La esperanza

Recordarla

 Bill Weasley hizo descender su Therstral en una calle muggle que el ministerio de magia había preparado, otorgándole todo tipo de protección, evitando así que algún no mago los viera, aunque los muggles nunca veían nada, a su lado aterrizaron las escobas de sus hermanos Fred y George.-

-Bill- saludó uno de los gemelos- no sabíamos si al final ibas a participar en esto.-

-Fue de último minuto- confesó él con aire taciturno- debo cumplir con mi deber para con la orden- otro Threstral aterrizó y Kingsley se bajó de él, Bill no se encontraba de humor para hacer sociales así que se limitó a apoyar la espalda en la pared de la casa de Harry y esperar, al poco rato sintió llegar a Lupin, la luna llena había pasado hacia poco pero todavía se podía sentir los efluvios propios de la trasformación en él. Bill suspiró hastiado, sabiendo que la maldición de ser un hombre lobo lo acompañaría para siempre después del fatídico encuentro con Fenrir Greyback, el maldito causante de que su prometida lo dejara una semana antes de la boda, incapaz de unir su vida con un monstruo como él. Respiró profundo cuando un olor dulce a flores le inundó las fosas nasales, alguien pasó frente a el dejando detrás un rastro de ese perfume, tan distinto al cargado perfume francés que usaba su ex prometida, Bill levantó la vista y la fijo en Nymphadora Lupin, la esposa de Remus, quien llevaba una escoba en su mano derecha, olisqueó el aire, pero el aroma no venía de ella, decidió dejarlo pasar, lo último que necesitaba en ese momento era fijar la vista en una mujer. Después de ellos llegaron Ron, Hermione y su padre Arthur Weasley, pasados unos minutos la ruidosa moto mágica de Hagrid hizo aparición junto con Ojoloco y Mundungus Fletcher, un ladrón que estaba ahí por obligación, para cumplir con labor social para el ministerio.-

-No nos quedemos parados aquí- dijo Ojoloco moviéndose rápido – posiblemente haya mortífagos patrullando la zona- usa su bastón para golpear la puerta y Harry les abre con una enorme sonrisa, la primera en caer en sus brazos es Hermione, la enamorada de Charlie Weasley, sigue Ron, cuando le toca a Bill saludarlo, puede sentir en él la fragancia dulce que empezaba a perseguirlo.-

-Soy Bill Weasley- dice con firmeza intentando emular una sonrisa- quizás me vea un poco diferente- dice señalándose la mejilla surcada por unas cicatrices- se la debo a un hombre lobo y espero devolverle el favor algún día- Harry solo sonríe. Bill puede sentir como el olor a flores se intensifica, guía la vista hacia el origen del olor y ve a Remus y a Nymphadora vigilando a través de una ventana y a una jovencita de suéter blanco y cabello morado, recogido en una trenza de pie junto a ellos, no le interesa volver a mirarla y no lo hace, les da la espalda y se dirige hacia la ventana que da a la calle, en la que se encuentra su padre, varita en mano haciendo vigilancia.-

-Harry- dice Ojoloco llamando la atención de todos en la sala- para trasladarte esta noche, la orden ha tenido que tomar una importante decisión. Todavía tienes puesto el detector, así que no puedes aparecerte.-

-¿El detector?- dice Harry confundido- ¿Qué es el detector?

-Es una especie de sistema de vigilancia que el ministerio usa para controlar el uso de magia en menores, se desactiva al cumplir los diecisiete años, si te apareces o usas algún tipo de magia, el ministerio lo sabrá y sabemos que ya no es seguro que ellos lo sepan, así que utilizaremos otros tipo de medios de transportes ajenos a ellos- metió la mano al bolsillo de su túnica y sacó una botella de poción- me parece que estas familiarizado con esto.-

-Poción multijugos- dice Harry e inmediatamente guía sus ojos a sus amigos parados detrás de él entendiendo lo que Ojoloco pretendía.- No pueden hacer lo que creo que quieren hacer.-

-Si pueden Potter- contradice Ojoloco- todos son mayores de edad y aceptaron hacerlo.-

-No lo permitiré- dice él con tozudez – no permitiré que arriesguen sus vidas por mi.-

-Claro- responde Ron con tono sarcástico- Como nunca lo hemos hecho.-

-Pero no así- responde Harry elevando la voz- tomando esa poción, convirtiéndose en mí.-

-Tampoco es que estamos saltando del gusto- dice Fred con una mueca divertida- imagínate que algo salga mal y terminemos siendo flacos cuatro ojos para siempre.-

-No lo permitiré- dice Harry tomando su varita dispuesto a defender como fuera su punto de vista.-

-Le dije que no estaría de acuerdo- dijo Hermione, hablando por primera vez desde que habían llegado.-

-Te dije que no me importaba para nada su opinión, así que hazlo Granger- ella camino unos pasos y arranco unos cuantos pelos de la nuca de Harry para colocarlos en el frasco de poción, inmediatamente el líquido empezó a burbujear hasta volverse de una tonalidad dorada brillante- ahora quiero a los seis falsos Harrys parados en una línea- Bill dirigió la mirada hacia los jóvenes y pudo ver como la bruja de pelo morado abrazaba a Remus durante varios segundos antes de colocarse en la línea entre Fred y George quienes la tomaron de las manos con afecto- para los que nunca la han tomado, les advierto que sabe asqueroso- uno a uno fueron dándole un trago a la poción y casi inmediatamente fueron transformándose frente a los ojos de todos, el cabello a algunos se le encogió y a otros le creció, unos se estiraron un poco y otros, como Fred y George se encogieron, en pocos segundos frente a Harry se encontraban seis de sus hermanos gemelos.-

-Vaya somos idénticos- dijo un Harry con voz de alguno de los gemelos, sepa Merlín cual.-

-Todavía no- contradice Ojoloco vaciando una gran bolsa de ropa en el centro de la sala- cámbiense, todos deben verse iguales- Lupin se acercó hasta uno de los Harrys que se encontraba recogiendo ropa del suelo y lo llevó con Nynphadora para cubrirlo con su capa- Te aseguro que la virtud de tu mocosa esta a salvo con nosotros Lupin- dice Ojoloco con tono divertido- es Potter el que esta expuesto.-

-No me parece divertido-se queja Harry viendo como la mayoría de los otros Harrys exhiben su cuerpo sin pudor.-

-Enserio estas ciego- dice un Harry con vos de Hermione.-

-Ya sabía yo que no era cierto lo del tatuaje- dice el Harry con voz de Ron.-

-Pueden tener un poco de respeto- dice el verdadero Harry sintiéndose abochornado- es mi cuerpo por si no lo notaron

-También tu cámbiate mientras te quejas- dijo Ojoloco, Harry, el verdadero toma ropa del suelo y camina hacia donde Lupin vigila, el Harry que estaba con él se encuentra amarrándose los cordones de su zapatillas- Hagamos esto rápido, cada Harry tendrá un protector, tomaremos caminos diferentes para llegar hasta la Madriguera, así si nos están esperando, que así será, no sabrán cual Harry es el verdadero ¿Cuál es el Harry Potter original?

-Aquí- dijo uno al fondo de la sala.-

-Tu iras con Hagrid- anunció Ojoloco- los otros seis formen una fila- los Harrys falsos lo hicieron- Los protectores formen fila frente a ellos – Bill tomó lugar frente a uno de los Harrys, se veía tranquilo y concentrado, olisqueó el aire y supo que era la chica de pelo morado, la idea lo hastió, esa chica era algo de Remus y Nynphadora y ahora le tocaba a él que llegara a la Madriguera con vida. Maldita sea la hora en la que decidió unirse a la misión. Poco a poco la sala se fue quedando vacía a medida de que cada pareja, protector y Harry salía a la calle para abordar su medio de transporte, Bill puso el pie en el estribo y subió, no miro hacia su Harry, de seguro encontraría la manera de subir él, o ella, también- mantengan sus varitas en la mano- ordenó Ojoloco- manténganse alertas y vigilantes. ¡A la Madriguera! – Bill tiró de las riendas del threstral y lo hizo elevarse, sintió como las manos de su acompañante se aferraban a su cintura, cuando tomó suficiente altura guió al caballo alado a la Madriguera, no tardaron demasiado para distinguir a la distancia, los sonidos de una batalla, el animal se asustó y Bill intentó controlarlo, en el movimiento sintió como su acompañante acomodaba los brazos sobre sus hombros.-

-Protego- gritó la chica y un escudo se formo frente a él repeliendo una maldición que fue a dar contra el mismo que la lanzó, el mortífago no alcanzó a reaccionar, el hechizo le dio en el pecho y lo hizo caer...