Capitulo 14

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—Yo igual quedé que aquí nos veríamos ¿La has visto estos últimos días?.

—Salimos el fin de semana, luego comento que no se sentía bien y la lleve a su casa, después de eso me ha ignorado.

—Yo igual no la veo desde la semana pasada.

—Me preocupa.

—Me voy a ir con los chicos, creo que necesitan su espacio —dice Carol.

—No, puedes quedarte, tal vez sea algo positivo y tengamos algo que celebrar —le responde Marck.

Los tres nos sentamos, Marck y Carol después de un rato fueron por su desayuno así que después de un rato nos encontramos terminando de comer.

Alguien se sienta frente a mi y es Rose.

La miro, esta pálida y tiene ojeras.

Me paro y la abrazo.

—Rose, quiero que me cuentes que te sucedió.

Le beso las mejillas y ella solo intenta sonreír.

—Si eso haré, no se preocupen.

Marck le da un corto beso y Carol solo le asiente, después todos nos quedamos en un momento tenso.

— ¿Por qué no has venido a clases? —soy la primera en preguntar.

—De eso les quiero hablar.

—Linda, iré con los chicos —se para Carol.

—No, lo que tengo que decir también te involucra.

El solo la mira confundido, pero vuelve a su lugar.

—Rose, no tienes que decir nada que no quieras —le digo.

Le tomo la mano.

—Ken, estos últimos días no he estado muy bien "sentimentalmente"—indica las comillas con los dedos— se que somos muy unidas y tú eres la única amistad sincera que he tenido, así que sin importar que después de esto me dejes de hablar quiero que sepas que te amo.

La miro confundida.

—Rose...

Me interrumpe.

—Ken, quiero decir todo ya, porque sino lo hago ya no podré hacerlo después.

Asiento y se voltea hacia su novio.

—Marck, te amo y porque es así quiero lo mejor para ti, lamento mucho que tengas que estar con una chica que te oculta cosas y me alegra que te sucedan hechos positivos, aunque no sea yo quién los ocasione.

—No pasa nada, algún día estarás preparada para contar tus cosas, cuando hayas sanado y esas heridas ya no duelan.

Ella lo mira con lágrimas en los ojos y eso a mí me destroza.

No hago nada, solo me siento con la mirada perdida pero atenta a lo que tenga que decir.

—Quiero sanar pronto, quiero contar lo que me sucede y para eso tengo que hacerlo ya.

Ella se toma su tiempo y los demás guardamos silencio.

—Marck, hace dos años aproximadamente fui a una fiesta a la que Kendall no asistió, fue a principios de la universidad...

Se lo mucho que le duele contar esto, no entiendo porque lo hace si ni siquiera quería hablarlo con su psicólogo.

—Esa noche me divertí, bailé, me embriagué, lo peor fue que no había muchas personas a las que conociera, siempre estuve consiente, cerca de las tres de la madrugada decido irme en mi carro, mi casa está a media hora de ese lugar. Tengo la costumbre de no conducir ebria, así que decidí ir a mi carro, cerrar todo y dormir ahí hasta que amaneciera.

Destino o CasualidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora