Capítulo 26
DE MAL A PEOR[Wattpad no avisa, pero subí un capítulo antes de este. Es de suma importancia que se lea]
2/2Dipper.
— Yo… — la escuché hacer una pausa y me forcé a mirarla —. La verdad es que no sé por dónde empezar. Nunca es fácil hablar de esto. Ni siquiera cuando recibiste tratamiento psicológico por tantos años. Es un tema que me prometí olvidar, pero es imposible, ¿sabes?
Esta vez fue ella la que desvió la mirada, y yo ya sentí un nudo terrible en la boca de mi estómago al adivinar por donde venía esto.
— Yo… en la adolescencia no era un buena niña. Esa edad es… una locura. Crees que te la sabes todas y piensas que te estás comiendo el mundo. Empiezas a salir con chicos y experimentas muchas primeras veces.
Okay. No podía imaginarme a mi madre como una adolescente rebelde. Lo siento, pero se me era imposible. ¿Y quién puede culparme? Cualquiera que mire a mi madre ahora, tan recta y decente, toda una señora de casa, dedicada a su hogar y a su esposo, dudaría por un segundo que esta mujer fue todo aquello que ella me iba a contar a continuación:
— Creéme, Dipper, yo fui un completo dolor de cabeza para tus abuelos. A veces creo que fui bendecida con una niña tan buena como tú — dejó salir una corta risa que me resultó nerviosa y luego volvió al tema —: Cuando tenía dieciséis años, mi padre murió de un infarto…, infarto que yo le provoqué. Él me había encontrado con dos chicos en una posición sexual… un poco difícil de explicar. Tal parece que ver a su hija de esa forma fue demasiado para él.
Parpadee un par de veces y negué con la cabeza, tratando de que mi mente no fuera más allá de lo que mi mamá estaba diciendo. Sabía que mi abuelo materno había muerto mucho antes de que yo naciera; sabía que le había dado por un infarto, pero no tenía idea de lo otro. Y, esperen un momento…, ¿murió por encontrar a mi madre en pleno trio? No quería ni imaginar lo morboso que había sido la escena para él como para llevarlo a la tumba.
— Después de eso… mi vida se vino cuesta abajo. Mi madre cambió, yo me salí de control y… Era tu abuelo nuestra ancla. Él era la persona que nos mantenía en pie. Era nuestra brújula. Cuando se fue… yo me sentí tan culpable. Me involucré con personas malas, peleaba a diario con mi madre y me refugié en el alcohol y las drogas; tenía sexo sin protección y… tuve varios abortos; estuve a punto de morir incluso.
Escuchar eso, era demasiado. Me sentí mal por ella, y quise pedirle que se detuviera. Ella estaba muy afectada, y yo no me sentí con el derecho de saber más. Tampoco lo necesitaba. A mí no me importaba como había sido mi madre en el pasado, ¿quién era yo para juzgarla?, lo único que me interesaba era la tremenda mujer en la que se había convertido hoy en día. Sin embargo; no alcancé a frenarla cuando ella continuó:
— Fue en una fiesta cuando conocí formalmente a Santiago y a Antonio. Ambos hermanos eran realmente atractivos y… para ese entonces todavía no habían empezado las especulaciones sobre lo que pasaba con el menor de los Swinner.
» Yo vi a Santiago como un escape de la mierda que era mi vida. Él poco a poco fue ganándose mi confianza y luego… me enamoré de él. Su hermano siempre estaba con nosotros. Me parecía un gran chico. Antonio era simpático y muy carismático; con actitudes extrañas, claro, pero nunca hizo nada que me hiciera creer que era alguien malo o que le faltaba un tornillo.
» Antonio empezó a salir con una de mis amigas y a los meses empezaron las especulaciones sobre él y lo que en esa mansión pasaba. Los secuestros ya tenían un tiempo desde que empezaron; y Antonio hacía bromas muy raras sobre las desaparecidas. Aún así, se me era difícil creer en todo lo que se decía porque yo convivía con él casi todo el tiempo. Es decir, al tipo le gustaba hacerse cortes en la mano para luego lamerse la sangre, pero ¿de ahí a matar a alguien? No podía creerlo.
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Infierno, la maldición Swinner © [✓]
Vampire« Porque mientras el corazón se me aceleraba por uno, mi mente era presa del otro..., y el clítoris me palpitaba por ambos» ~•~ Muerte. Desapariciones misteriosas. Sexo sin control. Adrenalina y un secreto oscuro. Dominick y Günther Swinner son los...