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Roma

Me encuentraba muy concentrada trabajando, todavía estaba molestanda por haber caído con mi jefe y que él después haya salido con su prometida en una revista muy cariñosamente. Lucia golpea mi puerta y asoma la cabeza.
- Se puede?- pregunto sentándose.
-No ...
- Seguimos de mal humor?
- No solo es mal humor, es enojo, me siento sucia y una estúpida.
- Mira, me pondré sería para que veas que te hablo de verdad, tu no lo sabías o por lo menos no lo recordabas por tu estado, se que tú comportamiento va en contra de tus principios,pero que posibilidades hay de que lo vuelvas a ver o de cruzarte con la Rusa???
- Con su prometida querrás decir- dije con ironía.
- Si ,si esa. No haces más que torturarte y no ganas nada Roma. Es más he venido a invitarte a una fiesta.
- No estoy de humor...
- Para ya?! Hace semanas no sales y ya no sé que pensar. Ni la ruptura con Andrés te afectó tanto.
- No se que me pasa. Creo que no estoy feliz con la Roma de esa noche.
- Eres joven Roma, tienes que equivocarte, tienes conocer hombres, dicen que en la diversidad está en gusto- me mira y levanta las cejas.
- En serio te pasas! Se que debo cambiar, entiendo que no me sirvió de nada planificar mi vida entera con Andrés, porque he sentido más cosas con en Ruso que con él, pero es inevitable no sentirme como una zorra.
- ¡¿Me llamas zorra?! - dice haciéndose la ofendida.
- Sabes a lo que me refiero loca.
- Lo sé salame, pero aún así yo no me siento una zorra, porque disfruto de mi sexualidad, eligí con quién estar y cuando hacerlo y me dejo llevar, no planifico más que mis proyectos laborales. Debes relajarte, la vida es un segundo Roma.
- Sabes que te quiero como una hermana? Y tienes razón, tengo que quitarme los prejuicios de encima y dejar de torturarme.
- Y yo te quiero a ti, aunque no como una hermana, más bien como mi mascota - le tire con un clip por su chiste- bueno todo esto quiere decir que iremos de party party?!
- Mmmmm... Si sí. Vamos a perrear hasta llegar al núcleo de la tierra.
- Esa! Quiero ver eso. Me voy a terminar unas cosas.
- Pero no me has dicho cuando y a dónde nos vamos de fiesta.
- Tenemos dos días mi ciela. Nos juntamos a cenar y te cuento bien dale- mientras salía me tiró un beso.

Luego de esa pequeña charla estuvimos muy ocupadas con July, hay demasiados presupuestos que estudiar, el nuevo jefecito quiere remodelar los hoteles. Todos los días mis pensamientos giran en torno a él y a las noticias que vi. Jamás podría estar con alguien como él, un mujeriego y un mentiroso, ya tuve uno y no salió nada bien.
Salimos pasadas las siete de la oficina, estaba muerta de hambre, no había parado para almorzar y mi estómago era un repertorio de sonidos.
- Quieres ir a un resto o pedimos comida?- preguntó Lucia.
- Pidamos en casa. Los pies me matan al igual que mi corpiño.
- No se digas as. Primero paso por casa, busco ropa y hacemos pijamada.
- Okey, te espero en casa, tienes llave?- ella golpea su bolso confirmando- pido sushi!??
- Siiiiii plis
Una vez a la semana como mínimo hacíamos pijamada, algunas veces en mi departamento otra veces en el suyo o podríamos también en la casa de Jorge, ya que Pablo vivía en una pensión con otras personas y July vivía con sus padres, los cuales era muy conservadores, osea que mis amigos gays no eran bienvenidos.
Pero está noche como solo nosotras salimos tarde, seremos las únicas en la pijamada.
Llegue al departamento, hice el pedido y mientras espero me quite todo y me puse una remera de Andrés que quedo en casa. La relación con él está bien, no siento enojo hacia, no siento nada más que cariño, ahora me doy cuenta de que estaba enamorada de la idea del amor, nunca sentí ese sentimiento abrazador del que todos hablan, estar con él era fácil hasta que me engaño, ahora le agradezco que lo haya hecho, de lo contrario estaría perdiendo mi tiempo y el también.
- Llegue! - entro Lucia con un bolso y el pedido- encontré al delivery en la entrada así que lo asalte- bromeó.
- Somos sus clientas vip, es por eso que casi somos amigos con Esteban- dije riéndome de la familiaridad que teníamos con el repartidor. 
- Si lo sé, cuando me vio me saludo como si me conociera de toda la vida, es más al pedido le agrego una botella de vino blanco, ya que alguien se olvide de pedirla.
- Ohhh! Es verdad!! Le pondré diez estrellas a Esteban, es un ángel de delivery.
- jajajaja Team Esteban - dijo haciendo un extraño baile- quieres saber sobre la fiesta?
- Si si , de que se trata- nos pusimos a comer mientras ella comenzaba su relato.
- Recuerdas al chico ese que es relacionista- yo me quedé pensando cuando me habló de el- bueno no importa. En una semana harán una mega fiesta en el Hilton! Tengo entradas para ti y para mí.
- Como las conseguiste? - la mire de forma acusadora.
- Menos averigua Dios y perdona- canto- estará lleno de empresarios y hoteleros, a parte de ser ricos ,algunos están que se parten.
- No es mi intención encontrar un magnate y con respecto a conocer de forma casual a alguien me lo estoy replanteando.
- Replanteando?! Estamos a 8 días de la fiesta, no hay tiempo de pensar nada. Ya has pensado mucho.
- Bueno, bueno, está bien. Iré relajada, sexy y empoderada. Si me gusta alguien me dejaré llevar por las emociones.
- Esa es mi perra empoderada- lo dice como una madre hablando con orgullo de su hija.
- Eres una mala influencia lo sabes
- Soy tu mentora y tú conciencia.
- No sabía que tenía una conciencia tan pervertida.
- Y no sabes lo pervertida que puedo ser, así que ve tomando nota. Que la vamos a pasar G E N I A L!!!
Pasamos un rato más hablando de la vida, organizando nuestra próxima compra, ya que necesitábamos unos vestidos nuevos, al igual que pedir turno en el salón de belleza. Me sentía entusiasmada, quería dejar mi error atrás y seguir. Una vez en mi cama, mientras miraba el techo me jure   disfrutar de mi soltería, de mis amigos, de mi independencia, de lo  afortunada que soy. Con ese pensamiento me dormí.

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Tu me cambiasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora