❝ᴘʀᴏᴘᴇʀᴛʏ❞ ||【InkError】

✤ᴛᴡᴇɴᴛʏ✤

Días atrás, cuando los soldados que fueron enviados por el general fueron a su hacienda, estaba confundido, mientras estaba sentado al lado de su madre escuchando el motivo de su llegada, la cual era la desaparición de Ink, no entendía. ¿Ink había desaparecido? ¿En toda una semana no pudieron encontrarlo? ¿Estaba en peligro? Sentía un poco de ansiedad por los pensamientos que surgían, el pensar que algo le hubiera pasado a su primer amor le daba escalofríos, no quería que nada le sucediera, quería protegerlo, tenerlo solo para el sin que nadie le hiciera algún daño. 

—¿Sabes a donde pudo irse? O ¿Con quién?

Trato de calmar su respiración y no pensar en lo peor, cada vez que venia Ink se la pasaba con aquel niño, y teniendo una buena memoria, no había visto en días a ese esclavo junto a los demás. Acaso...¿Podría ser? ¿Acaso Ink había sido manipulado por aquel niño? Estaba seguro que toda la culpa lo tenia ese esclavo, de que lo había influenciado a que le ayudara para escapar, y como a Ink lo veía como alguien inocente, se dejo manipular.

Se retiro de la sala para ir directamente donde el pariente de ese niño, cuando lo encontró al lado de otro esclavo no le importo tomarle del cuello de su vestimenta, poco le importaba que fuera un niño, su enojo era bastante lo cual le hacía ignorar lo demás a su alrededor. 

—Será mejor que hables donde esta ese maldito niño. 

El menor no contestó, se mantenía en silencio con un rostro serio, Geno no tenia paciencia y sin importarle nada levanto su mano en forma de puño dándole un golpe a la mejilla del contrario, el otro esclavo que estaba al comienzo con el menor se sorprendió e intento separarlos pero habían llegado los capataces y se sintió amenazado. Geno volvió a golpearlo, el de ojos verdes se negaba a hablar tanto así que estuvo mordiéndose sus labios hasta el punto de sangrar.

—¡Nightmare, solo responde!— Grito el otro que se mantenía quieto. 

El mencionado seguía sin hablar, Geno enojándose cada vez mas, porque sabia que ese esclavo sabia perfectamente a donde se había ido aquel niño con Ink, por culpa suya Ink estaba desaparecido y probablemente no lo volvería a ver y eso lo inquietaba. Siguió y siguió golpeándolo, pero no contestaba, lo tomo de su cabeza y le dio un rodillazo haciendo que cayera al suelo, Nightmare tosió sangre y perdió el aire, sus labios temblaban, como si quisiera hablar pero se negaba a hacerlo, el de ojos rojos vio como el otro trataba de recuperar el aliento hasta que por fin habló. 

—Hace dos semanas se fueron en un carruaje, no se a donde, solo vi que se fueron a altas horas de la noche. 

Geno limpió su mano con un pañuelo mientras veía Nightmare en el suelo, gasto su energía en tan poca información. —¿No quisiste soltar esta miserable información? Me haces perder el tiempo. ¡Dust! Amárrenlo a un árbol de espaldas y denle. ¡20 latigazos! 

Luego de eso fue donde los soldados para que fueran donde el general y le contara lo poco que había descubierto. 

Ahora actualmente estaba con su padre montando a caballo para ir hacia el puerto y encontrar  a Ink, el general les había contado que su hijo probablemente estuviera en el puerto y quería que lo ayudaran a encontrarlo. 

Mientras tanto Ink y Error ya había llegado, Dream se había detenido donde no hubiera tanta gente y los ayudo a llevar las pocas cosas que tenia, Ink agarraba de la mano a Error para que no se alejara y pudiera acelerar el paso, Error teniendo piernas cortas era para el difícil seguir el ritmo del albino, tenía consigo un muñeco que había hecho Halluciv y se lo había regalado, era como un pequeño Error con todos sus rasgos, el moreno observaba a su alrededor a varios adultos haciendo pequeñas filas frente a distintos barcos, iba a seguir observando hasta que escuchó gritos que provenían de atrás, cuando volteo se tropezó separándose de Ink y cuando se levanto solo vio como unos soldados tenían a Dream. 

—Ink...— Poniéndose nervioso de ver como comenzaron a llevarse a Dream, llamo al albino pero no lo encontraba, otras personas comenzaron a rumorear y a juntarse haciendo que sea imposible encontrar al albino. —¡Ink!— Abrazando al pequeño muñeco que tenia el miedo comenzó a dominarlo. 

Cuando Error se tropezó, Ink se asusto no de sentir su calidez, cuando volteo esperando encontrarlo no estaba, solo había personas comenzando a amontonarse frente suyo haciendo imposible encontrarlo, grito el nombre del menor pero no lo encontraba, mordiéndose sus labios desesperado se metió entre esas personas para encontrarlo pero nada. Hasta que alguien lo tomo de su brazo, deseo tanto que fuera Error, pero se desilusiono y su cuerpo completamente entro en pánico, el que lo había tomado del hombro era su padre. 

—Padre...— Sin darse cuenta comenzó a temblar, no esperaba para nada encontrarse con su padre, no tuvo tiempo de pensar en nada pues su mismo padre lo golpeo en el rostro, por el golpe cayo al suelo, adolorido trato de escapar arrastrándose, pero solo gritó y se detuvo cuando sintió el pie de su padre en su espalda apretando con tanta fuerza que el aire se iba cuando gritaba. —¡Agh! Duele...

—Mocoso insolente. ¿A donde creías que ibas? ¿Acaso te mandas solo? ¡Yo soy tu padre y debes de obedecerme!— Pateo a su hijo dándole en la costilla, no le importaba si las personas lo veían, el era el general por lo que no podían decirle nada. —A mi me respetas y si me vuelves a desobedecer no seré blando contigo.— Volvió a patearlo pero en su espalda, después de aquellos golpes lo vio retorcerse del dolor en el suelo, odiaba ser rudo con su hijo pero a el le enseñaron de esa forma, y si así debía educarlo para ser respetado, no le importaba hacerlo. —Llévenselo. 

Los soldados que veían en silencio a su general golpear a su hijo obedecieron, agarraron a Ink y lo subieron a uno de los caballos, también se habían llevado a Dream, mientras tanto Geno se había separado de su padre y cuando vio a los soldados llevarse a Ink fue con ellos. 

Error había sido encontrado por Marvul, pero el rubio se lo había llevado sin hacer escandalo, Error no pudo hacer nada más que bajar la mirada y ser llevado por el, estaba con miedo, no había encontrado a Ink y temía haber arruinado el viaje, si no fuera por su idiotez, si no se hubiera tropezado ahora estarían en el barco, alejados de todas esas personas malas, de pensar en como ahora Ink estaría enojado con el lo puso a llorar. 

—Agradece que te encontré yo y no el general o sus soldados, cuando lleguemos solo mantente callado, yo me ocupare del resto.— Lo ultimo lo susurro, lo único que podía hacer por el niño era protegerlo a su manera, ya había aceptado que era un hijo suyo pero por su color de piel no podía hacer mucho. 

"Mamá, tengo miedo" Pensó Error abrazando el pequeño muñeco, ahora todo iba a cambiar para ambos.