Selcouth [LIBRO I Y II]

26

Tener magia siempre sonó como algo asombroso, único e inigualable. Y de hecho, la mayoría de las veces, lo es. Para personas como Blair, Cole, Nathan, Anna y los aquelarres era una magia divertida donde siempre se podía aprender algo. Pero para el pequeño selecto grupo que pertenecía Saskia, Sally e Isaac la magia siempre rodeaba entre lo peligroso y directamente letal.

No podían jugar, no podían experimentar, no podían no saber que estaba haciendo con sus poderes y magia. Y eso era lo que tanto los condenó.

Por las venas rojas de sangre viajan pequeños rayos por todo el cuerpo, el corazón era el centro donde aquellos rayos comenzaban a aparecer y rodear el órgano para protegerlo. A su vez, las neuronas comenzaban a trabajar con mucha más velocidad que antes, los rayos llegaron a su cerebro expandiendose cada vez más.

Blair extendió su mano por encima de su cabeza, la energía de los rayos ya se sentía. Puso la mano en su pecho y también ya estaba. En su abdomen también, en sus piernas lo mismo.

—Ya tendría que estar despertando. —Comunicó. —Ya tiene magia

—Los niños no despiertan. —Anna avisa desde el umbral. —Quizá debamos despertarlos con magia, no sé...

—No pueden despertarse antes de Saskia. —Hunter interrumpió. —Si tienen un brote es ella quien puede detenerlo. Además solo por hacer magia hacían un escándalo de mierda no me imagino el brote que tendrán ahora por la semejanza que hicieron.

—Bueeeeno. —Karteen se encogió de hombros. —Siempre está la opción de darles con la cabeza con algo y dormirlos de vuelta.

—¿Como es que estas viva? —Anna le preguntó.

—Vaya, suegra. Suena como si quisieses otro destino para mí.

Anna enrojece.

—Ay, Karteen. No estés tan a la defensiva, niña.

Karteen le sonrió de forma sarcástica y Cole —en el medio de ambas—, puso los ojos en blanco mirando el techo.

—¿Nos centramos? —Insistió Hunter. —En caso que Saskia no pueda, ¿Qué hacemos con ellos?

—Ella podrá. —Le asegura Nathan.

—No la presionemos. —Blair sentenció. —La última vez que la obligaron a ser perfecta se sintió obligada a mejorar y eso hizo que perdiese todo. No seamos tan imbéciles de que volver a cometer el mismo error. En caso que ella no pueda controlarlos todos aquí sabemos que haremos.

—...

—...

—...

—...

—¿Matarlos?

—¡Karteen!

—¿Qué? —Puso cara de póquer. —Todos lo pensamos, es lo obvio. Yo lo haría...

—Pero... ¿A ti que te pasa? —Nathan la miró entre perplejo y disgustado.

—Saskia salva tu vida y tú quieres matar a sus hijos. —Anna la mira asqueada.

—Lamento romperle el corazón y la poca dignidad que lleva pero soy la única en esta conversación que tiene un punto de vista propio y general. Los críos son letales, mírenlos por donde quieran, son dulces y pequeñitos pero son Hewitt, herederos de la gran magia de Saskia Hewitt mezclado con la indomabilidad y furia de un lobo. Ustedes no lo ven como una amenaza a todos porque están tan ciegos que no se dan cuenta que si esos niños despiertan y por simple capricho deciden matar a todo el aquellare lo harán y ninguno podrá detenerlo porque nadie tiene los huevos de matar a dos niñitos más allá que yo.

—¿Y qué planeas, Karteen? —La enfrentó. —¿Matar a cada hijo que tenga Saskia? ¿Por qué no te planteaste también matar a Andy? Si es una Hewitt mezclada con raza vampiresa, igual de peligrosa. Ah, porque es tu hija, y a ti se te da por opinar y actuar de los demás pero no fijarte que tu hija es igual de letal como ellos.

—Mi hija no consume sangre humana, desde pequeña la sometimos a esta crianza para evitar que se convirtiera en un caos. No compares a Andy con niños que nunca tuvieron un tipo de enseñanza sobre sus emociones por estas razas, nunca se lo explicaron y crecieron teniendo de referencia a un padre golpeador y una madre que olvida todo.

—¡Ten cuidado de como hablas!

—¡Usted tenga cuidado de como se refiere a mi, Anna! —La apuntó con un dedo. —Por qué recuerde que aún me debe el favor por ayudarla a abandonar a sus tan preciados mellizos. Pero bueno, la madre egoísta sigo siendo yo.

—A ver. —Blair decidió intervenir.—¿Desde cuando este debate se convirtió en una discusión? Calmemosnos.

—No me pienso calmar —Karteen se cruzo de brazos—, sé que tengo la razón.

—Y nosotros sabemos que tienes la razón —Fue sincero. —, pero no podemos matarlos y ya.

—Isaac es una esponja, absorbe emociones y magia ajena. —Hunter opina. —Si se enoja puede absorberlos y ser potencialmente peor, será mejor que todos los brujos se aparten.

—Sally detiene el tiempo. —Cole les recuerda. —Si detiene el tiempo, Isaac tendría acesso a nosotros sin ni siquiera darnos cuenta.

—¿Y si los dividimos? —Blair se encoge de hombros.

—No, hablan por telepatía. No serviría.

—¿Por qué no desalojamos todo el edificio? —Cole sugirió mirando directamente a Blair. —Trae todos tus brujos a mi aquelarre, será mejor alejar todo tipo de magia de ellos.

—No puedo moverlos como si fuesen objetos.

—Es eso o que Isaac los absorba.

—Bien. —Accedió. —Karteen, tu quédate cerca.

—No iré a ningún lado aún. —Aseguró.

—¿Aún? —Nathan la miró.

—Me dan vacaciones por maternidad. —Pusieron cara de póquer pero Karteen volvió a ver a Blair. —¿Qué quieres que haga?

—Creo que eres la única que no le tiembla la mano a la hora de cargarse de alguien, no lo hagas, pero en caso que las cosas se descontrolen y no haya retorno, entonces... Hazlo.

Karteen asintió con la cabeza.

A ella le tocaba la peor parte, pero la más interesante a su punto de vista.

Matarlos.