Las cosas estaban algo complicadas para Tōru. Habían pasado unas semanas, en realidad, estaban a una semana de que Hinata diese a luz. A parte de eso, el regalo de aniversario de sus padres cambió de fecha de entrega, por lo que como se podía imaginar, Oikawa estaba que se volvería loco en cualquier momento.
Iwaizumi tomó asiento en el sofá, mientras observaba a su pareja caminar de un lado a otro, susurrando cosas que sólo dios sabía que significaban.
El menor se detuvo de golpe y chasqueó sus dedos. Se giró hacia el moreno y caminó hasta estar frente a él, tomando sus hombros.— Iwaizumi, lo he decidido. — Aseguró, Hajime elevó una ceja, intentando descifrar lo que en la mente de Tōru había. Las mejillas del castaño se coloraron ante la penetrante mirada del azabache. — Uhm~... Iré a limpiar la casa hoy.
— ¿Ahora? — Oikawa asintió, alejándose del moreno para ir a su habitación en busca de las cosas que necesitaría. — Te acompaño.
— ¿No estás ocupado?
— No lo estoy. — Tras unos minutos, Tōru encontró todo lo que necesitaría incluidos trapos y cubetas para limpiar la futura casa de sus padres y hermano.
Subieron al auto del azabache, quien condujo hacia la nueva residencia de los Oikawa, junto al castaño habían decidido comprar una casa de tamaño medio, con cuatro habitaciones y dos baños, una sala de estar decente, una cocina ligeramente más grande que la que tenían en ese momento, el comedor, y por supuesto, un jardín para que su madre saliera en ocasiones a tomar aire fresco o a leer sus revistas de alfas guapos.
Al llegar al sitio, Tōru bajó y sacó las llaves de su bolsillo, abriendo la puerta.
— Sí tuviera que pensar como mi madre... — El ojimarrón comenzó a amueblar el sitio mentalmente con todas las cosas que sabía, tenían sus padres. Creo una sala de estar, una cocina, y habitaciones. — ¡Se verá genial!
— ¿Cuándo se la darás? — Preguntó el ojiverde acercándose al castaño, quien comenzaba a llenar las cubetas con agua.
— Si termino de limpiar el sitio hoy, planeo hacerlo mañana mismo. — Respondió Oikawa, mezclando un detergente con el agua. — ¿Seguro que quieres ensuciarte las manos?
— Sé cómo hacerlo perfectamente. — Tōru sonrió burlón, pasándole un trapo húmedo al moreno, quien lo tomó algo inseguro.
— Limpia la sala de estar, me encargaré de la cocina, después limpiaremos los baños.
— Entendido. — El mayor se retiró de la cocina, yendo a cumplir con lo asignado. Oikawa rió y comenzó a limpiar la cocina, asegurándose de deshacerse del polvo y la mugre que en el sitio yacía.
Limpió cada rincón de la cocina, terminando en una hora con ello. El trapo utilizado estaba terriblemente sucio, por lo que lo lavó nuevamente y salió del sitio, observando a Hajime mirando un punto fijo.
— ¿Iwaizumi? — Se acercó al moreno y observó a donde los ojos del mayor estaban posados. — Uhm... ¿Un dibujo en la pared?
— No puedo quitarlo, he intentado de todo. — Respondió frustrado.
— Es solo cuestión de tallar. — Tomó el trapo de las manos de su pareja y se inclinó, comenzando a tallar la pared por unos segundos, hasta lograr deshacerse del dibujo extraño que anteriormente decoraba el sitio.
— Eso fue fácil. — Tōru rió y observó el lugar. Notó unas telarañas en una de las esquinas, así que se acercó a quitarlas y limpiar las paredes. — ¿Has terminado?
— Sí, seguiré con el baño de la habitación principal. ¿Crees poder encargarte del otro baño, niño rico?
— No soy un niño rico. — Oikawa le miró con una sonrisa, Iwaizumi rodó los ojos asintiendo. — Quizás sí.
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𝑶𝒏 𝑴𝒚 𝑺𝒊𝒅𝒆 - 𝑰𝒘𝒂𝑶𝒊
Teen FictionOikawa solo quiere amar y ser amado. ¿Le concederá la vida este deseo? - Esta historia es 100% original - Contenido +18 y relaciones homosexuales, si no te gusta, no lo leas. :) La imagen de la portada no me pertenece, créditos a su respectiv@ cread...