42. Es una orden

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-El lugar al que viajamos esta noche es peligroso en extremo y voy a llevaros conmigo con la condición debéis obedecer todo lo que os ordene sin rechistar. Si os digo que corráis, corred. Si os digo que os escondáis, os escondéis. Si os digo que me abandonéis, me abandonáis

-Así será, no te preocupes Albus.

-Tu palabra Harry.

-Te doy mi palabra.

-Agarraos de mi brazo.

-Pensé que no podíamos aparecernos en Hogwarts-les dije un tanto confundida.

-Ser yo tiene sus ventajas-ambos le sonreímos antes de tomar su brazo.

Aparecimos dentro de una cueva al lado del mar embravecido.

Albus sacó un cuchillo y empezó a cortarse la mano-¡Albus!

-Es el precio que se paga por entrar, además está pensado para debilitar al visitante.

-Debiste dejar que lo hiciera yo.

-Oh Harry tu sangre es más valiosa que la mía-restregó su mano por la pared y esta empezó a desmoronarse, la pared daba a una especie de la sala de prismas y cristales que estaba rodeada por un lago. Albus lanzó una luz para poder examinarlo correctamente, la luz se paró en una isla a pocos metros.

-Tenemos que llegar a hasta allí.

-¿Cómo?-Albus telepáticamente hizo que una cadena brotará de las oscuras aguas.

-Tirar de ella-seguimos sus ordenes y pocos segundos después empezó a salir una barca del agua.

Por fin llegamos a la isla hecha también de prismas y cristales, en el centro de la misma había una especie de bebedero, ahí debía de estar el horrocrux

-Ha de ser bebida toda el agua. ¿recordáis la condición que os puse para venir conmigo? Esta poción podría paralizarme, hacerme olvidar para que hemos venido, provocarme tanto dolor como para suplicaros que me matéis. No os mostréis indulgentes, es vuestra obligación que siga bebiendo esta poción aunque tengáis que hacérmela tragar a la fuerza ¿entendido?

-¿Por qué no la podemos beber nosotros?

-Porque yo soy más viejo, listo y menos valioso que vosotros- agarró la concha que estaba en el bebedero y empezó a beber, poco después de comenzarla cayó en el suelo con pequeños espasmos.

-¡Profesor!-Harry se acercó a el, yo fui tras la concha para llenarla y hacerle beber.

Harry me miró-Nos lo ha ordenado...-Harry se encargaba de sujetarle mientras yo le daba de beber

-No quiero más-se quejaba Albus.

-Lo ha dicho usted ¿se acuerda?

Por mi quinto paseo hacia la poción Albus volvió a quejarse.

-No, no porfavor.

-Albus ya queda poco-le acerqué la poción.

-No me obligues.

-Lo sentimos profesor.

-No, no, no-cada vez iba bajando el tono de voz a cada no que decía- Por favor mátame ¡mátame ya!

-Nadie va a matar a nadie-esperaba que la poción no fuera para la demencia senil, porque no estaba bien lograda.

-Uno más Albus, uno más y se acabará esta tortura-el negaba con la cabeza-Por favor...-acabó cediendo.

-Harry agua, agua.

Este se levantó a coger el horrocrux y lanzar un aguamenti al bebedero, pero por alguna extraña razón la cocha no recogía el agua.

Elegida para salvar  ~  Cedric DiggoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora