— Iwaizumi, yo... — Tōru bajó la mirada observando sus zapatos. — No estoy del todo seguro.— ¿Puedo saber la razón?
— No es tu culpa, yo... Solo... Temo que suceda de nuevo. — Iwaizumi suspiró comprendiendo. Acercó a Tōru a su pecho, rodeándole con sus fuertes brazos. — ¿Sabes? Fue algo complicado superar a ese tipo, en el poco tiempo que estuvimos juntos pensé que realmente sería el amor de mi vida, pero no fue así. Mírame ahora, siendo una basura insegura de sí misma.
— No vuelvas a decir eso. — Oikawa miró a Hajime de reojo. — Por dios, no eres una basura, Tōru, y jamás lo serás.
— ¿Por qué? — Preguntó el castaño alejándose de sus brazos. — ¿Por qué insistes tanto? Es decir, si sólo quieres sexo puedes decírmelo, no me molestaré... Bueno, quizás sí, pero... Sé sincero, por favor.
— Diablos, no. — El azabache tomó sus manos. — No eres alguien a quien solo vea con lujuria... Te amo, Tōru. Te quiero junto a mí, quiero compartir mis mejores momentos a tu lado.
— No nos estamos casando, Iwaizumi. — Recordó Oikawa mientras se acercaba al moreno y se acurrucaba en su pecho.
— Tōru... Dame una segunda oportunidad. — Rogó Iwaizumi una vez más, aferrando al menor a su pecho. — Déjame demostrarte que te puedo hacer feliz, déjame hacerte feliz de cien maneras diferentes, permíteme ser el hombre que esté a tu lado por siempre.
— Eres demasiado optimista al pensar que estaremos juntos por siempre. — Oikawa negó. — ¿Qué pasa si mañana despierto en el hospital, siendo diagnosticado con alguna enfermedad terminal? ¿Qué si sufro un accidente de camino a la universidad? ¿Qué si mañana no despierto más?
— Por todos los cielos, no digas eso. — Tōru levantó la mirada, jadeó con sorpresa al notar los cristalinos ojos verdes de Iwaizumi mirarle dolido. — Tan sólo imaginarlo... Tan solo imaginar que te perderé... Por los dioses, Tōru, deja de ser tan pesimista.
— Lo siento, yo... No era mi intensión sonar tan mal. — Se disculpó mientras se acomodaba entre las piernas de Hajime y le abrazaba. — Es solo que... Tengo miedo.
— Lo entiendo. — Iwaizumi tomó sus mejillas y le obligó a mirarle. — Por eso quiero ser el hombre que cure todas esas heridas sin sanar que hay en tu corazón.
Oikawa mordió su lengua con fuerza mientras miraba al moreno. Poco fue el tiempo que retuvo las lágrimas amenazantes que comenzaron a caer por sus mejillas desesperadamente.
Hajime se sorprendió y asustó a la vez, por lo que abrazó al castaño, brindándole paz y seguridad, o al menos lo intentaba.Tōru recordaba cada uno de esos momentos en los que juró que la vida le estaba dando la espalda, en los que sintió que no tenía las suficientes fuerzas para continuar por sí mismo, en las muchas veces que casi pierde la batalla contra la vida.
— Te amo... Joder, te amo... — Susurró entre sollozos, tomó con fuerza la camisa de Hajime, rogándole a la vida que no volviera a traicionarlo, que le permitiera ser feliz, que le dejase amar y ser amado.
— Te amo, Tōru, más de lo que crees.
~❃~
— ¡Tú, bastardo! — Señaló Hanamaki antes de acercarse a Iwaizumi y propinarle la abofetada de su vida. — ¿Cómo se te ocurre aparecerte aquí?
Oikawa salió de los camerinos espantado por los gritos, y al ver a su pareja siendo 'agredida' por Hanamaki, rió.
— Takahiro, detente. — Pidió. El castaño claro se giró, mirándole ofendido. — Iwaizumi y yo estamos bien ahora.
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𝑶𝒏 𝑴𝒚 𝑺𝒊𝒅𝒆 - 𝑰𝒘𝒂𝑶𝒊
Teen FictionOikawa solo quiere amar y ser amado. ¿Le concederá la vida este deseo? - Esta historia es 100% original - Contenido +18 y relaciones homosexuales, si no te gusta, no lo leas. :) La imagen de la portada no me pertenece, créditos a su respectiv@ cread...