✤ғᴏᴜʀ✤

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Los padres de ambos niños buscaban a la mujer con ayuda de otros hombres, el padre de Geno quería encontrarla, el no iba permitir que se salga con la suya, después de haberla tratado de forma especial se sentía traicionado y ridículo, se negaba a sentirse abandonado o rechazado por una mujer negra cualquiera. Los demás hombres que tenían poder en el pueblo no entendían el porque tanto escándalo por esa mujer, pero eso si, una vez que la encontraran iban a matarla. 

Vivían en una isla por lo cual fue imposible encontrarla, demorarían semanas en buscarla y a los hombres de poder se les hizo ridículo perder el tiempo por solo buscar a una mujer, estarían de acuerdo en hacer la búsqueda si la cantidad fuera grande, pero hablaban de una mujer, solo una, no le tomaron importancia y dejaron pasar aquella fuga. Los demás esclavos fueron interrogados por si sabían a donde pudo ir la mujer, pero todos se negaban, nadie hablaba con ella por temor. Marvul se sentía furioso, la única mujer que lo satisfacía completamente había desaparecido.

En cambio Roboot se sentía aliviada, logro con éxito esconderse de lo guardias que la buscaban y con cuidado llego hacia el palenque que estaba entre la naturaleza de la isla, el lugar estaba rodeado de grandes paredes de madera, estaba vigilado por los mismo hombres de color y tenían pequeñas trampas en las entradas por si encontraban el lugar. A la mujer la dejaron pasar, pues ella era hija de uno de los hombres que protegían el lugar, al comienzo la demás personas no querían que se quedara porque creían que la habían perseguido las personas blancas, pero ella estaba segura de que nadie la siguió, no tuvieron de otra que confiar en ella ciegamente, mientras la mujer solo le revelo a su padre sobre el embarazo, ella aceptaba que si nacía como una persona blanca se iría de ahí porque no quería traerles problemas, pero si nacía de su mismo color de piel, se quedarían para siquiera su niño tuviera una infancia normal. Su padre le rezaba a todos sus dioses para que el niño naciera de piel morena, no quería perjudicarlo, quería protegerlo, si nacía de piel blanca, las mismas personas del palenque lo iban a exiliar del lugar junto a su hija por haber traído un niño blanco, solo quería a su hija y nieto al lado suyo, le prometía a sus dioses que daría su propia vida por ellos. 

La espera los tenia ansiosos, la mujer se alimentaba correctamente de los frutos de la isla, acariciaba su propio vientre hablando con su niño, su nacimiento era muy esperado, los meses pasaron tranquilos, sin ninguna noticia de los blancos. Y a si siguió hasta que llego el día de dar a luz, como si las suplicas de su padre fueron escuchadas, el bebé nació siendo varón y de piel morena, fue una gran bendición para su madre, no sabia como explicar los sentimientos que sentía al cargarlo en sus brazos, al escuchar su pequeña respiración, un hermoso niño que no tenia culpa de nada, ella misma se aseguraría de darle una buena vida, trataría de darla una vida digna, una que no sea como la que ella vivió. 

Su niño fue nombrado Error, el nombre fue dado por el padre de la mujer, Reboot no comprendía muy bien su significado, pero se escuchaba lindo y así se quedo. 

Talvez sea una madre primeriza, pero se encargaba de darlo todo lo que ella no recibió, en el crecimiento de su niño cantaba para él, besaba su pequeño cuerpo dándole mimos, le daba de comer deliciosas y jugosas frutas de la isla, jugaba con su niño en el rio mientras se daban un baño, su bello niño era único, y eso era peligroso. Error había nacido con los ojos de color ámbar, el mismo color de ojos que tenia el hombre blanco que la embarazo, al comienzo fue un problema que discutió con su padre, pero ella lo defendía, no iba a permitir que hicieran sentir mal a su niño solo por el color de sus ojos, para ella era perfecto, no importaba si tenia la mirada del hombre que la violaba, ella lo amaba tal y como era por ser su niño. 

—Mamá.— Hablo el menor llamando a su progenitora, había armado una diadema de flores como las que le enseño su madre. 

—¿Qué sucede?— Fue donde su niño para sentarse a un lado de el y vio lo que tenia en sus manos, sonrió para el porque había logrado lo que le había ensañado. —Ow, mi niño si que aprende rápido.— Beso la frente de su niño orgullosa, agarro la diadema y se la puso en la cabeza del menor. —Error es un niño encantador.

Habían pasado aproximadamente seis años desde que escapo de la haciendo de su antiguo amo, estaba viviendo feliz en el palenque al lado de su padre e hijo, estaba dándole un buena infancia a su niño, Error jugaba con los demás niños, aprendía cosas que serian importantes para un futuro, recibía amor y más. 

Error era un niño bastante curioso al igual que los demás niños, tenia un amigo que era unos tres años mayor a el, Nightmare tenia a sus dos padres a su lado, de lejos se podía ver su felicidad al lado de sus progenitores, en cambio el también lo era pero solo con su madre y abuelo, no iba a negar que esperaba algún día ver a su padre y llamarlo como tal, pero su madre aun se negaba a contarle sobre su existencia, también tenia curiosidad sobre las demás personas, escuchaba historia de los demás adultos sobre las "personas blancas." Escuchaba que eran personas malas, que asesinaban y torturaban a las personas de piel negra como la suya, tenia miedo pero también curiosidad, tanta que jugueteando con Nightmare, sacaron el tema sobre esas personas blancas, querían ver como eran. Y planeando un plan decidieron salir del palenque para conocer a esas personas. 

—¿Estas seguro de hacerlo? Sabes que no habrá vuelta atrás.— El mayor veía al menor, ambos niños estaban escondidos en la entrada que era la misma salida del palenque, estaban con un poco de miedo pero con tanta determinación que no iban a dar marcha atrás, pero aun así dentro suyo, esperaba que el menor se arrepintiera y olvidara la idea, pero no fue así. 

—Yo no me arrepiento de mi palabra, Nightmare.

Ambos niños tenían sus corazones latir de forma acelerada, sentían una adrenalina por cometer tal travesura, y sin arrepentirse de sus palabras salieron del lugar siendo cuidadosos con que nadie los viera, los adultos se encontraban haciendo sus deberes, sus madres estaban recolectando las frutas por lo cual era una oportunidad única. 

Si hubieran sabido las grandes consecuencias que traería aquella fuga hacia el pueblo de las personas blancas, no hubieran pensado en salir del palenque. 













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Ya era hora de que apareciera Error.  👀

❝ᴘʀᴏᴘᴇʀᴛʏ❞ ||【InkError】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora