"El Pintor" [NamJin]

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Estaba listo, sentía raro ser el centro de atención de todos los presentes, en especial uno, Kim Namjoon, sentía su mirada sobre mí, llena de curiosidad y asombro, ¿tan cambiado me veo arreglado?, no, solo me veo aún más guapo. Era un completo inexperto para las fotos me dejaba guiar por las indicaciones que se me daban por parte del fotógrafo y el jefe de imagen, hasta que alguien intervino.

- va a desviarse la atención del producto, con ese encuadre llama más la atención el bello rostro del joven Kim - esperaba que el maquillaje ayudara a disimular mi sonrojo.

- entiendo ¿Qué sugieres Namjoon? - hablo mi madre con bastante interés por lo que contestaria al chico, Nam comenzó a caminar hacia mí, Dios dame autocontrol.

- Sugiero lo siguiente - las manos del chico se acercaron hacia mi - vamos a centrar la atención en su rostro, pero a la vez en el producto - con una de sus manos acomodo mi brazo, mi cabeza y mis manos, dándome una posición nueva.

- Me gusta - comento mi madre al ver la nueva pose - que inteligente es usted joven Namjoon.

- Muchas gracias, no es para tanto - un leve sonrojo se hizo presente en el rostro del chico, mi madre saco su móvil y lo apunto hacia mí.

- pero qué bello es mi niño - mi madre tomaba fotos del momento.

- mamá - dije en un tono bajo, pero que delataba lo avergonzado que me encontraba.

- Se parece mucho a usted señora Kim, ahora entiendo de donde viene la belleza de su hijo - me impresionaba lo formal que era Namjoon con mi madre y lo bien que estaban conviviendo.

💙

- Gracias, eres todo un caballero.

- Solo digo lo que veo - la señora Kim era agradable, además tenia que ganarme a la suegra, tenia mis encantos, los cuales estaban dando efecto. La sesión de fotos siguió, de vez en cuando daba consejos y sugerencias de las poses, colores y enfoques, no me di cuenta del tiempo que llevábamos trabajando, pero si de los atuendos que se había puesto Jin, por suerte fui discreto al tomarle fotos, estarían en una carpeta especial.

- Joven Seokjin, venga por favor - le llamo el fotógrafo, pues el chico se encontraba en el vestidor poniéndose la última prenda.

- Ya voy ¿seguros de este conjunto?, no me convence - el chico se escuchaba incomodo e inseguro, algo raro en él.

- Claro que si, además solo enfocaremos el rostro - comento una mujer que estaba junto al fotógrafo.

- Esta bien - el chico salió de aquel pequeño cuarto que servía de vestidor. En cuanto lo vi, una corriente eléctrica se hizo presente de mi nuca a mi entrepierna, Jin vestía un pantalón de cuero ajustado, del conjunto anterior, pero una playera con tela negra la cual llegaba hasta sus costillas, y de ahí en adelante, la tela era como una maya, permitiendo ver su abdomen, se veía realmente atractivo, estos minutos serian un reto para mí.

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Me sentía muy incomodo con la prenda, no es que me quedara mal, todo lo contrario, pero los presentes hacían que las cosas fueran mas incomodas. Al salir todas las miradas se posaron en mí, pero las sentía mas centradas de lo normal, sobre todo en mi abdomen, trataba de disimular mi incomodidad, pero creo que no servía mucho.

- muy bien, terminemos esto- comento el fotógrafo, mientras tomaba las fotos, sentía la mirada de Nam sobre mí, no podía apreciarlo bien, pues las lámparas dificultaban mi visión. Pasaron alrededor de unos 20 minutos, cuando por fin terminamos, me fui a cambiar, otra vez me sentía cómodo, fui en busca de Nam, parece que me leyó la mente, pues escuché la puerta del pequeño camerino abrirse y era él.

- eres muy fotogénico sabias - el chico cerro la puerta y se acercó a mí.

- un poco - di unos pasos para quedar frente a él.

- serias muy buen modelo - Nam coloco su mano en mi nuca, acercándome a él, juntado nuestros labios en un corto beso - estuviste genial, ahora vamos, tengo que ir a entregar el contrato - me tomo por sorpresa su acción, unas cosquillas se hicieron presentes en mi estómago, me volví a centrar y caminé a su lado hacia la oficina de mi madre.

💙

Terminé de checar algunas cosas del contrato, cuando salí de la oficina de la señora Kim, Jin se estaba sentado en unas sillas que se encontraban frente de esta, en cuanto me vio se levantó.

- ¿todo bien? - pregunto enseguida.

- Claro, tu madre es muy linda, eres mi ayudante especial- el chico abrió de manera desmesurada los ojos - no es cierto - el chico soltó un suspiro - aunque no sería mala idea.

- mientras no me pidas que me vistas de sirvienta, todo bien - las risas se hicieron presentes, hasta que un hombre llegó hasta nosotros.

- Jin, es bueno verte por aquí - miren, mucha confianza tiene este hombre con mi chico.

- estoy ayudando a mi madre con unas cosas - Jin se veía muy cómodo hablando con él.

- Sí, ya te vi en acción, no eres tan malo, serias un buen modelo.

- Quizá un poco, me gusto la experiencia la verdad.

- vaya tengo un posible rival - el hombre revolvió el cabello de Jin de forma amistosa, recibiendo una pequeña risa del chico.

- detente, mi cabello se veía mas cool de lo normal - reclamo Jin entre risas.

- te sigues viendo bien - intente no prestarle atención a todo lo que pasaba, pero las ideas tontas venían a mi cabeza, pero intente controlarme.

- mi madre esta en su oficina, por si gustas pasar a verla.

- claro, nos vemos - el hombre toca la puerta de la oficina y después entro.

-creo que es momento de despedirnos, ya me iré a casa - comento Jin mientras esperaba que el ascensor se abriera.

- yo te llevo, no tengo problema, así que no pongas pretexto - Jin simplemente sonrió y cuando el elevador se abrió entramos, para bajar al estacionamiento. En cuanto la puerta se cerro y me di cuenta que estábamos solos, vi mi oportunidad, lo acorrale en una de las esquinas del elevador, lo tome por sorpresa.

Mis manos estaban a los lados de su cabeza, comencé a besarlo, él correspondió mi contacto, comenzando a mover sus labios en sincronía con los míos, sentí como colocaba sus manos sobre mis hombros, deseaba que el elevador se detuviera para estar más tiempo así, una de sus manos fue bajando, de mi hombro hasta mi abdomen y al llegar ahí, busco la orilla de mi playera, buscando el contacto con mi piel, cuando su mano logro este objetivo, ganado un escalofrió y un pequeño jadeo de mi parte hable con la respiración un poco descontrolada.

- ¿Quién es él?

Como tarde en publicar varias semanas por estar ocupado en proyecto personales jejej, les traeré capítulos de mis historias mas seguido, aprovechando que tengo la agenda un poco mas libre.

les quiero Atte: el autor