Amor por el baloncesto - MYG+KTH.

Parte 81: la verdadera amistad

YoonGi despierta temprano, se alista de manera rápida y se apresura a bajar a la cocina para tomar el desayuno. En el lugar Jimin ya está comiendo sus tan conocidos panes tostados con queso philadelphia y mermelada de fresa.

—¡Buenos días! —Recibe JiMin con la boca llena. YoonGi lo mira con desagrado y lo pasa de largo— amargado —comenta.

—Niños... —interviene Suni a modo de advertencia, JiMin la mira con ojos inocentes.

—Lo siento, Noona —comenta con un suave puchero que hace a YoonGi bufar y a Suni negar con la cabeza a la vez que ríe.

—¿Qué quieren cenar ésta noche? —Pregunta Suni mirándolos a ambos, YoonGi mira a JiMin y éste se encoge de hombros.

—¿Sushi? —Dice no muy convencido el pelinegro, JiMin lo mira con una gran sonrisa.

—¡Concuerdo con Hyung! —Alza su puño, Suni ríe nuevamente a la vez que asiente.

—De acuerdo, lo traeré de camino a casa —dice.

—¿A qué hora llegarás? —Pregunta YoonGi a su madre.

—A las 8:00 p.m. —responde y ambos menores asientes.

—Bien —habla Jimin.

—Es hora de irnos —informa YoonGi y JiMin alza la mirada al reloj y asiente.

—¡Iré a cepillarme los dientes! —Informa poniéndose de pie.

Una vez los 2 están listos se despiden de Suni desde el corredor a la vez que se ponen los tenis deportivos.

—¡Nos vemos en la noche Noona, con cuidado! —Dice JiMin.

—¡Igual ustedes! —Despide la mayor.

Una vez afuera JiMin aspira el aire con una gran sonrisa, hace mucho tiempo que no se siente así, pleno y feliz, por alguna razón luego de lo sucedido en su cumpleaños se siente mucho más cercano a Noona, como una segunda madre, su sonrisa se extiende al recordar la fotografía de los 4 colgada en el corredor de la casa.

Mira a YoonGi y nuevamente siente esa calidez, el pálido lo mira y le regala una mirada confusa.

—¿Qué te sucede? —Pregunta y JiMin comienza a reír.

—Gracias, Hyung —dice sin más, el gesto en el rostro de Min no cambia.

—¿Por qué? —Pregunta.

—Algún día te lo diré —asiente.

YoonGi le dedica una última mirada confusa pero vuelve su mirada al frente. Cuando llegan a la casa de Tae se encuentran con el castaño jugando con YeonTan en el patio delantero.

—¡TATA! —Grita JiMin acercándose, el aludido deja de sacudir el juguete para Tan y lo mira regalándole una sonrisa y posterior haciendo un reverencia.

—B...Buen...os d...días —responde Tae, mira a YoonGi y también le hace una reverencia.

YoonGi por su parte siente su corazón latir muy rápido y no puede evitar sonreír al ver al menor sonriendo, se ve tan bien, hace una reverencia en su dirección y se incorpora sin borrar su sonrisa.