"El Pintor" [NamJin]

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Llegamos al baño, Nam abrió la llave del agua, las gotas comenzaron a salir de la regadera, la mano del chico comenzó a probar la temperatura, el vapor comenzó a hacerse presente, Nam dio unos pasos al frente, colocándose bajo la caída de agua, su mano se extendió hacia mí, la tome, caminando hacia él. Ahora el agua recorría el cuerpo de los dos, se sentía tibia y relajante, las manos de mi chico recorrían suavemente mi espalda, como si quisieran memorizan cada centímetro de mi cuerpo. Estiré un poco mi mano para tomar la barra de jabón, con cuidado comencé a frotarla por todo su pecho, dibujando corazones con la espuma que quedaba, acciones que nos hacían reír, los dedos de Nam se movían por mi cabello, una de sus manos tomo el shampoo del estante al lado de nosotros, y Nam coloco un poco de este en mi cabello e hizo masajes, generando espuma.

- Nam ¿Qué haces? – el mencionado se mostraba sumamente concentrado en su acción.

- Espera – me quede quieto esperando la respuesta del chico – listo – nos quedamos en silencio unos segundos, hasta que el contrario rompió el silencio con una sonora carcajada.

- Tienes un gran peinado ahora Jin – Nam señalo algo detrás de mí, me di la media vuelta, encontrándome con un pequeño espejo empañado por el vapor, pase una de mis manos sobre este, haciendo que mi imagen se viera claro, no pude evitar reírme.

- Namjoon, parezco punk – dije mientras señalaba mi cabello, el cual estaba levantado en una sola hilera en pico, aunque poco a poco comenzaba a bajar por el peso de este – ven aquí – me acerque al chico, con la espuma que le quedaba en el pecho la comencé a colocar en su barbilla, poco después me separe del chico – listo.

- Umm, no me queda tan mal la barba – comento el chico mientras se miraba al espejo y acariciaba la espuma en forma de barba - ¿te gusta?

- Umm, no te ves tan mal, aunque – me acerqué a él – de todas formas, me sigues encantando – uní nuestros labios en un cálido beso, las manos del chico se colocaron sobre mis glúteos, acercándome más a él, no queríamos llegar a algo sexual, eran esos momentos donde simplemente querías disfrutar a tu pareja de una forma íntima y única.

- Te quiero tanto Nam – dije en cuanto nuestros labios se separaron.

- Y yo a ti Jin – minutos después terminamos de bañarnos, Nam buscaba algunas cosas en su armario, mientras yo estaba sentado en el sillón de a habitación, envuelto en una bata con olor a él.

💙

Buscaba un pijama para los dos, era hora de dormir y ya era un poco tarde, encontré por fin lo que buscaba.

- Bien, para ti – le extendí mi mano con el pijama, Jin la tomo.

- Awww, pero que bonita, es Rilakkuma – el pijama de Jin era de color marrón, llena de caritas del famoso osito mencionado, la mirada del chico se dirigió al pijama que yo tenía en manos – ese es igual, pero en un color más claro ¿son a juego?

- yo, creo, venían las dos juntas en el paquete – me daba un poco de pena el momento.

- Es muy tierno, vaya que eres fan de este pequeño – dijo señalando una de las caritas del oso en el pijama.

- ¿Cómo? – Jin no de dejo terminar.

- Tienes un llavero de él en las llaves de tu auto, y la primera vez que me trajiste aquí había un pequeño peluche de Rilakkuma – dijo el chico con una sonrisa llena de orgullo, como si hubiera resuelto un gran misterio.

- Pero que observador – los dos reímos – sí, me gusta, es un osito tierno.

- Algún día tengo que verte en un kigurumi de rilakkuma - Jin comenzó a desatar su bata, tomo su ropa interior, que hace unos momentos habíamos recogido, comenzando a vestirse, yo imite su acción.