La carta de Gringotts

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N: La autora volvió a cargar este capítulo porque hubo algunos errores de ortografía. Además, si ves algún error, no dudes en decirme que me ayuda mucho :)

...

Harry Potter estaba teniendo un cumpleaños maravilloso. Se había despertado con Ginny Weasley, su novia, besándolo suavemente y cantándole un suave 'feliz cumpleaños'. Luego había comido los famosos panqueques de Molly junto con el resto de los Weasley en el gran comedor de la nueva casa que Harry les había comprado como agradecimiento.

Como siempre, habían dejado un asiento vacío al lado de George, en memoria de su hermano gemelo Fred, que había muerto en la guerra. Cada vez que Harry miraba la silla, podía sentir que sus ojos comenzaban a lagrimear. Los gemelos siempre habían sido como una especie de hermanos mayores para Harry, que nunca había tenido una familia amorosa.

Harry nunca admitiría esto, especialmente no frente a Ron o Ginny, pero los gemelos siempre habían sido los Weasley favoritos de Harry.

Después del desayuno, todos habían ido al patio trasero a jugar quidditch. Se habían quedado allí todo el día, solo parando para almorzar antes de regresar al campo improvisado. Cuando el sol finalmente comenzó a ponerse, todos aterrizaron y entraron, duchándose y limpiando antes de regresar al exterior. El patio trasero ahora estaba bellamente decorado, una gran lona blanca estaba en el medio, luces colgando y mesas debajo, cabiendo hasta diez personas cada una. Ya había una gran cantidad de invitados dando vueltas, emocionados de celebrar al 'vencedor del Señor Oscuro' en su cumpleaños.

La fiesta había durado hasta las primeras horas de la mañana y no terminó hasta que Harry finalmente comenzó a sentirse somnoliento y se excusó para irse a la cama. Y ahí era donde estaba Harry ahora. Estaba sentado en su cama, dejando caer sus ojos, pero sin deslizarse hacia la tierra de los sueños. Parecía haber algo que simplemente no le permitía dormir. Estaba a punto de ceder y bajar a la cocina para prepararse una taza de té cuando escuchó un golpe suave en la ventana. Harry miró hacia arriba, sorprendido, y se encontró mirando a un hermoso cárabo con una carta de aspecto formal en sus garras.

Harry se puso de pie y se dirigió a la ventana. Una vez allí, la abrió y dejó entrar a la lechuza. La lechuza voló adentro y aterrizó en su escritorio, sacando la pierna. Harry rápidamente se acercó a la lechuza y desató la carta antes de acariciarla y darle una golosina y un poco de agua del vaso en su mesita de noche. La lechuza ululó en agradecimiento antes de hundirse en sus plumas y acicalarlas.

Harry miró la carta en su mano. El escudo de Gringotts estaba formalmente estampado en el sello de cera, lo que hizo que las cejas de Harry se fruncieran en confusión. ¿Por qué le escribiría Gringotts? ¿No había pagado ya por todo el daño que el dragón había causado el año pasado cuando irrumpió en el banco?

Harry apartó esos pensamientos del camino y decidió abrir la carta.

Estimado Sr. Potter,

Se requiere su presencia en Gringotts Wizarding Bank lo antes posible para reclamar sus anillos de señoría y herederos, así como una prueba de herencia. También se ha organizado una reunión con su gerente de cuenta para discutir sus bóvedas, inversiones, propiedades y otras cosas. Diga las palabras 'aurum' y esta carta le servirá como traslador para llevarlo al banco.

Goblin Ragnok

Duende principal del banco mágico de Gringotts

Harry estaba aún más confundido. ¿Bóvedas? ¿Cómo en plural? ¿Señor y heredero anillos? ¿Inversiones? ¿Propiedades? ¿Una prueba de herencia? Harry solo se tomó unos segundos para escribir una nota vaga y pegarla encima de su cama, en caso de que no hubiera regresado por la mañana, y metió su varita, la varita mayor, su capa de invisibilidad y algunas otras chucherías en sus bolsillos. No sabía por qué, volvería por la mañana, pero aun así lo hizo.

El único error del director (TRADUCCIÓN) - PAUSADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora