Pov Christian.
-Mami!!- grita mi hijo emocionado.
Theodoro se remueve entre mis brazos para que lo baje y corre a brazos de su madre que lo espera con ellos abierto..
Se lo va a llevar, piensa algo rápido Grey- me dice mi subconsciente.
-no regresabas mañana?- pregunto.
-tambien me de gusto verte Christian- me dice con sarcasmo cargando a nuestro hijo- pero si se supone que era mañana, pero termine antes y no vi la necesidad de quedarme mas tiempo alla- contesta mientras llena a nuestro hijo de besos.
No dejes que se vayan Grey- me dice mi subconsciente.
-como les fue en el juego?- le pregunta a Ted.
-muy bien, el abu Ray puede ir con nosotros la próxima vez?- le pregunta emocionado.
-hay que preguntarle a él cariño, para que se desocupe de el trabajo y pueda venir- le explica- ahora hay que volver a casa- le dice.
No no no no.
-no es bueno salir ahora, hay demasiada lluvia- le digo y mira la ventana, se escuchan truenos y relámpagos.
Gracias madre naturaleza.
-nos podemos quedar un poco más?- le pide Ted.
-está bien, en lo que la lluvia se calma- acepta.
-si!!, voy por mi libro- dice y sale corriendo.
-no corras en las escaleras!!- ambos le gritamos ambos.
-sabías que volvería Christian- me dice y me siento a su lado en el sofa.
-lo se, pero crei que tenia un dia mas- le digo.
-te entiendo, pero no es como si me lo fuera a llevar y no lo vas a volver a ver- dice.
-lo se, pero no es lo mismo- digo pasando la mano por mi cabello- quiero que siempre esté aquí, conmigo y no solo el, tu tambien- le digo mirando sus bellos ojos pero aparta su mirada.
-ya hablamos de esto Christian- dice como si estuviera cansada.
-no, no lo hicimos- tomo su mentón para que me mire- cometí muchos errores lo admito, siempre voy a arrepentirme de no haberte buscado antes, por favor dame una oportunidad, Te amo Anastasia- susurro muy cerca de sus labios tanto que nuestros labios se rosan y nuestras respiraciones se mezclan.
-aqui esta!- dice Ted feliz llegando y Ana rápidamente se separa de mí- hace frío- dice.
-iré por unas mantas, ahora vuelvo- digo levantándome.
No se como, pero haré que me perdone.
Cuando vuelvo nos arropo a los tres con la frazada y Ted me pasa el libro para que lea. Paso no se cuanto tiempo leyendo les hasta que noto que él y Ana se han quedado dormidos.
Con cuidado de no despertar a ninguno de los dos tomó a Ted en brazos y lo llevó a su habitación, lo acuesto con cuidado asegurandome de que todo está cerrado. Al volver Ana está en el mismo lugar donde la deje dormida.
La tomó en brazos y la llevo a mi habitación, a mi cama donde ninguna otra va ha estar.
Pov Ana.
Me remuevo en la cama, acomodandome mejor, odio el Jet lag, siempre estoy muy cansada al volver por los cambios de horario, además casi no descanse alla para volver lo más pronto posible con mi hijo.
Cuando la inconsciencia del sueño está por envolverme otra vez escuchó una risa muy alegre y un brazo rodearme la cintura y pegarme a un duro cuerpo.
Abro mis ojos encontrándome a mi hijo muy sonriente frente a mi en la cama la cual no es la mía, cuando miro a mi lado veo a Christian sin camisa, miro mi cuerpo y llevo una ramera de el, sin sostén.
Ya me va a escuchar.
-buenos días mami- me dice mi pequeño.
-buenos días mi amor- le digo sonriéndole igual, no puedo enojarme con él, su padre fue el aprovechado. Entonces Christian se remueve despertando también.
-son novios?- pregunta Ted curioso y me sorprendo por su pregunta al igual que Christian.
-no cariño, no somos novios- contesto.
-y por qué duermen en la misma cama?- pregunta.
-es una buena pregunta- digo mirando a Christian buscando una explicación de porqué estoy en su cama.
-es que le iba a dar mucho frio a tu mami,m y se podría enfermar, por eso la traje conmigo- contesta tranquilo.
Pero será…..
-ok- acepta mi pequeño inocente- podemos desayunar panqueques?- pregunta.
-claro que sí- contesta Christian.
-mi mami va con nosotros a pasear en barco?- pregunta Ted.
-por mi no hay ningún problema- dice Christian mirándome- acompañanos, será divertido- me dice rodeando mi cintura con su brazo.
-yo….
-si mami, di que si- me pide Ted con ojos tiernos, como decirle que no a esa carita.
-esta bien- digo rendida y Ted empieza a brincar en la cama mientras grita feliz, felicidad que se nos contagia, pero cae cuando el empieza a hiperventilar, lo sostengo mientras Christian saca un inhalador de su mesa de noche y me lo pasa para dárselo a Ted.
-estas mejor hijo?- pregunta Christian y Ted asiente- muy bien, ahora vamos con Gail para esos panqueques y dejemos que tu mami se de un baño- le dice cargando lo- tu equipaje está abajo?- me pregunta, asiento- mandare a que lo suban- me dice antes de salir con nuestro hijo.
Me levanto de la cama y entro a una de las puertas de la habitación, pero me encuentro con el vestidor de Christian, salgo de él y esta vez si entro al baño.
Me miro en el espejo y tengo tenues ojeras por lo poco que he dormido estos dias, pero valio la pena, estoy de vuelta con mi hijo. Me quito la ramera de Christian y mis bragas para meter me bajo la ducha y que esta se lleve el cansancio que aún se aferra a mi cuerpo.
De repente siento que me toman de la cintura haciendo que brinque en mi lugar.
-Christian, Dios me vas a matar de un susto!- me quejo mientra me giro quedando frente a frente- suéltame- le digo ya que me tiene pegada a su cuerpo desnudo y mojado….
Tan deliciosamente mojado- dice mi subconsciente.
-no voy a hacer eso- dice asegurando más su agarre en mi cuerda mientras el agua de la ducha nos cubre.
-pero debes hacerlo, Ted puede venir a buscarnos- le digo removiendo me sin éxito.
-no lo hará esta muy entretenido con Gail- me dice, besando mi cuello mientras unas de sus manos se desliza por mi cintura bajando a mi trasero el cual levanta poniéndome contra la pared de la ducha.
-Christian!- jadeo por la sorpresa y él lo aprovecha para besarme, metiendo su lengua en boca, me besa con crudo deseo y lujuria, no soy capaz de de responderle igual.
Sus dedos pellizca mis pezones mandando pequeñas descargas a mi centro de placer que palpita por atención suya, la que no tiene que esperar cuando uno de sus dedos se deslizan en mi interior.
-tan apretada como la última vez- susurra en mi oído moviendo rápido sus dedos sin darme oportunidad a pensar con claridad.
En este momento no hay nada, nada más fuera de estas cuatro paredes, no importa nada mas mas que el y yo en este momento.
-ah!!- gimo cuando me penetra- Christian- gimo.
-mmm….te extrañe tanto mi amor- dice sobre mis labios, penetrando me rápido y duro.
-Chris….Christian!!!- me corro clavando mis uñas en su espalda y el se corre minutos después en mi interior, llevándome con su calidez y es donde la realidad me golpea.
No, no, no otra vez.