❝ᴘʀᴏᴘᴇʀᴛʏ❞ ||【InkError】

✤sɪxᴛᴇᴇɴ✤

El infante estaba feliz por volver a verlo pero dentro suyo sentía que algo no estaba bien, estar al lado de Ink no se veía tan mal pues el se imaginaba jugar con él y que ambos solo tengan el tiempo para ellos, pero al ver por la pequeña ventana que había al lado, las cosechas por las cuales pasaban, el viento que las hacia ir hacia una dirección distinta a la suya, sentir que se alejaba del lugar en el cual perdió a su madre le hacía sentir emociones confusas, se cuestionaba de que debía sentirse bien por haber salido de ahí pero no lo estaba, y la razón era de que Nightmare se quedo solo allá.

—Nightmare estará solo. . .— Susurró para el mientras mantenía su mirada baja viendo cómo jugueteaba con sus manos.

Ink no ignoro ese comportamiento y pudo escuchar aquel susurro. ¿Nightmare? ¿Quien era Nightmare? No entendía a quien se refería el moreno pues no había escuchado hablar de esa persona, la actitud que esperaba en el moreno no apareció por lo que suponía de que era un amigo suyo, no había pensando en eso y ahora no sabía que hacer, solo tenía planeado llevarse a Error a la casa de un primo suyo, no quería llevarle más problemas por lo que tarde o temprano debería decirle al menor de que no podía hacer nada por él. 

Mientras tanto en el palenque, Nightmare estaba en su hamaca leyendo un libro viejo que había dentro de la barraca, como nadie la utilizaba el la había agarrado como suya, sus difuntos padres le habían enseñado a leer y escribir un poco, estaba contento de tener un libro sin importar de que tratase para enriquecer su enseñanza, Hate ya estaba durmiendo a un costado suyo en otra hamaca, los demás también lo hacían ya sea en la hamaca o en el suelo, pero no podía dormirse aún porque Error no entraba para descansar, sintiéndose un poco ansioso dejo el libro para ir a buscar a Error y que descansará, no era normal que el menor estuviera tanto tiempo afuera y más en la fría noche, con sigilo paso entre los demás y salió de las barracas en busca de su amigo, pero al no encontrarlo su ansiedad subió más, no sabía si debía gritar, no quería llamar la atención de los capataces y que estos los castigarán, y mucho menos quería llamar la atención de su amo, siguió y siguió buscando entre los cultivos, los animales y los lugares a los cuales tenían permitido estar, pero seguía sin encontrarlo, el sudor ya bajaba por su frente y sin saber que hacer dejó su espalda caer en la puerta de la barraca cuando regreso, miraba un lugar fijo tratando de pensar en donde diablos pudo haberse metido el menor, pero nada se le venía a la mente, tan perdido estaba que no notó la presencia de Hate.

—¿Ya te diste cuenta de que Error no está?

Darse cuenta, acaso. ¿El sabía dónde se metió el menor? Limpio su frente con su antebrazo para verlo fijamente, aquéllos ojos negros tan profundos que no mostraban ningún sentimiento. —¿Sabes dónde está? Si lo sabías. ¿Porque no me lo dijiste?— Estaba un poco furioso, sus cejas estaban arrugadas pues sentía que había echo todo lo anterior por nada. 

Hate mantenía su mirada sin mostrar arrepentimiento de su decisión, pero ver el rostro del contrario tan enojado, era una emoción que antes no vio en él por lo que fue difícil evitar reírse, tapándose la boca para que no se escuchará tan fuerte regreso su atención a la pesadilla. —Hace horas, vino ese niño albino en un carruaje para llevarse a Error. ¿Recuerdas lo que te dije cuando llegaron al palenque?

Nightmare se sorprendió tanto que su rostro mismo lo demostraba. ¿Error había aceptado irse con el albino? ¿Dejándolo solo a su suerte? No, no podía ser cierto pues el consideraba a Error como parte de su familia, simplemente no podía creerlo, seguro en un día él regresaría para poder irse los dos, solo quería pensar eso. —Él no me haría esto. . .estoy seguro que regresara.— Determinado apretaba sus puños viendo al contrario, confiaba en Error.

—Night, Night, Night, si Error regresara, sería un gran idiota. ¿Sabes que si lo hace será asesinado? Literalmente se escapó, y el es una propiedad del amo. ¿Tú crees que arriesgaría su vida por tí?— Ya no mantenía su sonrisa y tratando de que entienda el de ojos verdes puso su mano en el hombro del menor para que entendiese.

—¡NO!— Grito susurrando, estaba enojado y no quería seguir escuchando las ridiculeces del otro, se alejó de Hate para entrar a la barraca y regresar a su hamaca para dormir y poder pensar bien el día siguiente. No podía imaginar que Error lo abandonará, era imposible, ambos eran familia y eso lo sabía muy bien Error, solamente no podía dejarlo solo. 

Al día siguiente, Error había despertado en las piernas del albino, Ink había usado sus muslos como una almohada para el menor para que estuviera cómodo, cuando lo vio despertar sonrió y le acarició sus cabellos. —Buenos días, en pocos minutos ya estaremos en la casa de mi primo.— Dijo sonriendo mientras seguía acariciando cuidadosamente el cabello del menor.

Error bostezo y volvió a cerrar sus ojos por la tranquilidad que le daba aquellos mimos del mayor, sentía tanta paz que no podía pensar en nadie más, quería estar así siempre.

Ink tomó su pañuelo remojando un poco la punta para limpiar el rostro del menor, con cuidado pasaba por sus ojos y mejillas para que despertara completamente. La noche anterior le había explicado un poco sobre a donde irían, de que su primo los ayudaría dejándolos quedarse en su casa por un tiempo, el hogar de su primo era un buen lugar pues era alejado del pueblo en donde vivía y la madre de su primo era una hermana de su madre, una persona a la cual su padre no le gustaría visitar, estaba seguro de que no los encontrarían un buen tiempo, aún tenía que planificar más su escape, pues había decidido escaparse de su familia al lado de Error, esa parte no iba a decirle al contrario pues no quería asustarlo, tanta presión sentía al lado de sus padres que no tuvo más opción que escapar. 

De solo ver a Error, estaba seguro de que podría cuidarlo el mismo, irían a otro país a hacer una vida tranquila, no sabía cómo pero se prometía el mismo realizar ese sueño.