✤ғɪғᴛᴇᴇɴ✤

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Pasaron días en los cuales Ink no pudo ver a Error, ya sea porque este mismo lo evitaba cada vez que era buscado por el albino o era Geno quien lo llevaba a otro lugar alejándolo del moreno, el que haya hecho tal pregunta lo dejo desconcertado, el no tenia esa clase de intenciones pues veía a Error como si fuera su hermano menor, uno al cual debía proteger y alegrar, pero las cosas fueron malinterpretadas llegando a donde estaba. Pero el pensar que podría casarse con él, con otro hombre, nunca paso por su mente algo parecido, que el recuerde nunca vio a dos hombres juntos demostrar su amor, tampoco escucho de que era posible casarse dos personas del mismo sexo, y si lo fuera a presenciar no le daría asco ni incomodidad, pues después de todo lo importante era que se amaran y tengan el valor para realizar tales actos a presencia de los demás, hasta podría verlo como algo admirable. 

Ink veía el techo de su habitación mientras ordenaba sus pensamientos, quería tener a Error en su casa para que viviera con el de forma cómoda y no este desgastando su niñez en la casa de Geno, pero no podía hacer nada pues ahora era una pertenencia del padre de Geno, talvez su padre podría hacer algo, pero no sabia que excusa poner para no tener problemas, si su padre lo veía o escuchaba que estaba dando todo su tiempo libre a un niño de color, se pondría muy descarado con el pues su padre hacia todo lo posible para integrarlo con las demás familias que eran muy importante por la sociedad en la que estaba, no importaba la sonrisa que siempre ponía al estar al aldo de sus padre y las demás familias, siempre se sentía incomodo y sofocado, el hablar con otros chicos de su edad y tener que aguantar sus complejos de superioridad era desagradable, escuchar el como hacían menos a otra persona ya sea por los contactos que tenía, la forma no "agraciada" de vestir, el como es su físico o el color de su piel, todas las reuniones a las cuales debía ir por obligación de su padre eran insoportables, Geno era uno de sus pocos amigos, la poca cantidad de amigos que tenia era suficiente para el. ¿Por qué tener más? Si siempre querrán ser cercanos a tí porque desean obtener algo a cambio.

Pero Error, él era diferente, él solo era un pobre niño que había perdido a su mamá, un niño al cual le gustaba hacer coronas de flores y que no le importó que fuera un persona importante, él lo veía y trataba como otra persona normal sin nada especial, nadie merecía hacerle daño ni quitar la sonrisa de su rostro, debía de proteger aquella alegría y gracia que tenía el menor, por lo que aquel pensamiento que tuvo hace días regreso a pasar por su mente, estaba tentado a hacerlo, así podría protegerlo de los demás y estar a su lado. Sin perder tiempo agarro uno de sus agendas para planificar su plan y recursos que necesitaría, iba hacer todo lo posible para que Error tuviera una vida con libertad. 

Mientras tanto Error estaba tomando un descanso de todo el trabajo que había realizado, había hecho más de lo usual desde que se enojo con el albino, todavía no tenia ganas de querer hablar con él por lo que estuvo dando todo su tiempo al trabajo extra que realizaba para poder darle como excusa al mayor diciendo de que no tenia tiempo para pasar el rato con él, estiro su cuerpo y observo el cielo, ya estaba comenzando a ser de tarde, las nubes lentamente disminuían y el sol  bajaba, en todo el dia no había podido comer por lo que ahora tenía mucha hambre y sin nada más por hacer fue hacía las barracas para comer lo que habían cocinado las mujeres, en la entrada se encontró con Nightmare y un plato de comida, talvez estuvo esperando por el a que terminará. 

—Sabés que no debes saltarte las comidas.— Dijo mientras le entregó el plato para que ambos entraran a sentarse en algún sitio vacío. —A esta edad debes de comer mucho o quedaras así de enano.— Acerco sus dedos al rostro del menor para golpear su frente.

—¡Ay! No hagas eso.— Se quejo sobando su frente, pocas veces recibía regaños por parte del mayor y no le gustaba recibirlas. 

—¿Ahora podrás decirme porque ya no te veo con aquel blanco?— Para el era extraño ver al menor sin la compañía de ese albino, ese chico mayor siempre venia todas las tardes o mañanas para estar al lado del de ojos ámbar. —¿Se pelearon?

Error no quería responder, solo se llenaba la boca para no hacerlo, pero aquellas palabras de Nightmare fueron oídas por otra persona.

—¿El blanquito ya se aburrió de tí?— Era Hate el cual se acerco por la conversación llamativa que tenían ambos menores, el también había visto al menor de los dos con otro chico de piel blanca, era la primera vez que veía a una persona blanca con otra de piel más oscura. —No te preocupes, usualmente esas personas solo se divierten con nosotros, tal vez solo fuiste algún entretenimiento. 

Error había terminado de comer sintiéndose satisfecho, pero al oír hablar al otro chico que era un nuevo amigo de Nightmare se sintió inquieto. ¿A que se refería con que se aburrió de el? ¿Enserio fue alguna clase de entretenimiento? —N-No, estas equivocado, Ink es mi amigo, él no podría hacer algo así.— Respondió seguro de sus palabras, Ink siempre lo trato tan amable y nunca lo hizo sentir inferior como lo hacía su amo o el hijo de él. 

—Últimamente no regreso a la hacienda por tí. ¿No es así? Es muy seguro que recapacitó, porque no es normal que una persona blanca este interesada en alguien como nosotros.

—¡Te equivocas! Él no es así, él es diferente y sí, me enoje con él pero no creo que eso sea suficiente para que se aburra de mí y perdiera el interés, el no podría. . .

Nightmare con sus cejas fruncidas vio a Hate, no le gustaba como estaba atormentando al menor, se levanto y se acercó donde el contrario para irse con él y dejar solo al menor, creyó que debía dejarlo un rato solo para que tuviera sus pensamientos claros.

—El no podría, no lo haría. . .— Un poco ansioso por las palabras de Hate salió de las barracas para tomar aire, ya anocheció y lo único que había en el cielo eran las estrellas, estaba seguro que Ink no podría hacer algo así, cuando lo volviera a ver se iba a disculpar por haberse comportado de esa forma, no quería perder su amistad, después de pocos minuto iba a entrar, ya se pudo tranquilizar por ver las estrellas por lo que ahora debía ir a dormir para levantarse temprano y seguir con el trabajo, pero escucho su nombre siendo gritado por una voz familiar. —¿Ink?

Vio cómo el albino bajaba de un carruaje e iba corriendo hacía el, apenas lo vio sonrió de felicidad al ver que no fue como lo dijo Hate, Ink regreso por el, ambos se abrazaron por un largo rato hasta que el mayor lo cargo y llevo hacia el carruaje, confundido se dejo llevar, no entendía que estaba pasando pero no le importaba, no fue hasta que ambos entraron al carruaje y comenzó su rumbo para que el albino hablara. 

—Nos iremos de aquí Error, podremos estar juntos en un lugar mejor, un lugar en donde no seras pertenencia de nadie y harás lo que tu quieras.

Era verdad de que Ink nunca podría abandonar a Error. 

❝ᴘʀᴏᴘᴇʀᴛʏ❞ ||【InkError】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora