¿Cómo una chica tan alegre y radiante pudo involucrarse con personas como nosotros? Era esa pregunta que rondaba en mi cabeza siempre en ese tiempo pero ahora...
Después de años
Me arrepiento de no haberla protegido
Y en ocasiones de haberla podrido
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Kati
Había sido extraño, había sido extraño la manera en que Theo me miraba bajo el agua, me parecía extraño como su toque cambiaba de sensación, me parecía extraño como no me había dado cuenta que el deseaba un beso...
Hasta que me lo dio.
Nunca había pensado en eso, jamás se me había pasado por la cabeza que Theo sentia algo por mi, probablemente haya dado una señal.
Pero en estas cosas soy extremadamente ciega. Realmente, era muy extraño.
El me había besado, bajo el agua y a él último rayo de luz que iluminaba el horizonte, realmente había sido romántico. Pero para mi, solo fue un beso.
Aunque, fue el primero, en mi vida había besado a alguien, por eso era extraño, no es por que quiera tirar la amistad diciéndole esto.
Por que realmente la aprecio, lo quiero mucho, pero no de lo forma que quiere, se que debe de doler. Pero es eso o vivir engañado.
Ayer después de eso, decidimos olvidarlo, hacer como que no había pasado nada, culpar al alcohol en su sistema.
Al poco tiempo Boris había llegado, pero aunque el no lo vio, nos sentimos incómodos.
Era algo que no me gustaba hacer, pero sentía que era lo mejor, para evitar mal entendidos y más cosas:
Ocultarle el beso...
Se que puede ser mala idea, pero no creo que sea para tanto, no quiero que todo se vuelva incómodo de parte de los 2.
Hoy, era un nuevo día, estaba vestida, me veía en el espejo, aún no tenía mi chaqueta.
Me puse de espaldas al espejo, pero giré mi cabeza para mirar mi reflejo, allí estaba... La cicatriz de mi pasado. Sabía que si la miraba más tiempo, iba a empezar a llorar, iba a caer y gritar de la tristeza y frustración.
Solo me puse la chaqueta, tomé mi mochila y empecé a bajar las escaleras, pensando en tantas cosas. Escuche el ruido de una taza, cuando la dejas en la mesa.
Tenía miedo, no precisamente por que fuera un ladrón... Si no.
-Ah, aún estas aquí-Dijo mi madre, sorprendida por mi presencia aún.
-Si, yo... ¿Por qué no estabas?-Pregunte y en cada palabra que decía iba bajando más el volumen de mi voz.
-...¿No deberías estar en la escuela?-Como siempre, mi madre evitaba mi pregunta, siempre quise gritarle, obligarle a que me diga, pero sabía que era difícil para las 2, simplemente no iba a hacerlo.
Afortunadamente el autobús estaba llegando y fui corriendo subiendo a el, me senté donde siempre, a un lado de Theo.
-¿Estás bien?-Preguntó Theo, pude sentir su mirada y ceño fruncido.
Normalmente estaría feliz de verle, lo hubiera abrazado, pero ahora, estaba triste, no quería que el lo supiera, así que solo le sonreí.
-Estoy bien-No lo estaba, pero aún así se lo dije.
Se que el no me creyó, por que tomo mi mano y las entrelazó, se sentía reconfortante, el era un gran amigo.
Estaba viendo por la ventana, mirando el cielo azul, las nubes que lo adornan, era precioso, pronto, un nuevo estudiante subió. Era Boris.
-Potter-Le dio un pequeño golpe el el hombro, se sentó el en asiento de atrás, yo me volteé para mirarlo-Kotenok-Entonces, el also su mano, la posó en mi cabeza y desordeno mi cabello.
Senti mi corazón latir al mil, mis mejillas tornarse rojas y le sonreí, la sonrisa más nerviosa que pude haber hecho en mi vida.
Los chicos empezaron a hablar, yo miraba feliz atravez de la ventana, estaba inmersa en todo lo que había alrededor.
El autobús paró, dando a entender que debíamos bajar, no fue hasta que me pare que me di cuenta que el agarre de Theo y mío seguía intacto, sentí la mirada de Boris sobre nuestras manos. Quería quitarla y decirle que no pasaba nada.
Pero eso sería algo cruel para Theo, no quería verlo triste o ser irrespetuosa con el, así que las dejé así y cada quien fue a su clase.
...
Estaba sentada en el comedor, esperando a que Boris llegase, realmente quería verlo, hoy no compartíamos ninguna clase, así que en todo el día no lo vi.
Mientras, Theo y yo hablábamos sobre su clase de Matematicas, que odiaba las ecuaciones y que todo sería fácil si no tuviera letras.
Estaba de acuerdo, la verdad, no sé me daba muy bien hacer eso, ¿Quién lo inventó? Quisiera matarlo.
Mientras escuchaba, miraba de vez en cuando los alrededores, no lo veía por ningún lado, era extraño, la última vez que hizo eso el...
Y justo como lo pensé.
Después de que Kylie entro, tras de ella iba Boris, con una sonrisa y el cabello más desordenado de lo normal.
En ese momento, sentí una punzada en el pecho y un nudo en la garganta, Theo al voltear atrás y comprender que paso, me miró con tristeza, sabía lo que sentía y era una mezcla de culpa y dolor.
Es ese momento donde sientes que se te colapsan los pulmones, el corazón se cae, las manos se congelan y se acelera la respiración. Es el momento en el que te desilusionas.
Y es que, en algún momento, pensé que sentía lo mismo por mi, que tonta fui.
Para el solo soy la niña dulce e inocente, la más adorable y abrazable, se que lo soy, me encanta ser así.
Pero ahora, quiero que me vea como una mujer, no una niña, quiero que me vea, como ve un chico enamorado a su persona favorita en el mundo.
Respire hondo, muy hondo, hasta que sentía que ya no podía más, y solté el aire que contenía.
Pensé que Boris vendría con nosotros, pero se quedó con sus amigos o amigos de Kylie no lo sé.
Creo que así está mejor, si venia, no sabría decir si podía contener las lágrimas o no.
Este día, había iniciado mal y desgraciadamente terminó igual.
En todo el día, no lo vi, aprecio que Theo haya querido animarme, y aunque antes hubiera preferido estar en su casa solo con el, ahora no importaba el ambiente entre mi madre y yo, quería estar acostada en mi cama.