6

5.8K 554 198
                                    

Antes de comenzar con este capítulo debo de advertir que hay presencia de mucho con demasiado contenido lemon/smut, así como lo habrá en el siguiente capítulo.

- cara de radio rebel -

Perdón.

Soy terrible escribiendo esto, pero lo intentaré.

________________________________

— Detente… — Oikawa llevó una mano a su boca, evitando hacer ruido. — Iwaizumi… Mi madre está en casa. — Susurró el castaño como regaño, Hajime se alejó de él, limpiando el rastro de saliva que bajaba por una de sus comisuras.

— Lo siento. — Se disculpó. — Se suponía que sería un simple beso. — Ambos rieron. El azabache se acostó al lado de Tōru una vez más, abrazándose entre sí. — ¿Por qué no faltas hoy?

— Porque debo de ganarme el dinero del mes. — Recordó Tōru mientras acariciaba el pecho semi-desnudo de Iwaizumi. — He faltado bastante los últimos días, no quiero tener un rebajo.

— Ya veo. — Iwaizumi suspiró. — Habría preferido quedarme contigo aquí, hasta tarde.

— Suena tentador. — Respondió Oikawa. — Pero si te quedas vamos a acabar lo que no terminaste y mi madre me dará la paliza de mi vida, prefiero continuar viviendo un poco más.

— ¿Debería entonces llevarte a mi casa? — El castaño negó.

— No metas desconocidos a tu casa, Iwaizumi Hajime. — Regañó Tōru tal cual madre.

— No eres un desconocido. — Hajime le atrajo a él, tirando suavemente del labio del ojimarrón. — ¿A caso los desconocidos se besan de esta forma?

— En las fiestas sí.

— Eso es porque todos están ebrios. No eres un desconocido para mí, Oikawa. — Acarició las mejillas del castaño. Tōru miró la hora en el reloj digital de su escritorio y suspiro.

— Debo ducharme.

— ¿Te acompaño? — Oikawa golpeó su hombro, poniéndose de pie y yendo al baño.

— ¡Más te vale no espiarme, Iwaizumi, o te denunciaré! — Bromeó Oikawa, cerrando la puertas tras de él.

— Qué oferta tan tentadora. — Respondió Hajime, cerrando sus ojos para descansar un poco mientras Tōru salía del baño.

~❃~

— Akaashi, hey. — Saludó Oikawa con una sonrisa.

“¿Tōru? ¿Qué tal?” — Preguntó Keiji del otro lado de la línea.

— Siento la llamada repentina, le pedí tu número a Iwaizumi.

“No te preocupes. ¿Qué tal las cosas? Hace días no nos vemos”.

— Ha estado todo bien. Me preguntaba si podíamos vernos uno de estos días en la cafetería. — Habló Tōru. Puso la llamada en altavoz y dejó su teléfono a un lado antes de comenzar a lavar todos los platos y tazas que habían sucios.

— “Por supuesto. ¿Mañana a las diez?”

— Cuando puedas, no hay prisa.

— Oikawa. — Tōru se giró, observando a Hanamaki señalar una mesa. — Tu novio.

— Ah. Iré en seguida. — Respondió el castaño con una sonrisa. — Akaashi, te dejo, tengo algo que hacer. Quedamos en que mañana a las diez ¿No?

— “Sí, nos vemos, Tōru”.

Oikawa colgó la llamada y terminó de lavar todos los trastos. Tiró los guantes de goma en algún sitio antes de ir a una de las tantas mesas, observando a su pareja sentado, mirando su teléfono..

𝑶𝒏 𝑴𝒚 𝑺𝒊𝒅𝒆 - 𝑰𝒘𝒂𝑶𝒊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora