hasta los pies con una abertura al lado dejando al descubierto mis piernas, mi cabello recojido & unos tacones color piel.

-Lista cariño - Dijo Sebastián.

Al verme se detuvo, era como si estuviera viendo algún fantasma, sin ninguna expresión en su rostro.

-¿Que ocurre? - Pregunto volteando a mi alrededor.

-Eres la mujer más hermosa de todas - Dice besandome - Ya no quiero ir.

Lo mire con cara de enojo, ¿Que?

-¿Porque? - Dije confundida - Yo te dije que no quería ir & tu me insististe, ahora que pasó horas alistandome dices que siempre no.

-Es que no quiero que nadie más te vea - Contesta con una voz suave - Me da miedo que alguien más te vea & se enamoré de ti.

Suelto una carcajada & lo beso.

Salimos del coche & entramos a la recepción, toda la gente vestida de gala, como si estuvieramos en unos premios de los artistas, no puedo evitar reírme.

Sebastián me presenta un par de amigos, que hablan de negocios, de cosas que yo no entiendo, pido disculpas & me dirijo al tocador.

-Christian - Gritan.

Me agitó & volteo a mi alrededor, buscandolo, pero hay demasiada gente, no puedo ver, las luces se apagan & comienza un show de baile folclórico. Corro al baño intentando tranquilizarme, salgo & el show termino, todos los bailarines bajan, busco a Sebastián hasta que lo veo & voy a el que esta pláticando con unas bailarinas.

-Cariño, ella es Ilda una vieja amiga - Dice presentandonos, le doy la mano distraída - Ilda mi prometida.

Volteo a verla... es ella, me agitó más de lo que estoy, comienzo a marearme.

¡QUIERO SALIR DE AQUI!

Me doy media vuelta & topo con alguien, el tacón se me resbala & estoy apunto de caer, pero el me detiene.

-Lo siento - Me disculpo apenada.

Lo volteo a ver & mi corazón empieza a latir a una velocidad indescriptible, me dejo caer en sus brazos & por unos minutos ya no se de mi.

VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora