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Las aves deleitaban con su hermoso canto, el césped recién cortado servía de cama al muchacho.

Kaiser se encontraba al lado del joven, echado de panza y moviendo la cola cada que su dueño le acariciaba.

Las orejas peluditas del perro tenían un efecto relajante. Taehyung mantenía los ojos cerrados e inhalaba el dulce aroma que emanaba del limonero de su madre.

La suave brisa le despeinaba el fleco, a lo lejos se escuchaban niños jugando con triciclos y pelotas. Seguramente estaban emocionados por el día de mañana.

Sonó el claxon del taxi que habia pedido, se levantó y entró a su casa para tomar sus cosas e irse. Se despidió de sus padres y de su hermana menor para embarcarse en su viaje de regreso.

Se sentía muy tranquilo, alejarse de sus obligaciones había sido muy placentero y durante su estadía anduvo vagando con su hermana, por lo qué, mas que cuidarla, pasaron tiempo de calidad juntos.

Yubin había conseguido pasar una audición a una muy conocida empresa de idols y estaba preparando todo para mudarse al edificio donde entrenaban, como era de esperar sus padres no habian estado muy felices al principio, pero ahora la estaban alentando a cumplir su sueño.

Estaba muy orgulloso de ella, en un futuro seria muy difícil pasar tiempo juntos y por eso estuvieron yendo de aquí a allá visitando museos, viendo películas en el cine y comiendo cuánta porquería se les cruzara en el camino. También lo acompañó a buscar un disfraz para la fiesta, fue un poco difícil porque sólo encontraban disfraces para niños.

Taehyung no tenia algo en mente así que fueron a una tienda de beneficencia, esos lugares eran mágicos puesto que hallabas cosas increíbles, ropa retro, ropa extravagante y si buscabas bien ropa de muy buena calidad.

Ya habia donado y comprado ropa en el recinto y sabía que era de ley que encontraría algo interesante. Lo que mas le gustaba era que comprando contribuía a recaudar dinero para el albergue del pueblo y también aportaba para la compra de despensas que le otorgaban a las familias menos afortunadas.

Sus padres siempre le habian inculcado ayudar al prójimo, algunas personas eran orgullosas y no aceptaban ayuda directamente pero esos lugares te permitían solicitar ayuda de manera anónima y él se sentía feliz de aportar algo a la sociedad.

Consiguió una bata negra adornada con flores pequeñas que tenian diminutas piedritas brillantes, un pantalón de cuero con unos cinturones de adorno y una camisa de seda negra que combinaba a la perfección con las otras prendas.

Tenia en casa una máscara vieja de color blanco que habia comprado cuando iba en preparatoria, Hoseok y él habian salido a regalar dulces y como no tenia ganas de disfrazarse sólo cogió la primer cosa de Halloween que vió en el supermercado.

Pasó el tiempo y finalmente se encontró afuera del departamento, apenas eran las dos en punto y supuso que Hoseok se encontraba comiendo.

- ¡Hey, has vuelto! - el muchacho corrió hasta él y le dio un gran abrazo.

- ¿Me extrañaste? - Taehyung dejo su mochila en el sofá y se encaminó a la nevera para tomar una botella con agua fría.

- Sólo un poco ¿Qué tal todo? -

- Normal, sinceramente me ayudó mucho el viaje... Estuve saliendo con Yubin -

- ¿Vienes cansado? -

- No realmente ¿Por? -

Afuera del departamento se escuchó cómo un vehículo se estacionaba y casi de inmediato tocaron el timbre.

❄️Cascanueces❄️ [JinTae/TaeJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora