7

3.1K 266 177
                                    

El alfa se levantó de la silla y se subió a la cama quedando a su lado, se puso de rodillas. Una de sus manos fue hacia el rostro del pequeño y delicadamente tapó su nariz mientras tapaba mínimamente su boca. Pasó poco tiempo hasta que el Omega se despertó por la falta de oxigeno, justo como el mayor esperaba.

Dust: ¡¡¡JAJAJAJAJAJA!!! Debiste haber visto ti cara niño- Dijo entre risas. Mientras el niño miraba aterrorizado al mayor con sus ojos zafiro, Dust se dio cuenta de esto- Murder.

Blue: ¿H-he?- Respondió como pudo aún con miedo-

Dust: Ese es mi nombre, Murder, pero puedes llamarme Dust.

Blue: O-Oh, Dust...- Lo miró directamente a los ojos mientras daba una tímida sonrisa, una manera de distraer al contrario-

Dust: exacto, ese soy yo- Dijo cerrándolos ojos mientras mostraba una sonrisa-

Berry aprovechó ese instante de debilidad para agarrar la lampara de la mesa de noche y golpear con todas sus fuerzas la cabeza del mayor para luego salir corriendo lo más lejos posible de ese tétrico señor.

El pequeño Omega corría por cada pasillo oscuro en busca de una salida o una zona segura, tenía mucho miedo, se había arriesgado y ahora lo único que podía hacer era mover sus pies frenéticamente esperando poder salvarse. Llegó hasta unas escaleras de caracol y desde debajo se podía ver el pasillo de abajo. Vio como un hombre de cabellos negros y vestido con una extraña bata con capucha. El pequeño bajó las escaleras rápidamente en busca de ayuda, el desconocido miró inexpresivamente al niño y dejó que se fuese pero una tercera persona entró en la extraña escena y jaló al niño hacia el. Killer tiró al niño al suelo dejándolo entre el desconocido y el.

Killer: Hola de nuevo Reaper, hacia tiempo que no te veía por aquí.

Reaper: Holo Killer, tienes razón, hace tiempo que no te veía.

Killer: ¿Porque no has intentado detenerlo?

Reaper: No me importa mucho ese niño, que haga lo que quiera- Reaper aprovechó la conversación para sacar el tema- Así que ahora eres un Omega- Killer se quedó callado dándole a Reaper la respuesta necesaria- Solo vengo aquí por negocios económicos, no me importan los ideales de tu jefe así que te seguiré tratando como un compañero.

Killer: Gracias...- Una sonrisa tímida escapó de sus labios, por lo menos una persona lo seguiría tratando de la misma manera-

Los dos se despidieron y Reaper se fue de la mansión, pero Killer no pudo ni acompañarlo a la puerta de afuera, por si Nightmare lo veía salir. Aún así Killer se fue de nuevo por los pasillos, siguiendo el olor a arándanos recién recogidos que emanaba el omega que se había escapado. Llegó a donde el estaba, apartado en la punta de una habitación, abrazando sus propias piernas mientras sollozaba en silencio. Para su mala suerte conocía perfectamente a ese niño, y bien que lo conocía.

Killer: Blueberry...- Dijo mientras os recuerdos azotaban su mente, el pequeño al escuchar esa familiar voz alzó la vista-

Blue: Killer... ¡¡¡HERMANO!!!- El pequeño se abalanzó hacia su hermano mayor para abrazarlo, sentía que por fin había encontrado a alguien, podría salir de ahí con el, pero sus esperanzas se rompieron al notar como este le empujaba para luego darle una leve cachetada-

Killer: Ni se te ocurra tocarme.

Nightmare: ¿Killer? ¿Qué esta pasando?- Dijo Nightmare entrando en la habitación al escuchar el jaleo-

Killer: Nada importante, yo me retiro.

Killer y Nightmare se fueron, por caminos separados, dejando al pequeño solo mientras se fregaba la zona golpeada. Un jalón en el pelo le hizo reaccionar, giró la vista viendo a un Dust muy enojado. Dust se llevó a su juguete de nuevo a la habitación mientras Blue pedía a gritos y llantos que lo dejase ir. Dust lo tiró a la cama de nuevo y se sentó en su silla.

Dust: Mira, no me enfades de esta manera ¿Entendido? Voy a perdonarte ahora pero si no quieres que te haga daño tendrás que ser un niño bueno- Blue solo asintió varias veces temeroso de sus palabras, si quería salir bien de esta tendría que ser obediente-

...

Error: Solo di Error.

Ink: Ruru

Error: Eso no, Error.

Ink: Ruru

Error: Er-ror

Ink: Er-ror

Error: Muy bien, ahora todo junto.

Ink: ¡Ruru!

Error se tiró a su cama rindiéndose, llevaba media hora intentando que su mascota dijese su nombre bien pero a todo solo respondía "Ruru". Mientras Ink estaba de rodillas delante de su amo, mostrando una radiante sonrisa al decir el nombre de este.

Error decidió dejar sus clases de lengua y pronunciación de lado levantándose de la cama hasta llegar a un cajón de su escritorio. Agarró un peluche completamente vacío y blanco, varias telas de diferentes colores, dos botones y una aguja, pero no le quedaban hilos. Dejó sus cosas en la cama dispuesto a ir a comprar pero en el proceso se topó con los cabellos de Ink. Eran blancos y sedosos, sobre todo, bastante gruesos.

Error se sorprendió al ver sus cabellos tan bien cuidados teniendo en cuenta que vivía en un lugar de tanta tortura como el de experimentaciones y peleas de alfas. A Error le daba demasiada pereza ir a por hilos a la tienda y esos blancos y perfectos hilos que tenía como cabellera su mascota le eran demasiado tentadores. Feliz por la idea se fue a por un espejo y peine.

Media hora después Ink estaba con su espejo en manos, mirando como su pelo ahora estaba un poco por debajo de sus hombros y tocando sus puntas y el espacio que había dejado el nuevo corte. También había aprovechado también para vaciar un poco su cabeza ya que tenía mucho pelo para tener los cabellos tan gruesos y pasaría calor por lo que pasaba su mano entre sus cabellos. El agarró los mechones de pelo y los comenzó a agrupar en trenzas. Guardó todos los grupos de hilos en una caja menos uno para comenzar a hacer ese nuevo muñeco de trapo.

Un simple omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora