Venganza

Capitulo 2

Estoy aquí con el, caminando mientras me confiesa sus sentimientos hacia mi, dice que le gusto, por una extraña razón no le creo, pero estoy tan emocionada porque siempre soñé estar con el. Es hora de despedirnos, no estamos solos, tengo que despedirme de todos pero cuando estoy acercándome a el, me toma por sorpresa & me besa; un beso tierno, dignó de unas almas que se acaban de conocer & que saben que son el uno para el otro, aunque no lo sean. Ese beso fue eterno, pero algo cambia me acaba de empujar tirandome al suelo, cierro mis ojos esperando el impulso, pero para mi sorpresa me detiene & yo lo tomó con fuerza abriendo mis ojos para poder observar su belleza.

-Lo siento - Se disculpa el hombre que me detiene - ¿Estas bien?

¿Que? Me digo a mi misma apenada, ¿Que paso?

-Usted que cree, nisiquiera se fija por donde camina - Contestó molesta.

-Disculpa - Me responde.

No puedo dejar de mirarlo es muy apuesto & me he portado bastante grosera con el.

-Tu eres la que al parecer no esta aquí.

-Quizás - Digo incorporandome torpemente - Pero eso no te da derecho de aventarme.

-No la avente señorita - sus palabras eran dulces- Usted iba caminando distraida & no lo niego yo también venía distraído, nos topamos, simple casualidad.

¿Casualidad? Ha esto le llama casualidad. Además porque no deja de mirarme me pone nerviosa.

-Compermiso - Le digo lo bastante nerviosa como para que lo note.

-Propio - Al terminar suelta una carcajada & noto que me sigue observando pero yo no lo hago más.

Estoy lo bastante estresada, he terminado mi libro con demasiada presión que estoy un 80% segura que no es del todo bueno, todo por dejar las cosas al último. La empresa que me lo ha comprado lo quiere para dentro de 2 horas, pase mi noche terminandolo & no dormí lo suficiente, mi auto se descompone, debemos 2 meses en la renta de la casa... ¿Que mas? Digo esperando a que suceda algo malo como lo es todas las películas.

Estoy sentada pensando tanto que ya me duele la cabeza, esperando a que mi compañera regrese para ir a entregar turno en el hospital, estoy bastante agotada, sólo quiero llegar a dormir, pero no, tengo que esperar a Victoria para que venga por mi. Mis pensamientos siguen fluyendo & recuerdo aquel momento cuando estaba con el en su auto, yo lo abrazaba con fuerza & le decía el temor que sentía al dejarlo ir & ya jamás volverlo a ver, el juro que regresaría, nunca le creí más sin embargo siempre tuve un poco de esperanza en que regresara. Sus palabras prometían tanto.

-Claro que nos volveremos a ver - Me dijo con tanta seguridad que sus ojos me confundieron.

-¿Como siguió Doña Martha? - Me dijo una voz que me sonaba conocida.

-Muchisimo mejor - Le dije sin mirarlo - Le di un Antibiótico & al parecer ya está mejor.

Sentí su mirada tan clavada en mi que tuve que voltear a verlo.

Era el, aquel hombre con el que fui tan grosera hace unas horas, no dejaba de mirarme al parecer el me reconoció de inmediato.

-Muy bien - Dijo observandome de pies a cabeza - ¿Ya se te bajó el enojo?

¿Enojo? Nisiquiera estaba enojada.

-El echo de que seas el Doctor no quiere decir que no me pueda enojar con tigo - Dije sin pensar.

-En primer lugar me debes respeto & en segunda no soy doctor.

-¿Quieres respeto? - Conteste sin dejar que pudiera decir ni una sola palabra mas - Respetame a mi primero, no te importa lo que pase con migo, & no me interesa que seas.

-Sólo quería brindarte mi ayuda, pero creo que no te importa.

-Crees bien - Digo para levantarme e irme de ahí.

Este papel de niña grosera no me cae nada bien, me sorprende ser así con una persona porque no es mi personalidad, pero realmente no estoy de humor para aguantar a la gente. Al momento que pasó a su lado me detiene del brazo & me acomoda el gafet que impide ver mi nombre.

-Enfermera Marisela - Rápidamente quito mi gafet de sus manos - Mucho gusto Marisela, mI nombre es Sebastián, Sebastián González - Dice tendiendome la mano.