Ron y tú nunca se habían cruzado en sus seis años en Hogwarts, hasta ahora. Cuando ambos se unen para romper una relación, te encuentras pasandolo mucho mejor con el pelirrojo de lo que ambos esperaban.
Esta historia no es mía, solo la traduzco.
-Li...
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Diecinueve-
Molly finalmente se quedó sin preguntas sobre la escuela y ambos terminamos nuestros platos de comida. Ron lanzó un hechizo sin esfuerzo para lavar nuestros platos y guardarlos, y me llevó arriba para mostrarme los alrededores.
-Esta es mi habitación.- dijo, retrocediendo a través de la puerta para revelar una pequeña habitación de madera con una cama en el medio y una cómoda al lado de la pared derecha. También había mucha ropa en el suelo, que Ron se apresuró a limpiar una vez que estuvimos allí.
-Me encanta.- dije, admirando el espacio que me rodeaba.
Molly asomó la cabeza por la puerta.- T / n, estarás durmiendo en la cama de Ron. Ron, coge el colchón de aire.- nos informó, y Ron puso los ojos en blanco.
-¡Mamá! ¿Por qué yo?- Ron se quejó.
Molly entró de lleno en la habitación y se cruzó de brazos.- ¡Porque t / n es nuestra invitada! ¡Y ella no ha sido más que encantadora conmigo, que es algo que no puedo decir por ti!- ella regañó.
Ron miró hacia abajo y suspiró derrotado cuando Molly arrojó un colchón de aire desinflado.
-Puedes hacer estallar esto esta noche cuando te vayas a la cama.- le dijo antes de irse.
Ron se volvió para mirarme.- Vaya. Ahora me has robado la cama.- disparó.
-¡Lo siento!- Me reí.- Puedes tenerla. Yo tomaré el colchón de aire.- ofrecí.
-No, no, no. Solo estoy bromeando. Me quedo con esto.- respondió, pateando la desinflada y triste excusa de una cama en el suelo. Miró hacia arriba.- Entonces, ¿qué quieres hacer hoy?- preguntó, sentándose en su cama.
-No lo sé. ¿Qué haces normalmente cuando vienes a casa los fines de semana?- Pregunté, sentándome a su lado.
-Por lo general, mamá nos obliga a hacer las tareas del hogar todo el tiempo. Es terrible. Pero ella estuvo de acuerdo en que no haría eso esta vez, ya que estás aquí.
-¿Y solo estamos nosotros en casa?- Pregunté, preguntándome por el resto de sus seis hermanos.
-Ojalá.- resopló.- El resto del clan debería estar aquí en cualquier momento. Los gemelos y Ginny, eso es.
Como si fuera una señal, varias voces subieron las escaleras desde la sala de estar. Me levanté y miré las escaleras para ver a Fred, George y Ginny discutiendo frente al sofá.
El suelo crujió bajo mis pasos y todos miraron hacia arriba.- ¡T / n!- exclamaron al unísono, corriendo al pie de las escaleras.
Los saludé con una sonrisa y regresé al primer piso para saludarlos.
-Hola chicos.- dije una vez alcanzando el último escalón. Nunca he estado muy cerca de ninguno de los Weasley, por lo que quedarme en su casa durante un fin de semana fue definitivamente un gran paso. Pero siempre hemos sido amables y tengo la sensación de que este fin de semana nos acercará mucho más.
-¿Dónde está Ron?- Fred me preguntó. Me di la vuelta para ver a Ron parado en lo alto de las escaleras ahora.
-Hola.- dijo, bajando lentamente cada escalón.
-Supongo que ustedes dos ya han comido.- comentó Ginny, dejando sus maletas junto a ella.- Me muero de hambre.
Molly preparó el desayuno para los tres mientras Ron y yo nos sentamos con ellos en la mesa.
-Entonces, ¿qué han estado haciendo ustedes dos tortolitos?- Preguntó George mientras le daba un codazo a Ron.
-Besos, apuesto.- respondió Fred.
Ron y yo nos sonrojamos.- Acabamos de pasar el rato.- respondió.
Su vaguedad era obviamente muy sospechosa, porque sus tres hermanos hicieron exactamente la misma cara de "No lo compro" con nosotros dos.
-¡Es cierto!- Me defendí.- Acabamos de comer, y luego Ron me mostró los alrededores.
Todavía no parecían creerlo, pero siguieron adelante rápidamente. Los cuatro conversaron sobre cómo este viaje a casa iba a ser el mejor ya que no había tareas que hacer.- ¡Oh Merlín! ¡Casi lo olvido!- Ginny exclamó al azar en medio de su conversación.- Hermione me contó sobre la fiesta del jueves por la noche.
Ron miró a su alrededor para ver a Molly antes de hacer callar a su hermana.- ¿Qué pasa con eso?- preguntó en voz baja.
-Sobre cómo ustedes dos se besaban frente a todos. Y luego cómo ambos regresaron a su habitación.- dijo, mirando a Ron. Fred y George intercambiaron miradas traviesas.
-Cállate, Ginny.- la regañó Ron, claramente avergonzado.
-Así que es verdad.- dijo Fred.
La falta de respuesta de Ron y mía fue suficiente respuesta para los tres mientras estallaban en gritos y gritos.
-Vamos arriba.- anunció Ron por encima del sonido de su repugnancia, levantándose y tomando mi mano. Yo también me levanté y lo seguí escaleras arriba.
-Lo siento por ellos.- se disculpó una vez que cerramos la puerta de su habitación.- No me di cuenta de lo difícil que iba a ser mentir todo el tiempo.
-No tienes que disculparte. Son divertidos.- dije. Eso era cierto. Me estaba divirtiendo pasando el rato con ellos.
-¡Pero son tan jodidamente molestos! A veces quiero decirles que ni siquiera estamos saliendo solo para callarlos.
Me congelé ante su última frase. Decirle a todo el mundo, a cualquiera, esa información sería humillante. Tanto para mí como para Ron.
-No podemos hacer eso.- dije.- No podemos decírselo a nadie.
-No, lo sé, no te preocupes. Es simplemente molesto.
Nos sentamos en silencio por un rato.- ¿Qué vamos a hacer cuando esto termine?- pregunté. No pude evitar preguntarme. Si Hermione y Cedric rompen para estar con cada uno de nosotros, ¿qué haríamos?
-Vamos a fingir romper también, duh.- dijo con total naturalidad.- Y luego estaré con Hermione y tú estarás con Cedric. Y nunca tendremos que volver a hablar.
La última parte definitivamente dolió. ¿Realmente no quería pasar mucho tiempo conmigo? ¿Estaba pasando por esto solo por Hermione?- Ay.- dije, tratando de ser discreto acerca de cómo eso realmente me había afectado.
Él se rió y se puso de pie.- Vamos a jugar un juego de cartas o algo así. Estoy aburrido.
No me di cuenta de que mi conversación era tan aburrida. En lugar de luchar, me mordí la lengua y lo seguí fuera de la habitación y escaleras abajo.
