𝑶𝒏 𝑴𝒚 𝑺𝒊𝒅𝒆 - 𝑰𝒘𝒂𝑶𝒊

5

Todos se encontraban sentados, comiendo. Después de una larga charla en la que Iwaizumi conoció a los amigos de Tōru decidieron que era hora de dar inicio a la cena.

— ¿Cómo está tu madre, Oikawa? — Preguntó Daichi.

— Ella está bien, trabajando en casa como siempre. — Respondió el castaño limpiando sus labios con una servilleta.

— Me alegra escucharlo, espero que termine de recuperarse pronto. — Y es que la madre de Tōru había contraído una enfermedad, por suerte tenía cura, y estaba casi totalmente recuperada.

— Gracias, Daichi. — Tōru se sobresaltó. Sintió como unos dedos se entrelazaban con los suyos bajo la mesa.

Sonrió y se giró hacia el moreno, quien ya había acabado también con su comida.

— ¿Quieres irte ya? — Preguntó Oikawa por lo bajo, Hajime negó. — Bien, avísame cuando estés cansado.

— Muy bien. — Hinata se puso de pie.

El pelinaranja se acercó a Kōshi y Tōru, tomándolos de las manos.

— Con su permiso, me los llevaré, hablen entre ustedes. — Pidió Shōyō, llevándose al castaño y al albino.

— ¿Por qué solo nosotros? — Los tres salieron al jardín trasero, que era iluminado por unos faros de luz.

— Quiero hablar con ustedes sobre algo. — Tomaron asiento en unos sofás acolchonados. — Quizás es algo importante.

— No nos preocupes, Shōyō, dínoslo. — Pidió Sugawara. — ¿Tuviste otra pelea con Tobio?

— No, no es eso.

— ¿Se van a casar? — Hinata negó. — ¿Qué es, entonces?

— Chicos, ustedes... ¿Creen que es muy pronto para tener bebés? — Kōshi y Tōru abrieron sus ojos a tope.

— ¿¡Estás en cinta!? — Preguntó Suga desesperado.

— Por los dioses, no. No lo estoy. — Ambos amigos suspiraron aliviados.

— Bueno, quizás para ti si es un poco pronto. — Comentó esta vez Oikawa. — Pero si es lo que quieres, hazlo.

— Estos últimos días... He pensado mucho en eso, me gustaría tener algo más que me una a Kageyama.

— ¿Por qué no se casan? Eso es un paso más como pareja. — Comentó Oikawa. — ¿Acaso Tobio no quiere casarse?

— En realidad no lo hemos hablado. — Confesó Hinata. — Pocas veces tocamos ese tema, no sé si a Tobio le incomoda.

— No lo creo, se ve que te ama a pesar de ser un tipo serio. — Habló Kōshi. — No está malo casarse a esta edad, muchas parejas lo hacen.

— No sé cómo decírselo. — Hinata bajó la mirada, jugando con sus dedos. — Me aterra pensar que quizás él no quiere casarse conmigo.

— Déjanos eso a nosotros. — Pidió Tōru. — Nos encargaremos. Sabemos que Kageyama es un idiota con las indirectas, así que desde ya descartemos esa idea.

— Podríamos ser directos. — Propuso Sugawara. — Quizá se sorprenda en un inicio, pero dudo que lo tome mal.

— Concuerdo con Kōshi. — Ambos miraron a Hinata. — Además, ustedes llevan bastante tiempo juntos ¿No? Ya se conocen suficiente el uno al otro.

— Gracias, chicos. — Shōyō sonrió, realmente deseaba casarse con el hombre al que él amaba desde que era un joven adolescente.

— Ahora. ¿Qué tal si hablamos del guapo alfa que llegó hoy contigo? — El albino miró a Oikawa, este se sonrojó un poco.