Los autos de Hades y Dea llegan al mismo tiempo a la mansión familiar. Los antes mencionados bajan de sus autos y van hacia la puerta, pero cuando están por tocar está se abre dejando ver a Doruk con una cara no muy amigable.
—Doruk, lamento haberme ido así, yo... —Intenta hablar, pero la mirada cargada de odio que le da el castaño la hace guardar silencio. Los señores Ian y Liana asoman la cabeza al escuchar la voz de su hija en la entrada.
—Yo he estado para ti por un año, he sido tu pañuelo de lágrimas cuando el cabrón a tu lado llegaba a tus pensamientos y su traición te torturaba. Yo olvidé la regla de "nada de relaciones amorosas con los socios de trabajo..." —Hace comillas sus dedos. —...que mi padre me había impuesto. Yo olvidé toda mi vida porque solo tú me importabas. Yo estuve y sigo estando para ti en todo momento, pero al escuchar la palabra compromiso, huyes de mí como si fuese un asesino. ¿Qué pretendes? ¿Qué toda la vida estaré corriendo detrás de ti mientras tú te aferras a un recuerdo? Porque si no lo sabías, esto... —La señala a ella y luego a Hades. —Es eso, un recuerdo. Mi padre, el Aga Mehmet voló desde Turquía para saber cómo está la chica con la que su hijo tiene una especie de relación y, de manera informal, pedir su mano, pero tú simplemente fuiste detrás de este...
—No, yo fui a la playa y lo...
—No me interesa lo que hiciste Dea, me interesa lo que harás ahora. Seré claro y directo, tienes dos opciones: Hades y el recuerdo de su amor o yo, y la esperanza de crear una nueva historia —Sentencia con seguridad.
La tensión en el ambiente es como una nube negra en un cielo despejado, oscureciendo a todos los cercanos, sobre todo a Hades quien espera impaciente la respuesta de la morena, pero está parece estar en otro mundo. <<Frente y junto a mí tengo dos magníficos hombres totalmente distintos. Por un lado tengo a Hades, el chico pervertido y rebelde del que me enamoré cuando solo tenía 17 y comenzaba a vivir la vida. Y Doruk, el hombre romántico y cariñoso que conocí a los 25 cuando ya era una mujer completa aunque con el corazón partido. ¿A quién debo escoger?>>.
—Dea... —La voz de Hades la saca de sus pensamientos. Lo mira a los ojos, mira a Doruk y luego sale de la mansión a toda velocidad caminando hacia el jardín donde se derrumba en llanto. <<¿Qué me está pasando desde que llegué a Estados Unidos? En Turquía, nunca lloré, nunca me derrumbé, nunca mis decisiones fueron tan controversiales. Nunca tuve que elegir>>. Suspira mientras la incertidumbre y la ansiedad la consume. <<¿Y si al elegir a Hades, cometo un error? ¿Y si con Doruk logró ser feliz? ¿Y si darme una segunda oportunidad funciona?>>. Aquella preguntas se repiten una y otra vez en su mente.
—No te tortures —Escucha la voz de su madre a su lado, levanta la mirada y ve a la hermosa mujer de cabello abundante sentarse a su lado. —¿Qué le pasa a mi pequeña princesa? —Pregunta tiernamente mientras acaricia el pelo de su hija. Ambas son muy parecidas, piel morena, cabello oscuro hasta las caderas, cuerpo esbelto, ojos grises y sonrisa deslumbrante.
—Mamá, no sé qué hacer... tengo miedo de tomar la decisión incorrecta... otra vez... —Solloza con desesperación.
—Hace algunos años estuviste en la misma encrucijada.
—Sí y me equivoqué al elegir a Ryan —Dice con ironía.
—Sí —Sonríe vagamente. —¿Por qué no elegiste a Hades en este momento?
—Su pasado, su historial, su relación con mi hermano —Suspira. —Hades me gustaba, me gustaba en serio, pero eran tantas las cosas que decían de él que... simplemente tenía miedo de intentarlo y fallar.
—Bien, ¿y por qué elegiste a Ryan?
—Bueno, él era diferente conmigo. Era como si, para él, las únicas personas en el mundo éramos nosotros y creo que eso me gustó. Me sentía tranquila.
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Hijos del Engaño.
Roman pour AdolescentsUna promesa, un año, una pareja, UN ENGAÑO. Una traición, una chica herida y sed de venganza. Las cosas más peligrosas y todos lo saben. Las cosas no salieron como lo habían planeado, todo se había salido de control y fuertes lazos se habían destrui...