Capítulo 29

554 64 26
                                    

Maraton (2/2)

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Maraton (2/2)

IRINA:

Me permito desahogarme en la soledad de mi habitación, lloro, grito, y lanzo al piso todas las cosas que puedo encontrar.

Me da tanta rabia que haya terminado así, que no haya podido cumplir mi promesa. Me duele el corazón, me duele el alma, y lo único que quiero es pensar que por fin está bien, que al fin es libre.
Pensar en positivo, pero no puedo... Simplemente sus recuerdos me llegan a la mente y ya no se que hacer para amortiguar el dolor, ya no se que hacer para poder estar bien.

Esto es lo más cercano a perder un familiar para mí, tal vez no la conocí por bastante tiempo, o quizá no la hubiera conocido de no ser por toda esta mierda. Pero llegó a ser una persona muy importante para mí y duele tanto, como si me clavaran miles de dagas en todo el cuerpo, como si desgarraran mi alma desde dentro y como si mi corazón se rompiera en mil fragmentos.

No puedo pensar en otra cosa que no sea la venganza, mi mente maquina una y mil formas de obtener lo que quiero a cambio de que me devuelvan mi humanidad y mi felicidad.

La noche cae y con esto el encierro se vuelve cada vez más agobiante, más asfixiante.
El cielo gris y la lluvia transforman por completo el panorama, dándole una vista fría, sin color. Triste, como si mi humor congeniara con todo.

Es gracioso pensar en que mi humor pueda congeniar con el clima, pero es la única forma de darme ánimos.

La puerta de la habitación se abre y no volteo a ver quién es. No tengo ganas de ver a nadie...

Pronto se acerca a mí y siento sus dedos acariciando mi cabello, sé quien es, por lo que me alejo y lo miro directamente a los ojos.

Viktor me mira como si tan solo la lastima no sea castigo para mí, como si fuera el ser más miserable del planeta, como si ya no valiera nada.

Excepto por que aún se nota que está obsesionado conmigo, esa chispa en sus ojos cada vez que me mira, como si admirara algo muy precioso.

— Mi bella Irina... — susurra suave con voz ronca y se sienta en el borde de la cama — Seré bueno por una vez en mi vida y te contaré la verdad — sonríe con sorna y con su mano izquierda palmea la cama, invitándome a sentarme al lado suyo — Siéntate — demanda.

No lo hago, por lo que levanto la barbilla y me quedo estática en mi lugar.

— Como quieras — rueda los ojos — Como te dije, quiero ser bueno contigo y hacer que tu burbuja de vida perfecta se rompa — comienza su relato — Haz vivido engañada toda tu vida, y como si no me diera cuenta, Prishka siempre se escabullia a escuchar conversaciones que no le inconvenian, pero aún así lo dejé pasar, pensando que era una cotilla — ríe — Gran error... Sin darme cuenta te estaba contando todo lo que escuchaba, y eso no me convenía por completo.

INQUEBRANTABLE [+18] PRIMERA PARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora