¿Qué harías si te dijeran que la enfermedad que pensabas tener es algo totalmente distinto?
Adriana es una chica que vive su día a día con pérdidas de memoria, lo cual le trajo muchos problemas, o bueno, eso es lo que ella creía tener, hasta que ll...
—Yo... Yo... Solo... ¡Solamente disfruto hacerlo! ¿¡Está bien!? Además, ¿Qué importa si hacía esto o no con mis amigas? ¿Qué tiene qué ver? Total, es mi decisión disfrutar lindos momentos contigo ¿O es que no te agrada estar conmigo? —me dijo Diana con la mirada baja.
—Sí me agrada estar contigo, pero... ¿No se supone que debes estar acostumbrada?
—¿Acostumbrada a qué? ¿A que me rechacen a pesar de que lo doy todo de mí para alegrar a mis amigos? ¿A que pase una y otra vez? Porque si te refieres a eso, ¡Aún no me acostumbro ¡Incluso ahora pensé que contigo sería diferente, ¿Tú también quieres tirar mis sentimientos a la basura?
—«¿Qué es lo que le pa...?» ¿De qué estás hablando? Lo dije porque te ves cómo alguien que tiene muchos amigos.
—¿Y en qué te basas para decir eso?
—Solo te estoy diciendo que así te ves, no entiendo qué es lo que te enoja.
—Entonces así es como juzgas a los demás... En ese caso, no, no soy la chica que vive rodeada de muchas personas que la quieren, en realidad soy alguien que está tan vacía por dentro, que cuando alguien alcanza a llenarme un poco, me apego tanto a esa persona que cuando me doy cuenta ya estoy rota de nuevo, pero a pesar de eso vuelvo a hacer lo mismo, no aprendo... Creo que ese mi verdadero error.
Al parecer ella no se daba cuenta de cómo estaba diciendo las cosas al principio, ya que cuando terminó, al parecer, pensó en sus palabras y estuvo mirando a la nada unos segundos.
—Perdón por gritarte Adri, no era mi intención, tú solo hiciste una pregunta y mira la forma en la que te trato, creo que me he desquitado contigo sin razón, cuando debería estar hablándole de este modo a las personas que me hicieron sentir así.
—Tranquila, ya ni siquiera me importa.
—No lo digas de ese modo, me siento mal... Pero es verdad lo que dije, no soy alguien querida por los demás, esa es una de las razones por las que me estoy quedando aquí, yo quería comenzar de nuevo, solo que si les decía a mis papás: "¿Saben qué? Me siento sola, siento que necesito amigos y no los tengo ahora mismo, lo mejor para mí sería irme", era una razón que no tenía sentido para una mudanza, entonces preferí decir que vendría a trabajar, después de todo no se me estaba dando bien el estudio y ya era la segunda carrera universitaria que había elegido, era la excusa perfecta... Creo que eso es un poco de la historia de porqué terminé hablando contigo.
—Ya veo, entonces de eso se trataba tu discurso sobre: "luchar por amor y perder esa batalla".
Ella me miró confundida y se quedó pensando en lo que había dicho un momento, por suerte recordó, estaba empezando a arrepentirme de mis palabras.
—Hablas de ese día —no pudo evitar reírse—, lo había olvidado por completo, esa es otra historia, pero te la contaré más adelante, ahora mismo lo importante es aprovechar lo que compré y hacernos más bonitas.
Me sentía un poco feliz de conocer más a Diana, nadie creería que ella se sentía de ese modo, al igual que yo al principio, ya que es no es la primera impresión que daba, ella fue una persona muy amable conmigo cuando nos conocimos por primera vez y creo que eso hizo que fuera más fácil hablarle.
—Muy bien Adri, olvidemos lo que acaba de pasar y empecemos a alistarnos, aunque por ahora solo desayunaremos y veremos qué nos queda bien, luego almorzaremos para cambiarnos y salir, ¿Te parece bien?
—Si, comamos.
—¡Genial! Ahora solo falta empezar a cocinar.
Estando en la cocina, mientras ella preparaba el desayuno y el olor a panquecas se expandía por toda la casa, ella habló más de su pasado y de cómo era antes de llegar.
—En realidad mis amigas eran buenas, el problema de mis amistades era yo, es que tengo un problema terrible, soy muy buena haciendo amistades, pero muy mala manteniéndolas, lo más probable es que haya sido por eso que me quedé sola —seguía haciendo de comer.
—Yo pienso que eres buena amiga, me gusta mucho la forma en la que me tratas.
—Muchas gracias —noté una leve sonrisa—. También te dije que te contaría sobre mis amores del pasado algún día, pero ya que estamos aquí hablaré un poco... Estuve enamorada de un chico durante un año y medio, no me atrevía a decirle sobre mis sentimientos, porque veía a ese desagradable hombre como alguien tan perfecto, y pensaba: "¿Cómo una mortal como yo se atrevería a tocar a ese monumento?"; él se terminó enterando y decidimos seguir saliendo, esa incertidumbre que sentía se había ido por completo, yo pensé que era algo mutuo. Las cosas no salieron como quería, porque él se enamoró de otra chica, yo como una tonta luché por su amor, era tan lamentable que ahora me doy vergüenza y todo eso tuvo su final —cayó una lágrima de su ojo izquierdo y se limpió tan pronto como lo notó—, cuando todo eso pasó me di cuenta de que no tenía a nadie para poder abrirme y contarle todo, mis papás ni siquiera sabían de él, por eso lloré ese día —volvió a reír.
—Incertidumbre... Yo también siento eso, a pesar de que me dijo que está feliz de conocerme, no sé si es lo que realmente siente o si lo dijo por el momento, me gustaría que fuera verdad.
Cuando dije eso, sonó el teléfono de Diana.
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NOTITA: ¡Hola! ¿Cómo están?
Bueno, lo que diré es corto, al igual que el capítulo de hoy.
De verdad quería conocer el pasado de Diana y la razón de su llegada, así que estoy feliz.
Me entristeció un poco su historia, ella es un amor de persona, no merecía eso, lo bueno es que eso ya pasó.
¿Una llamada? ¿Quién será?
Espero que hayan disfrutado mucho este capítulo. 💕💕💕💕
