Capítulo 18

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Capítulo 18- Otra vez...

—¿Sasori?

—¿Qué te pasa conmigo?— Me miró fijo, su mirada era intensa y me hacía sentir incómoda.

—Nada...—Me sujetó de las muñecas con fuerza otra vez.— Me lastimas...

—¿Ese es tu noviecito? ¿Ese tal sasuke? ¿Por ése me cambiaste?— Con cada palabra me apretaba con más fuerza.

—No es mi novio, por favor déjame.— Intenté safarme de su agarre pero era imposible. Me tomó por el cuello y me apoyó contra la puerta del baño.

—Vi cómo ese infeliz te miraba, los vi antes tomados de las manos, ¿Te gusta reírte en mi cara?

—Déjame por favor.— Me soltó tirándome al piso, no dudé ni un minuto y salí de allí.
Al salir me acomodé un poco mi maquillaje nuevamente e intenté acomodar mi pollera que quedó manchada por la caída.

—Sakura hasta que llegas.

—Lo siento había mucha fila.— Me acerqué a mi asiento pero sólo tomé mi bolso, lo apoyé en el respaldo mientras buscaba un calmante. Mis manos temblaban así que hice lo posible por que no se note.

—¿Lo viste a Sasori? Fue a la barra a saludar a un amigo y no vino más.— Ino habló haciendome salir de mis pensamientos.

—Si, estaba ahí charlando.— Al parecer no los guardé, levanté el bolso y lo puse en mi brazo. —Bueno, lo siento pero mejor me voy.— Me di la media vuelta para irme y comencé a caminar rápido. Ya estaba llegando a la esquina y alguien me tomó del brazo, cambié mi respiración a una más acelerada, voltee a ver y era Sasuke.

—¿Estás bien?

—¿Eh?

—Que si está todo bien, viniste muy rara del baño.

—Sí, es que, había tomado algo antes de salir y con la cerveza me hizo un poco mal.

—Ya veo...—Me analizo de arriba abajo. —Bueno vamos.

—No, tú quédate se estaban divirtiendo.

—Me divierto contigo, vamos.

Subimos a su auto y puso algo de música, iba mirando al frente y él en un momento, con mucho cuidado, me giró el rostro para su lado.

—¿Qué te pasó en el cuello?

—¿Qué?— Me miré en el espejo de su auto y estaba rojo.

—Oh, eso. Tenía un collar y me hizo reacción, estaba buscando mi crema cuando salí del baño pero no la traje.

—Hmp.

Que diferente fue su toque, al de Sasori...

Llegamos a mi casa e invité a Sasuke a tomar un café. Entramos y le dije que esperara un momento, fui a la habitación a cambiarme, me puse un pantalón cómodo, una remera blanca grande y unas pantuflas. Estaba muy candasa, y la verdad es que no me molestaba que Sasuke me vea así, además... en el auto pude notar que tenía un moretón en la pierna, y no quería que el lo vea.

Puse la máquina para el café y mientras preparaba las tazas se acercó a la cocina.

—¿Segura que estás bien?

—Claro, ¿por qué?— Lo mire con una sonrisa, no quería que se preocupe.

—Te noto algo nerviosa.

—Para nada, solo estoy cansada.

—Si quieres me voy...

—No, por favor, quédate un rato más...

Serví las tazas, nos sentamos en el sillón y mientras puse una película. Estábamos charlando y sonó el timbre, me asusté un poco, eran casi las 4 de la mañana, la pantalla de mi teléfono se encendió y pude ver que era Temari, había pasado a verme.

—Aguarda un momento, vino Tema, creo que quedó algo preocupada.

Fui a la puerta y al abrir noté que no estaba sola, Sasori estaba junto a ella.

—¿Estabas durmiendo?— Mi cabello estaba un poco alborotado, y mi maquillaje ya no estaba.

—No, yo estaba...

—Descuida, yo la traje.— Sasuke se acercó a la puerta, él estaba sin sus zapatos, su camisa con algunos botones desabrochados y su cabello también algo revuelto.

—Oh, ya entendí.— Me guiñó un ojo.— Linda remera sakura.

—Amm, yo...

—Bueno, lo siento por interrumpir, solo quería saber si estabas bien, mañana hablamos entonces amiga.

—Claro, lo siento. —Me acerqué a abrazarla y a lo lejos vi a Shikamaru en el auto, nos saludamos con la mano y antes de volver a  entrar Sasori me abrazó.

—Esto no se va a quedar así.— Susurró en mi oído mientras las ganas de llorar se apoderaban de mí.

Al apartarme noté cómo Sasuke y Sasori se veían, se estaban comiendo con los ojos. Sasuke puso su brazo sobre mis hombros y Sasori frunció el ceño, se fue pisando fuerte y nosotros cerramos la puerta.

—¿Segura que estás bien? Te pusiste pálida...

—Creo que me bajó la presión.

—Mejor me voy...

—¿Puedes quedarte conmigo esta noche?

—Claro...— Caminamos a la habitación, Sasuke se estaba acercando al sillón.

—Te molestaria si... Te pido... ¿Que duermas junto a mí? — Su rostro fue de una gran confusión, pero relajó la expresión que tenía desde el encuentro con Sasori.

—Claro.

Se acostó junto a mí, esa noche solo nos abrazamos, esa noche era lo único que necesitaba

El amor en tus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora