MARINA
Regresamos a la central luego del incidente, algunos de mis hombres salieron heridos, otros muertos, pero esto es así en la vida de un agente. Se llevaron a mi hija, pero voy a tenerla de regreso, juro que voy a matarlo si a mi niña le pasa algo.
Golpeo el escritorio que está lleno de documentos, siento rabia, miedo, dolor
«¡Mamá! ¡no! ¡suéltenme!»
Esas palabras no se me quitan de mi cabeza. Sasha cometió el error de llamarme mamá durante el operativo, ser mi hija no le va a ir nada bien en las manos de ese mal nacido, uno de los más buscados y jodidamente del hijo de perra no hay ni su sombra, creo que voy a ordenar al sector secreto que hagan el trabajo sucio, porque vivo no lo quiero, mucho menos cuando sé bien lo que a Sasha le espera.
Se quitó el dispositivo de rastreo, estaba trabajando en ese club, un año y no me di cuenta, nunca pensé que Sasha haría algo como eso, ella nunca ha hecho nada para decepcionarme, no lo ha hecho nunca, pero las consecuencias que le han traído no es algo que se va a poder superar de la noche a la mañana, a mí aun me quedan secuelas, y eso no quería para ella, ni para sus hermanos.
- Jefe, traigo el video de las cámaras de seguridad – entran avisando.
Reproducen el video en la pantalla, no tiene sonido, pero se visualiza bien como empieza el tiroteo, las personas empiezan a salir y como Sasha es llevada a la fuerza a una camioneta polarizada de la cual ni siquiera la placa me sirve.
» Los rusos también estuvieron dentro, jefe, al parecer los vor v zakone y los antonegra tuvieron una disputa, su enfrentamiento viene desde hace años. Mataron a algunos, pero por las cámaras se puede ver que solo se llevaron a uno, en muy mal estado, por cierto, su hija solo estuvo en medio de este incidente y tuvieron que llevársela, si me permite decirle algo yo creo que su hija...
- No – sé lo que quiere decir, y me niego a escucharlo – no la van a matar, ya saben que Sasha es la hija de una agente del SEILD, y no solo eso, ella es mi hija.
- Marina, el celular de tu hija - entra Lara Jhonson seguido de Jared y el guardaespaldas de mi hija.
Me acerco a él tan rápido y le propino un golpe para luego estamparlo contra la pared, se supone que vigilar a una joven de veintidós años era su trabajo, ¿matarlo? Sí, es una opción, pero luego me encargo de eso.
- ¡Te di una sola orden! ¡una maldita orden que no pudiste cumplir! ¡solo tenías que cuidarla! ¿¡cómo es que mi hija terminó en manos de la mafia!? ¡si le pasa algo a Sasha, te mato!
- Mamá, cálmate – me giro contra Jared y le estampo una bofetada con el dolor que me causa hasta hacerlo.
- ¿¡Cómo se te ocurre ayudarla!? ¡se supone que eres su hermano mayor! ¡tu hermana está en peligro de muerte, Jared!
- Lo sé, mamá, perdón, es mi culpa.
- Ahora no, Jared – aunque me enoje que le haya ayudado, no es su culpa – Jhonson, quiero a tus mejores agentes dentro de esto, comunícate con la base, no difundan que Sasha está en manos de los italianos, vamos a buscarlos hasta por debajo de las piedras, este caso no sale a la luz por ahora, sería peor hacer algo así - Jhonson sale después de mi orden.
- Ernesto Ferrara, la persona que subió a su hija a la camioneta, esto arroja el sistema según reconocimiento facial – miro a la pantalla donde evidentemente está la foto de la persona, otro hijo de perra que espera ser encerrado en cuatro paredes o mejor, en el infierno – en cuanto al Verdugo, seguimos en lo mismo, jefe. Es un fantasma, no hay nombre, ni expediente, nada, llevamos años en esto, vamos a necesitar suerte para encontrarlo.
ESTÁS LEYENDO
El Verdugo (1) © ✔
RomanceNo todos los dioses te llevan al paraíso, algunos te arrastran al infierno, y así como en el cielo está la luz más brillante, en el infierno habita la oscuridad más misteriosa. PROHIBIDO LA MANIPULACIÓN, ADAPTACIÓN O ALTERARON PARCIAL O TOTAL DE EST...