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Pov Christian.

 Se que estuvo mal, mucho, pero no lo pude evitar desear y probrar esa linda y rosada boquita, sentir esos dulces labios que encajaron tan perfectamente con los mios fue la gloria pura.

Han pasado dos dias desde eso, no la he visto,lo mas probavle es que me este evitando, ella misma lo dijo fue un errror.

Lo fue, joder!!.

Pero fue un error que se sintio demasiado bien, no he hecho otra cosa que pensar en probar de nuevo sus labios y algo mas.

Te meteran a la carcel por pedofilo Grey- me dice m sudconciente.

Lo se, se que ese sera mi futuro si continuo con mi enfermiza odsecion con esa niña, pero no lo puedo evitar, necesito verla.

Salgo al valcon de la habitación mientras doy un trago de whisky, se supone que estoy aqui por trabajo y no me puedo concentrar en ello, lo unico que ocupa mi pensamiento es Anastasia.

-bien los esperamos mañana a la diez para las remodelaciones- escucho a mi lado.

Ana.

Miro a mi derecha y la veo en el balcon de al lado sentada en un gran sillon mientras mira su computadora, lleva puesta una un top blanco y unos shor los cuales no distingo bien su color desde donde estoy.

-Anastasia- la llamo y levanta la miarada asustada.

-Dios que susto me a dado- dice llevando una mano a su pecho- no ve lo tarde que es puede provocarle un susto de muerte a alguien- dice.

-la que no deberia estar depierta a estas horas eres tu- le digo y bufa.

- no puedo tengo imsopnio- contesta, pero no le creo.

-eres mala mentirosa- le digo.

-si usted lo dice, pero de todos modos lo que haga o deje de hacer no es asunto suyo- me dice seria.

-niña malcriada- le digo.

-hace dos dias en el asencor no pensaba que era una niña- dice y cierra su computaodor.

Te gano Grey- dice mi subconciente.

-buenas noches- dice y luego entra de nuevo a su habitacion.

Esta no se quedaa asi Anastasia.

*********

Me voy a volver loco pensando todo el tiempo en ella, no se a que acuerdo llegue esta mañana lo unico que pensaba era en una forma de poder acercame a Ana, pero no encuentro ninguna hasta ahora, no puedo preguntar por ella en el hotel, levantaria sospechas ha su padre, ademas no queriero ir preso por acosar a una menor, asi que debo hacer esto sin que me descubran.

Entro al hotel y entro al asencor, el cual esta vacio, ya es de noche, pase todo el tratando de como acercarme pero nada.

Cuando las puertas estan apunto de cerrarse  la detienen, Ana, su padre y otro hombres mas entran en el asencor.

Es buena y mala suerte a la vez.

-estamos a una semana de que empiese la temporada de vacaciones, vamos a necesitar mas personas ayudando en la cocina- dice el hombre que los acompaña.

-ya estoy haciendo arreglos para poder contratar a mas personas, no solo hay y sin afectar el salario de los que ya estan- dice Ana y la puedo notar un poco tensa por mi presencia.

-haces un exelente trabaja hija, estoy muy orgulloso, pero tambien deberias salir, divertirte un poco- le dice- eres muy joven para ser una adicta al trabajo- le dice y las puertas del asensor se abre y el otro hombre sale seguido por su padre.

Siiiii

-tenemos que hablar- le digo cuando las puertas se cierran

- no hay nada que hablar- dice sin mirarme y puedo notar como se muerde el labio inferior nerviosa.

-seria mas facil si no fueras tan provocadora- digo y antes que pueda reaccionar la tomo de la cintura y la pego a la pared y la beso.

Ella queda sorprendida y quieta por mi accion, pero segundos despues enreda sus piernas en mi cadera y me pega mas a ella, solo esta usando una faldita veraniega y bragueta rosa con sus finas bragas.

-ah- un suave gemido escapa de su linda boquita, haciendo que pierda mas mi cordura.

-dime que pare- le digo, carajo no lo quiero hacer y ella no me esta deteniendo, lo que lo hace aun peor, si alguien descrube esto puedo ir a la carcel por aprovecharme de una menor.

-no puedo decirte eso- susurra y me besa- no quiero que pares- dice y sus ojos muestran su total desicion.

-segura?- pregunta y asiente mordiendose el labio, las puertas del asencor se abren y la suerto- ven- le digo saliendo del asencor con ella detras de mi.

Para nuestra suerte no hay nadie en el pasillo, me detengo en mi puerta antes de abrir la y me giro para mirarla.

-estas segura?- le pregunto de nuevo y asiente- debes estarlo, porque una vez estes dentro no te dejare salir- le digo.

-tal vez alfinal seras tu el que me tendras que sacar- me dice acercandose mas a mi.

Miro a los lados verificando que no alla nadie y la tomo de la cintura metiendonos s la habitacion. Cuando cierro la puerta la estampo contra ella deborando su linda y dulce boquita, Ana me responde de igual forma enrredando sus dedos en mi cabello.

Rapidamente nos desvestimos uno al otro entre besos caricias y gemido, cuando esta en ropa interior la quito de la pared y la llevo a mi habitacion y la tiendo en la cama.

Dejo un regero de besos por su cuello bajando entre sus lindas tetas, paso mi lengua por su vientre rodeando su ombligo.

-Christian!!- susurra temblorosa debajo mio, me encanta lo resectiva que es, sigo bajando hasta sus braguitas.

Me desago de ellas dejandola gloriosamente desnuda para mi.

Tan hermosa, tan perfecta.

Me dejo caer sobre su cuerpo sin aplastarla, se para sus piernas dejandome acomador entre ellas, cuando nuestros sexos se rozan no puedo controlarme ub segudo mas y la penetro sin ser del todo brusco.

Ana jadea mientras me clava las uñas en la espalda, me quedo quieto dejando que su pequeño cuerpo se adapte a mi.

Es como un guante.

Un ajustado, caliente y delicioso guante para mi polla, es como estar en el paraíso. Un rato despues esta mas relajada y puedo moverme.

Me muevo despacio, con algo de miedo de lastimar su pequeño cuerpo, pero sus gemidos me exitan en sobre manera queriendo ir mas rapido, sin poder evitar no hacerlo.

Ambos gemimos en la boca del otro mientras la embisto duro, es el mejor sexo que he tenido en mi vida.

-dejate ir nena, hazlo...hazlo por mi Ana- gruño mordiendo su hombro.

-Christian!!- gime y grita a la vez mientras su cuerpo colvulsiona y sus paredes me atrapan, llevandone a mi propio desbastador orgasmo.

Me dejo caer a su lado y la abrazo a mi pecho mientras calma su respiracion y yo la mia.

-estas bien?- le pregunto.

-de maravilla- dice y se acomoda mejor en mi pecho.

Veo como se queda dormida entre mis brazos, es la mejor sensacion que he sentido nunca, Ana se remueve un poco rosando mi mienbro y cuando caigo en cuenta de algo muy importante.

No me puse un jodido condón.


Quiero Un HerederoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora