Cap. 8

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Narración normal.

Los días pasaban con normalidad, Wei Wuxian se habia estado esforzando por conquistar a Lan WangJi ante la vista se sus hijos quienes eran cómplices de todo lo que hacia el alfa.

Por más que WangJi lo negará, el alfa le gustaba más cada día y eso lo notaron sus gemelos quienes no se quedaron con la duda y le preguntaron algunas cosas.

-Oye mamá-se acercó JinJing hasta el omega quien solo asintió para que hablará.

-Dime cariño-levantó la cabeza para verlo.

-¿Cómo vas con Wei Wuxian?-aquella pregunta hizo que sus orejas se tiñeran de rojo a lo que soltó una leve risita la omega menor.

-Pues...bien, supongo-no le agradaba hablar de eso con sus hijos, no porque no quisiera que lo supieran sino que era un poco vergonzoso para él.

-Mamá, ya ha pasado un mes desde que llegamos a GusuLan, ¿por qué no dejas que fluya esto que se esta creando con él? ¿Cuál es el miedo?-era muy lista, se parecía mucho a su mamá y eso lo sabía el omega.

-No hay ningún miedo solo que...-la puerta del Jingshi fue tocada a lo que el omega se levantó para ir a abrir.

Cuando abrió las puertas un ramo de rosas se hizo presente en su cara y detrás de ella estaba el alfa que sonrió al ver al omega.

-Lan Zhan, esto es para ti-se las extendió y el omega solo las tomó con las orejas sonrojadas.

-Gracias Wei Ying-las tomó con timidez y fue cuando apareció otro ramo pero esta vez dado por su hijo mayor.

-Estás te las doy yo mamá, son más bonitas que las que te dio Wei Wuxian-lo dijo con sorna y el alfa fruncio el ceño.

-Más respeto don amable, soy mayor que tu así que respetame-le dijo con algo de molestia.

El omega solo le sacó la lengua a lo que este soltó un monosílabo pero fue interrumpido por el omega mayor.

-Suficiente, entren los dos al Jingshi-les dijo para darles paso.

Le hicieron caso al omega y entraron a la habitación, en ella estaba JinJing quien leía sin preocupaciones hasta que su hermano mayor saltó a la cama para molestarla.

-Hola A-Jing, ¿qué tanto lees?-miró la hoja que estaba leyendo.

-Lo mismo de siempre A-Yun, ya lo sabes-lo dijo para luego mirarlo con el ceño fruncido.

-Eres muy aburrida Jing-Mei, ¿no tienes otra cosa que hacer?-se recargo en el respaldar de la cama mientras cruzaba los brazos.

-No, bueno si pero ya las terminé de hacer por lo que me dispuse a leer un rato hasta que llegaste a interrumpirme-dicho esto cerró el libro y se levantó de la cama para saludar al alfa-, bienvenido joven maestro Wei-reverencio con cortesía.

-Hola A-Jing, ¿cómo estás?-le preguntó curioso.

-Bien, muchas gracias por preguntar joven Wei-le sonrió de lado.

-Solo dime Wei Ying-aquello hizo renegar al omega gemelo mayor.

-Oye, ¿por qué ella si puede decirte por tu nombre y yo no?-quería una explicación.

-Patético-eso lo dijeron al mismo tiempo Wei Ying y JinJing.

La mirada de A-Yun dijo muchas cosas y por primera vez en sus 15 años viviendo con su mamá pudieron escuchar su risa.

Los tres voltearon a ver al omega con asombro, pero solo los hijos lo abrazaron con alegría debido a lo que escucharon.

-Hace mucho tiempo que no te ríes mamá, nos hace feliz que lo hayas hecho por primera vez-estaba feliz A-Jing al igual que A-Yun.

-Solo ustedes podían darme ese privilegio, los amo mucho a los dos-beso sus sienes mientras Wei Ying los veía con una sonrisa en los labios.

No pudo evitar unirse al abrazo, saco algunos jadeos por parte de los tres pero no le importo mucho.

-Wei Ying, nos ahogas-le dijo Lan Zhan algo sofocado.

-Deja de aplastarnos papá-aquello lo dijeron al unísono los gemelos dejando perpleja a la pareja mayor.

-¿Papá?-aquello fue dicho por Lan Zhan quien no sabía como salir del asombro.

-Oye A-Jing, ¿acaso escuche con claridad lo que dijiste?-pregunto A-Yun sorprendido, jamás imagino que su menor fuera capaz de decir eso en voz alta.

-Tu también lo dijiste A-Yun, pensaba que yo era la única que ya lo veía como padre en este mes que lo hemos conocido-eso lo dijo la menor sin imaginar que detrás de ella algo se caería y para el colmo era Wei Ying.

-Wei Ying, ¿enserio te desmayaste?-rodo los ojos Lan Zhan y entre él y sus hijos lo ayudaron a levantarse para recostarlo en la cama y esperar a que despertará.

Sin duda, el tiempo trajo cosas buenas y sin quererlo para Wei Ying un par de hijos que lo querrían de inmediato o más de lo que ya lo querían.

Un Giro De 180° (XianWang)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora