El amor en tus ojos

Capítulo 20

Capítulo 20- No todo es color de rosas

Nuevamente Sakura se despertó primero, solo que ahora no había llegado a terminar el desayuno. El pelinegro se despertó, la besó y con cuidado la hizo a un lado.

—Siéntate, yo sigo.

—No, yo puedo hacerlo.

—Al menos te ayudo.— Terminó de cortar el pan y lo puso tostar, Sakura preparó la mesa y se sentaron.

—¿Y hoy que harás?— Preguntó Sakura mientras le daba un sorbo a su café.

—Almuerzo con mis padres, ¿Quieres venir?

—Me encantaría, pero mi mamá necesita un poco de ayuda, quiere renovar una habitación de la casa para hacerla una oficina.

—Descuida, la próxima será, mi madre estará muy feliz.

—Seguramente.

Terminaron de desayunar, Sasuke se fue y Sakura fue a darse un baño, estaba terminando de cambiarse y tocaron el timbre, al salir a abrir sus recuerdos volvieron. Era Sasori.

—¿Qué necesitas? Justo estoy por irme y...
—¿Tú me tomas el pelo o qué?— La empujó al interior de la casa, cerrando la puerta tras él.

—Sasori basta, ¡Ya suéltame!— Lo empujó e intentó ir a la puerta pero el tenía mucha fuerza.

—Me vas a escuchar, quieras o no muñequita.— La tomó de las muñecas y la tiró al piso.

—Me lastimas, ¿Quién te crees que eres?— Se puso de pie frente a Sasori.

—No puedes estar con ese desgraciado. Lo vas a dejar, ¿Me oíste?— Volvió a tomarla del cuello y Sakura lo abofeteó.

—No eres quién para decirme qué hacer.— Sasori perdió la poca paciencia y le dio una bofetada. El labio de Sakura comenzó a sangrar, tomó lo primero que pudo y golpeó a Sasori para intentar escapar pero él le dio una puñetazo en la nariz. Fue tan fuerte que Sakura cayó al piso.

—Muñequita lo siento, yo no quise...

—Vete por favor.

Sasori se fue y en el piso quedó Sakura sentada, llorando con las manos llenas de sangre. Como pudo se fue a lavar, intentó disimular el golpe lo máximo posible y se fue a la casa de su madre.

Antes de bajar de su auto sacó un pequeño espejo, notó un moretón en su mejilla y el corte junto a su labio. Cubrió cómo pudo el moretón entre lágrimas, su nariz no tenía marcas visibles pero sí le dolía bastante.

Al entrar vio que junto a su madre estaban Ino, Temari y Hinata.

—¿Qué hacen ustedes acá?

—Necesito mucha ayuda de gente joven.

—Dijo que nos dará vodka.— Hablo Temari muy enérgica.

—¿Qué te paso en el labio?—Cuando Tsunade dijo esto las jóvenes se acercaron.

—Oh, no es nada, yo... Me golpeé con la alacena...

—¿Eh?

—Abrí la puerta sin correrme y me di con la esquina... No me hagan sentir más estúpida de lo que me siento. A ver qué necesitas mover...

—¿Uchiha te golpeó? Si es así te juro que yo misma lo mataré.

—¿Que? No, mamá, qué dices...

Estuvimos toda la tarde con eso, a la noche volví a mi casa, pero al sacarme el maquillaje recordé el moretón. ¿Qué le diría a Sasuke?
Antes de dormir le dije lo primero que se me ocurrió:

Lo siento, mañana me voy al trabajo con Ino, necesita contarme algo🥰

Sasuke 🍅:
No hay problema, ¿a la noche nos vemos entonces?

Te aviso, pero creo que ceno con mi mamá.

Me dolía decirle esto, pero él no me creería el cuento de la alacena.
Me bañé y me recosté, toda la cara me dolía, mis muñecas igual estaban heridas. Me puse una compresa fría en el rostro e intenté dormir.

En su casa, Sasuke estaba algo extrañado con la situación, casi todas las noches recibía una llamada de Sakura, pero esta vez no pasó.

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Chiquis, perdón, me tocaba subir capítulo ayer pero estuve muy ocupada... Espero que les haya gustado el capitulo