Orazio (Vol. 1) Orazio y la hormona Isis.

Un hombre con un propósito.

La motocicleta voladora que transportaba a Orazio fue perdiendo altura poco a poco al quedarse sin combustible.

Ahora Orazio se encuentra en medio de la nada. Por alguna razón, su neurochip no funciona y no sabe dónde está. Está como al principio. Sin dinero, solo y sin futuro.

Peor aún. Seguro que la loca de Isis y su secta de cabronas le persiguen.

Orazio suspira y mira al cielo. Se sorprende por la cantidad de estrellas que se ven lejos de la ciudad. Nunca ha visto nada tan hermoso, ni siquiera en la RV.
"¿Por qué no nací hace cien años?", piensa. "Habría sido feliz viviendo y muriendo en aquellos tiempos".

Una estrella fugaz cruza el cielo.
Orazio cierra los ojos y pide un deseo: "Quiero volver atrás en el tiempo y que la hormona Isis no exista".

Vuelve a abrir los ojos. Nada ha cambiado, pero oye, ¿quién sabe? Está en medio del campo y no hay nada que indique si su deseo se ha cumplido.

Intenta arrancar de nuevo la moto. Es inútil, está muerta. Furioso, le da una patada y está a punto de romperse el pie.

"¿Por qué soy tan jodidamente lamentable?", grita enfadado.

Se sienta en el suelo junto a la moto. ¿Qué va a hacer, dónde va a ir? No quiere estar solo.

Entonces se da cuenta de algo importante. Algo ha cambiado desde que tuvo que dejar el orfanato estatal.

En aquella época no sabía nada del mundo. No tenía ni idea de qué hacer con su vida. Desde entonces ha aprendido algo:

Es Orazio D'Aquino, nació en el orfanato, alberga amor por Orazia y odia a Isis.

Gracias a Narmer también ha aprendido que un hombre puede conseguir el poder de la hormona. Narmer no ha querido decirle cómo, pero él lo descubrirá.

De repente, Orazio se levanta con una sonrisa feroz en la cara. Ya sabe lo que tiene que hacer. Conseguirá mucho dinero, comprará la hormona, obtendrá sus poderes y rescatará a Orazia de la cárcel.

Pobre Orazia. Nadie que la conozca como él puede pensar que es una asesina. Es la chica más buena que existe. No sabe lo que ha pasado, pero Orazio está seguro de que se ha cometido una brutal injusticia con ella.

¿Y Narmer? ¿Habrá logrado escapar de los Ojos del Templo?
Quién sabe. De lo único que está seguro Orazio es de que debe ponerse en marcha. Tiene que empezar a ganar dinero pronto.

Él es Orazio D'Aquino, un hombre de virtud. ¡¡¡¡¡¡¡Prepárate mundo, porque ahora Orazio es también un hombre con un propósito!!!!!!!

Orazio está en el comienzo de la más épica aventura que te sacudirá hasta el fondo. (Pero esa es otra historia que se contará en otro lugar).

Por ahora... FIN.