°Te Llevo En El Corazón° [YoonMin]

*Capítulo 12*

Min Yoongi no se consideraba para nada una persona social, es más, podría contar con los dedos de una mano la cantidad de amigos con los que contaba.

Nunca le gustó socializar y jamás era de los que se acercaban a hablar con otros. Le causaba incomodidad siquiera pensar en conversar con alguien.

Quizá amaba la soledad a la que se había acostumbrado desde muy temprana edad o no sentía la necesidad de tener a personas rodeándolo las 24 horas.

O quizá se deba a ciertas cuestiones que ocurrieron en su pasado los influyentes a no querer relacionarse con otros.

No lo sabe a ciencia cierta, lo ha dejado pasar por tantos años que ahora es bastante común en su vida estar solo. Pero no por eso quiere decir que todo el tiempo le guste estar así.

Sus únicos amigos, tienen una personalidad bastante alejada a la suya, son demasiado alegres en comparación de su aura sombría.

Pero eso no pareció ser problema cuando le hablaron e insistieron y no se detuvieron hasta lograr hacer que los aprecie y valore en sobremanera. Son de esas amistades que espera uno dure hasta cuando sean viejitos.

O así lo tiene la mente de Yoongi.

Otro punto por sobresalir, es que le había tomado mas de un año poder confiar plenamente en sus actuales mejores amigos, lo cual recalcaba cuan cerrado podía ser él ante otras personas.

Entonces, sabiendo todo eso..... ¿Que tenía Park Jimin exactamente?

Aún no salía de su cabeza como en apenas una media hora había podido confiar bastante en el menor. ¿Qué lo había impulsado? No lo sabe y está confundido al respecto.

Digo, Min Yoongi no va a negar que el chico era demasiado bello, él sabía apreciar esa hermosura de una persona cuando lo ve, sea hombre o mujer. Sin embargo, aún sabiendo admirar esa parte, nunca le había impulsado a soltarse con tanta confianza ante una persona.

Vuelve a repetir, ¿qué diablos tenía Park Jimin?

¿Serán sus bellos ojos azulados?, ¿o ese cabello plata tan brillante? ¿Quizá aquel rostro que a la vista se admira suave? ¿O las curvas de su cuerpo por el arduo trabajo que de seguro hace por el baile?

O, ¿es esa personalidad suya tan risueña? ¿Tal vez esa sonrisa tan brillante? ¿Aquella dulce voz? ¿Podría ser esa aura tan misteriosa que le rodea?

Yoongi no lo sabe, sólo, Jimin tiene algo en su persona que le hace hablar con él como si fuesen amigos de toda la vida.

Aún no olvida ningún detalle de la tarde anterior, donde ambos platicaron por varias horas sobre temas tan diversos que el hilo de conversación nunca se acabó. Fue bastante interesante para Yoongi.

Era increíble como los dos podían hablar de grande bailarines, música clásica, obras de teatro, sus clases, entre otros; para luego en el siguiente minuto tener como tema el preparado de un sándwich, el kimchi del restaurante de la esquina, perros o hasta de cual era su talla de zapatos.

Fue una tarde amena y agradable para los dos individuos, Yoongi incluso tuvo la valentía de pedir mas tardes a aquel chico de mejillas rellenas. El pálido no va a negar que una leve alegría lo invadió cuando escuchó la respuesta afirmativa de su menor.

Ahora esperaba con ansias aquel día.

Pero mientras ese llegaba, otro ya estaba ocurriendo en su presente, pues aquel día era el tan esperado por muchos. Hoy por fin presentarían su baile ante su profesora Hyun-ah.

¿Estaba nervioso? No lo diría de esa manera, mas bien, estaba ansioso ante la expectativa de bailar con Jimin.

Ahora que había podido hablar con el menor, lo veía con otra perspectiva, estaba eufórico por saludar al menor y calentar a su lado.