g o m i t a [ZaDr]

25

Sentando en una banca en una zona alejada, sus dedos se tocaban, mirando sus sucias Converse negras con simplesa, demasiado distraído en lo suyo hasta que escuchó -luego de unos segundos- unos pasos que se acercaban a donde estaba sentado, mirando de reojo para ruborizar de forma fugaz sus mejillas, apartando rápidamente sus ojos.

── Hola.── Deteniéndose, él pelirrojo esperó hasta que el azabache lo mirara, dándole un sonrisa un tanto nerviosa, no muy típica en él.── Gaz dijo que habías salido, así que... creo que no me equivoqué al creer que estuvieras aquí.── Con su mano en su cuello evitó un poco su mirada, volviendo a verlo a los ojos con una pequeña mueca, era raro estar así.── ¿Puedo sentarme?

── Uh, claro.── Mirando el asiento se reincorporó, juntando sus propias manos al tener al mayor sentado a un lado de él, en un silencio ya no tan cómodo.── ¿Por qué me buscabas?

── Quería disculparme, no debí gritarte esa vez, ni decirte eso, sé como es tu padre, lo siento.── Sin verse durante esas palabras, Dib abrió un poco su boca, cerrándola cuando Keef se explicó, sin esperar en ningún momento una disculpa que no merecía, y que sabía que no tenía por qué recibirla.

── ¡No, ésta bien! Yo... yo debería disculparme, tu no, no hiciste nada malo, yo fui el idiota.── Exaltándose inclinó su cuerpo, quedando cerca del rostro al Keef haber girado su rostro por aquella exclamación; y, ruborizándose otra vez, su tono de voz bajó un poco, devolviendose a su posición anterior, sin verlo una vez más.── Yo lamento haberte besado, y decirte que te amo, tuvo que ser incómodo para ti.── Volviendo a juntar sus propias manos, Keef hizo una pequeña mueca cuando terminó de hablar, encorvandose levemente.

── Está bien, creo, aunque no pienso que de verdad lo sientas.── Miraba el suelo, fijándose en la tierra y en las pequeñas piedras que se encontraban en el lugar.── Actuaste mal, pero tampoco es algo de lo que debería culparte.

── Sigo sin entender en qué fallé.── Sus dedos índices se tocaron, moviéndolos un poco. Demasiado énfasis en sus dedos, tal vez solo estaba muy nervioso, aunque suponer que lo estaba para este punto era estúpido; volver a interactuar con Keef después de aquel desastre le ponía ciertamente mal, pero, se estaba relajado un poco. No le decía que lo odiaba, o tal vez no lo haría ahora.

── Bueno, es normal que dejaras de gustar de Zim, los adolecentes podemos dejar de gustar y comenzar a gustar de alguien en segundos, no es tan raro ni algo que esté mal mientras las cosas se hagan bien si es que tienes pareja. Tu no lo hiciste bien.── Luego de buscar las palabras, dudando en un principio, se sintió lo suficiente seguro de lo que decía para volver a enderezarse, girando su cabeza para conectar sus ojos, como tantas veces habían hecho.

── Lo sé.── Volviendo a quedar en silencio, ninguno de los dos se dignó a decir algo, dejando al leve viento seguir su curso entre el silencio que parecía esperar ser roto, sabiendo que Membrana debía hacer la pregunta.── ¿Por qué viniste a disculparte por algo de lo que no debes disculparte?

── Me agradas, incluso después de todo, extraño hablarte y juntarme contigo. A mi no me hiciste nada, no veo motivo por el cual no puedo seguir viéndote, y aunque Zim o Tak podrían enojarse conmigo, realmente no me importa mucho.── Su mano se hizo puño al sentirse nervioso, intentando no tibutear al tener su mirada sobre él.

── Tal vez sea incómodo para ti.── Quería creer que no lo había notado: Keef no podía tener sus mejillas sonrojadas incluso aunque fuera de forma muy leve, para nada notorio. Estaba imaginando cosas, de seguro lo estaba haciendo, lo que decía Keef no tenía sentido de por sí como para que ahora estuviera con sus mejillas teñidas de rosa.

── No, está bien, yo quiero seguir viéndote.── Su mano giró lentamente a la vez que sus palabras salían, rozando sus dedos sin descaro u disimulo mientras que mantenía su mirada en él de lentes, moviendo de a poco sus dedos para ya tocar los contrarios ante la mirada del azabache que aveces bajaba sus pupilas al notar el tacto que se hacia cada vez más intencionado.

── Entonces podríamos... intentarlo, creo.── Bajando su voz a la vez que miraba los labios contrarios, su cuerpo se iba acercando por inercia, a punto de balbucear sus últimas palabras.── Ser amigos.── Sus pupilas rápidamente vieron a la mano que acarició suavemente su mejilla, sin saber qué demonios estaba pasando, o cómo es que estaba pasando.

── Sabes que yo no me refiero a eso. ──  Haciendo que lo mirase, luego de unos buenos segundos dejándolo en espera de algo que ansiaba hace mucho, cumplió una fantasía sin tener ni idea de ello.

Besándose por segunda vez y, ésta vez, siendo correspondido, o tal vez, no lo sabría si no lo intentaba, no podía guiarse por el Keef de sus fantasías, sería raro y para nada cuerdo.
Sus mejillas se tiñeron para hacerlo sentir un calor producto de la vergüenza, acababa de tener una fantasía con Keef frente a él, mirándolo a la espera de una respuesta.

── ¿Entonces aún somos amigos?── Con su corazón sin parar la respuesta afirmativa del pelirrojo más su sonrisa le sacaron una, e intentando no demostrar lo felíz que estaba se fue alejando un poco, dejando su boba sonrisa en su rostro al no poder ocultarla bien.

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Habían pasado unas pocas semanas y el estar sólo parecía ya no afectarle tanto, sus pequeñas miradas con Keef seguían poniéndole nervioso y la insistente sensación de culpabilidad no lo dejaba. Lo estuvo viendo durante esos cinco días de clases de cada semana, durante los recreos, y claramente cuando se acercaba a él por no tener opción se ponía muy incómodo. O al principio.

Usualmente pensaría que Zim lo superó rápido, pero se dio cuenta de la actitud que tomó el otro azabache durante esos primeros días, y viéndolo ahora, parecía que intentaba ignorarlo más que otra cosa. No es que estuviera bien, no es que lo hubiera ya superado, lo que hacia era para no tener que sufrir más de la que ya lo hacia. Y ahora era capáz de entenderlo, o tal vez se forzó a hacerlo luego de esa charla.

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Sé que parece que la historia no va a ningún lado en concreto pero y que no debería hacer esto de esta forma, pero se me hace gracioso y más por como Termina todo. En fin, bloqueo y nada de ganas de escribir, veré si me sale lo activo. Y por favor no se lo tomen enserio, el libro iba bien hasta que mi forma de narrar se fue al caño cuando Dib y Zim rompieron, nisiquiera me siento satisfecho con estos capítulos, pero hago lo que puedo.