𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟗-𝕥𝕣𝕒𝕧𝕖𝕤𝕚𝕒𝕤 𝕔𝕠𝕟 𝕦𝕟 𝕖𝕟𝕔𝕙𝕦𝕗𝕒𝕕𝕠

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   Fuimos hasta su carro y nos montamos para ir a su casa que es en cabudare el cual era el único detalle, dejamos las cosas en el cuarto de huéspedes y yo me eche una medio arregladita porsia, los dos salimos y nos fuimos de nuevo con mi madrina,...

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Fuimos hasta su carro y nos montamos para ir a su casa que es en cabudare el cual era el único detalle, dejamos las cosas en el cuarto de huéspedes y yo me eche una medio arregladita porsia, los dos salimos y nos fuimos de nuevo con mi madrina, ella iba hablando de un pocoton de vainas con Namjoon pero yo no le estaba parando bolas, solo me dedicaba a observar, andaba melancólico.

  Luego me sumergí en mis pensamientos, mi familia, todos los peos, luego Yoongi y Hoseok y cuando me di cuenta estábamos entrando a un club y nos dirigíamos al restaurante del club, cabe destacar que este restaurante es de lo que si pides un agua te la cobran como si la hubieran sacado del diluvio y luego pasado por las manos de David y hubiera sido bendecida por Jesús.

Nawebona el bolsillo se me súper arrugó. Namjoon y yo compartimos miradas y tuvimos una conversación solo mirándonos, era impresionante como nos reconocíamos los gestos si nunca nos habíamos tratado como tal, ni Tae o Jin me entendía estas señas. Para mi eso tenía una explicación y yo las llamaba señas pelabolisticas por lo tanto solo los pelabolas como Namjoon y yo nos entendimos que no queríamos venir a esta verga por qué íbamos a quedar mamando y loco.

   Pero ninguno tenía el valor suficiente para decirle a mi madrina que fuéramos a otro lado, y ahí es que comenzó el dilema. Mi madrina se bajo y nosotros no nos quedo de otra que seguirla.

—No pidas nada y ya, decimos que estamos lleno —le susurré, esa era la estrategia salvadora

Él me dio un asentimiento y nosotros entramos.

—Pidamos un juguito al menos.

Nos sentamos y yo dije bueno que más. Esperemos la carta para consultar precio de los jugos y ajá, pero ¿adivinen qué pasó? No nos trajeron ninguna hijo e' puta carta, el mesero dijo lo que tenía y ni mensiono los precios, Namjoon y yo compartimos una mirada pidiendo auxilio y seguimos oyendo al mesero.

—También tenemos la paella mar y tierra y hay un servicio de camarones ideal para tres personas.

Ajá marico muy suena muy bonito y caro todo lo que dices, pero yo quiero comerme algo como un pabellón o una pasta con carne molida.

—También tenemos pasta a la carbonara y pasticho.

Al oír pasticho Namjoon y yo nos miramos, estábamos claros que nos moríamos por ese dichoso pasticho y que cargamos un hambre que no jugaba, pero la pobreza era una vaina...

—Yo quiero una pasta a la carbonara pero si quieren podemos pedir un servicio dé camarones.

—Ehhh... bueno en realidad yo no tengo mucha hambre.

   Casi que me sonaban las tripas pero no había de otra

—Yo tampoco. Pero pida usted y nosotros le hacemos compañía.

—No vale ¿que es eso? Eso es muy maluco comer solo, ademas ustedes no han almorzado. ¿Qué tal una paella? bueno por la cara que pusieron creo que no, ¿y camarones? ¿Que tan un pasticho? —los dos nos delatamos con la cara de muertos de hambre que pusimos— ven ahí está, dos raciones de pasticho por favor y una pasta a la carbonara.

¡𝐐𝐮𝐞 𝐩𝐞𝐨 𝐜𝐨𝐧𝐦𝐢𝐠𝐨! • YoonMin/hopemin, taekook, Namjin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora