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Roma

El día llegó, después de dos semanas tenemos el dichoso viaje, se ha pospuesto por unos inconvenientes que tuvo Alec.
Vladimir ha hecho su mejor esfuerzo, lo veo hacer caras cada vez que hablamos del viaje o cuando Alec me llama para ultimar detalles, no puedo estar más feliz, me ama y quiere ser mejor hombre por mi.
En el aeropuerto Vladimir se comía con la mirada a Alec,  se ha portado bastante bien, solo me beso y me metió la lengua hasta la garganta y me dijo casi a los gritos que me amaba y que cualquier cosa no dudará en llamarlo. Antes de irse se acerco a Alec y le dijo algunas cosas que no logré escuchar. Por la cara que tenía Alec y Vladimir estoy segura que eran amenazas, es realmente intenso este hombre.
Una vez en el avión me disculpe con Alec por la escena de Vladimir y solo sonrió y juro que no fue nada, que le causa hasta gracia la actitud de Vladimir.
El viaje duró varias horas y fue muy tranquilo, bueno lo más tranquilo que puede ser un viaje luego de la escena de Vladimir y la actual, mi jefe recostado en mi hombro durmiendo, podría ser todo más incomodo.
Me da mucha pena sacarlo, no esta haciendo nada mala, pero no deja de causarme incomodidad, a la mente llega la cara de Vladimir y me tenso.
Me obligo a dejar de sentirme así, no estamos haciendo nada malo, el hombre está cansado y nada más. Aunque pienso en que si viera a Alessa así con Vladimir a pesar de que él terminó su sociedad y todo eso que tenían y siento mi sangre hervir.
Aprovecho que la azafata se acerca y le pido agua, me muevo a propósito para que la cabeza de Alec caiga y reacciona ante el cabezaso 
-Disculpa me dormi - dijo masajenado su cuello y sonriendo de lado - he tenido un día de locos antes de salir.
- No te preocupes, tampoco fue mucho - la azafata llega con mi agua, le agradezco y comienzo a tomarla obligadamente, ya que no tenia sed.
- Me das un poco - Alec mira mis labios y eso me pone tensa - me dio sed.
- Si si - casi le tiro el agua encima - toma tranquilo.
- Solo faltan dos horas más de viaje, espero no volver a dormir encima tuyo - bromeó aunque a mi no me causó gracia- aunque debo reconocer que dormí muy bien.
No dije nada, solo le di una sonrisa de lado, me estaba arrepintiendo de haber venido, se que es tonto e inmadura mi actitud, este hombre es amable y ocurrente, no quiere nada conmigo, Vladimir me metió en la cabeza que el quiere algo mas conmigo y que es capaz de todo para joderlo porque se odian.
Llegamos a México, es un lugar tan rico  no sólo culturalmente, la gente es amable y los paisajes son hermosos. El hotel es soñado, me ha tocado una de las suite, la verdad que Alec se la jugó en darme esta habitación.
En cuento llegue tenía varios mensajes de Vladimir, mis padres y amigos, conteste a todos y llamé a mi hombre de las cavernas.
- Hola mi amor, como estas, como llegaste? - se escuchar ansioso- paso algo ?
- Nooo, tranquilizate loco - me rio de lo maníaco que puede llegar a ser - quería llamarte antes de entrar a bañarme.
- Y porque no hacemos video llamada? - maldito pervertido pensé. Aunque ya me encontraba mordiendo mi labio inferior- ya te extraño y quiero ver tu coño, que es mi coño.
- Nunca he hecho eso - mi cara era roja como un tomate- yo también te extraño.
- Me alegro ser el primero en hacerte tocar y venir por teléfono- es tan guarro que me exita - ahora te llamo nena, ve acomodándote.
- Prendi la computadora y me acomode en el sillón de un cuerpo, la computadora en frente y rápidamente quite mi blusa, quede sin bragas, mis medias de liga, falda tubo y brazier de encaje, me sentía una actriz porno. Le conteste a Vladimir que ya estaba lista y  a los segundos mi computador tenía su llamada esperando.
- Estas bellísima- Vladimir estaba sin camisa, sus pectorales y brazos son tan gruesos y venosos queme podría venir de solo verlos, soy una maldita calenturienta- estas caliente nena?
- Mm mm - respondí haciéndome la inocente .
- ¿No quieres hablar ? - La mirada azul de Vladimir parecía brillar más- quiere que te diga lo que debes hacer - asentí.
Muy bien, muéstrame un pecho primero, pero hazlo lento, juega con el bretel.
- ¿Así? - fue inevitable seguir en mi papel de mudita- le gusta lo que ve señor Antonov?
- Claro que me gusta Señorita Petersen - claramente su bulto estaba más que activo - me calienta su vos de niña traviesas.
- Soy una niña muy traviesa - me levante la falda un poco y metí mi dedo índice en mi boca - le gusta?
- Si, me encanta - contesta Vladimir gruñendo y masajeando su bulto,  tengo mi pecho izquierdo descubierto, la falda levantada y chupo mi dedo como si fuera su pollo, pero que carajos con esta yo tan pervertida.
- Me molesta la falda - me la estaba subiendo y abrí mis piernas delante de la cámara- ahora si.
- Ro... Roma dime que viajaste con bragas?!
- ¿En serio? Sigueme el rollo - y como su cara era un poema respondí- no, me prepare así para ti. Podemos seguir.
- Gracias a Dios nena - suspiro y seguimos con el rollo cachondo, es muy exitante, como no lo hice antes - Ahora quisiera acabarte toda, bien adentro, marcarte y tirarte hasta la última gota de mi semilla.
- Si, hazlo - mis dedos resbalaban por mis pliegues, estaba tan mojada y exitada, mi orgasmo estaba llegando - termina conmigo.
- Sii, toma - el se vino en su mano con espasmos violentos y yo me retorcía en el sillón con mis dedos aún masajesnso mi botón- Te amo.
- Y yo a ti - dije soñolenta ,golpearon la puerta y me parecio raro porque ya son casi las once de la noche - debo atender.
- Cubrete - se puso en alerta- quien es a esta hora?
- No lo se, tal vez alguien del servicio- me puse una bata para cubrir mi cuerpo mejor- debo colgar.
- No lo hagas - que hombre más terco - por favor.
- OK, dejame atender - y antes de atender baje el volumen, Vladimir era capaz de ponerse a gritar- Hola...
- Hola Roma- que hace Alec aquí- estas bien? Te veo un poco colorada. Tienes fiebre?
- Que?! No, no - tragame tierra - estaba ejercitando.
- ¿Tan tarde? - estaba dudoso - Bueno, cada quien no. Venía a invitarte a salir a un bar.
- Pero mañana debemos madrugar Alec - este hombre esta loco- además estoy cansada.
- Bueno es que la reunión de mañana se suspendió- dice apenado- y como no haremos nada hasta que la reunión se reprograme me pareció entretenido hacer algo.
- He,no se - recordé a Vladimir - no, no, estoy muy cansada.
- Entiendo - sonríe- cualquier cosa si te arrepientes me llamas.
- Gracias por la invitación- le sonreí por cortesía- cualquier cambio de planes te aviso.
Cierro la puerta y temo acercarme a la computadora, cuando lo hago Vladimir  no esta, pero escucho que esta tirando algo.
Entra al campo de visión y lleva una botella en la mano.
- Sabia que este viaje era un montaje para tenerte cerca - dijo entre dientes y tomando un trago - te vuelves ahora.
- No me volveré- me senté enojada - deja de tomar y relajate solo fue una invitación.
- ¡¿No lo entiendes Roma?! - levanto la voz y eso no lo permitiré.
- ¡El que no entiendes eres tú - grite - no me mandas y ahora me voy. Chau!!
Corte la llamada, odio que se ponga así, si me conoce sabe que no saldría con mi jefe en plan amigos, vine a trabajar no a reventar la noche.

Tu me cambiasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora