Break It Up -Ron Weasley ✓

Parte 2|| 1-¿Porqué a Ron no le gusta la biblioteca?

Uno—

—Oye, ¿estás haciendo algo ahora mismo?— Preguntó Cedric, acercándose a mí más tarde en la biblioteca.

—Bueno, estaba estudiando.— suspiré, hojeando imprudentemente páginas al azar de mi libro de pociones.— Pero no va bien.— Me di la vuelta en mi silla para enfrentarlo.— ¿Qué pasa?

Miré hacia arriba para ver la cara normalmente sonriente de Cedric arrugada y retorcido en preocupación.

—¿Ced? ¿Pasa algo?

—No ...— se calló.— No. No pasa nada. Simplemente no hemos salido en un tiempo, eso es todo.— Todavía parecía preocupado y había una pizca de incertidumbre en su voz.

—Literalmente pasamos el rato hace un par de horas.— me reí, mirando en el reloj que colgaba en la pared encima de nosotros.

—Me refiero sólo a nosotros dos.— dijo, sus ojos recorriendo la habitación. Definitivamente, algo le pasaba.

—Lo hicimos.— dije.— En el juego ... ¿estás seguro de que estás bien?

—Correcto. El juego. Pero, tengo que hablar contigo sobre algo. Algo importante.— dijo.

—Oh ... está bien.— respondí vacilante. Mis ojos se posaron de nuevo en mi libro de texto.— Tengo algo de tiempo ahora, si quieres.— le ofrecí, palmeando la silla vacía a mi lado.

—¡No! Ahora no, no puedo.— dijo. Parecía casi ... ¿nervioso? No pude poner mi dedo en eso.— ¿Que tal esta noche?

Sonreí cálidamente.— Seguro. ¿Mi habitación?— Le pregunté.

Esbozó una leve sonrisa.— Perfecto.

Se puso de pie y salió de la habitación tan lentamente como siempre. Esa fue, de lejos, la conversación más extraña que había tenido con él.

Aunque era cierto. Los dos no habíamos salido solos en una eternidad, más que solo el juego de quidditch después de la escuela hoy. Fue muy diferente a los años anteriores, donde pasamos cada segundo de vigilia uno al lado del otro.

Pero ahora ambos estamos en una relación. Las cosas iban a ser diferentes.

No podía concentrarme demasiado en el extraño comportamiento de Cedric. Tenía mucho que estudiar. Mis calificaciones no han sido tan buenas recientemente desde hace mucho mi tiempo lo he gastado en cierto plan pequeño.

Pero ahora, ese plan terminó y tengo más tiempo para trabajar en mi trabajo escolar. Justo cuando volví a concentrarme en mi libro y la información de la página, la puerta de la biblioteca se abrió de golpe. Todos saltaron y se volvieron para ver qué había causado una conmoción tan fuerte en el ambiente por lo demás silencioso.

—¡T / n!— una voz gritó. Era Ron, respirando pesadamente con el sudor brillando por su frente. Su volumen no fue apreciado en la biblioteca, lo que le valió muchos a callar y miradas sucias. El hecho de que me hubiera llamado por mi nombre tampoco me atrajo miradas amistosas. Tímidamente se abrió paso a través de las estanterías hacia mí.

—¡Ron!— Lo regañé en voz baja.— ¿Sabes que esto es una biblioteca, verdad?

—¡Lo siento! Me emocioné demasiado.— susurró él, sentándose en la silla a mi lado. Suspiró y echó la cabeza hacia atrás, todavía sin aliento. Parecía alterado.

—¿Podrías ser más bajito?— vino una voz enojada un par de asientos más allá de nosotros. Era Draco, con su habitual rostro disgustado y las cejas arqueadas.

—Lo siento.— me disculpé.

—Weasley entra a la habitación y, de repente, la sala está más ruidosa que el auditorio cuando la banda de música está practicando.— disparó Draco, lo que le valió un par de risas de los otros Slytherin que estaban sentados detrás de él.