Venganza

Capítulo 19

Estoy sentada en la cama, el remordimiento no me deja respirar. ¡Como pude ser tan estúpida! Me digo constantemente, volteo & veo la chaqueta de David. Me pongo la bata & bajo para alcanzarlo, abro la puerta & me abrazan con una fuerza que me ahoga.

-Felicidades - Me dice Barbara - ¿Como estas?

Barbara es la hermana mayor de Sebastián, se llevan 3 años, tenemos más de 3 meses que no la vemos.

-Gracias - Le respondo - Muy bien ¿& tu?

-También - Dice entrando a la casa - Me tope a un niño saliendo con cara de susto - Se ríe.

-Venía a vender algo, pero no le puse atención - Le explicó - ¿Como te fue en tu viaje?

-Muy bien, es hermoso, deberían de irse tu & Sebastián de luna de miel para allá - Dice levantandose para servirse agua - ¿Por cierto donde esta?

-Se fue hace como 2 horas.

-Te traje la muestra de uno de los adornos para las mesas de tu boda, te gustaran - Me asegura.

Tocan la puerta & mi cuñada abre la puerta, le suplicó a Dios que no sea David, pero no es Victoria con Fabiola.

-¿Lista? - Me pregunta Fabiola.

Me siento en una silla por casi 1 hora, estoy desesperanda por pararme, me duele la cabeza de los jalones que le da Fabiola a mi cabello. Termina & me miro en el espejo. El cabello recogido con unas trenzas, fleco de lado & un toque despeinado, nada mal.

-Te vez muy bien - Me dice Victoria.

-Deberías ponerte el vestido para ver como se ve todo junto - Sugiere mi cuñada.

-Muchas gracias - Digo abrazando a Fabiola.

Escucho el auto de Sebastián & me deshago el peinado para que no me vea. Entra pero no viene solo, viene con Ilda.

-Hermano - Grita Barbara abrazando a Sebastián - Te extrañe mucho.

-Hola - Saluda Ilda - ¿Que tal?

-Muy bien gracias - Le digo amablemente.

-Me imaginó - Dice como si supiera algo.

Sebastián saluda a todas & al último a mi, me besa & me abraza.

-Ahorita vendrá Christian - Me dice en el oído para que nadie escuché.

Lo miro con cara de decepción ¿Porque me hace esto?

-Ilda vino a ayudarnos con la decoración de la casa - Me explica Sebastián.

-Me parece perfecto - Tomo mis cosas - Me voy para no estorbar.

-¿A donde vas? - Me pregunta Sebastián.

-No se, ya veré que hago - Digo.

-Ahorita viene mi esposo ¿Te piensas ir? - Me reta - Pensé que querrías verlo.

Esta mujer me está sacando de mis casillas, siento como si me estuviera retando, como si esto fuera una competencia para ver quien gana. ¿Que pretende?

-¿Porque querría verlo?

-¿Porque pasaste la noche con el? - Me pregunta.

-¿Celos? - Quiere jugar... juguemos entonces.

Me mira como si estuviera a punto de explotar.

-No - Dice con seguridad - No acostumbró a sentir celos de los "De vez en cuando" de mi marido.

Acaba de prender la mecha & si vuelve a decir una palabra juro que la sacó a punta de...

-Ya basta - Interrumpe Sebastián.

-Despreocupate - Le digo para calmar las cosas - No pase la noche con tu marido, ni lo haré, Para tu buena suerte soy mucha mujer para ser la... ¿Como le dices tu? ¿La "De vez en cuando"? De tu marido.

Todos me miran, me siento atacada. Me doy la media vuelta & Christian esta en la puerta, lo ignoró & salgo.

Respiro tan profundo como puedo, pensando en todo.

-¿Así que tan poca cosa crees que soy? - Me dice Christian por la espalda.

-No lo decía por ti - Digo en tono de enojo - Lo decía por mi. Le tenía que aclarar que no soy la misma que antes.

-Explicate - Dice confundido.

-No, explicate tu - Comienzo a molestarme -  ¿Que es lo que quieres de mi? ¿Llevarme a la cama? Porque si es así estas perdiendo tu tiempo.

No me responde & se da la vuelta.

-Te odio Christian - Le gritó.

Me voltea a ver & camina hacía mi.

-Quiero todo - Me dice - Eso es lo que quiero de ti. Si si te quiero llevar a mi cama, te deseó, me muero por tenerte entre mis brazos & no creo que sea una pérdida de tiempo - Se da la vuelta pero se detiene - A & también te odio, te odio porque hiciste que te amara sin darte cuenta & aún más porque no quieres reconocer que sientes lo mismo.

No encuentro palabras que lo hagan sentir mejor o peor de lo que esta, así que sólo lo miro & el también lo hace esperando que le diga algo, porque sabe que tiene la razón, porque sabe que aún lo quiero tanto como antes. Le quiero creer todo lo que dice sentir pero no puedo, hay algo que aprendí hace tiempo, algo que me enseñó el, que todo se demuestra con hechos, no palabras. El día en que comience a actuar en vez de hablar ese día tal vez cambié mi opinión respecto a el.