Extra I

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—¡Casi me matan allá afuera! —la voz de Hoseok se escuchó por todos lados.

—Hazme el favor…  —dijo Jungkook quien revisaba los archivos de la computadora de Namjoon.

—Hay gente afuera pidiendo que renuncies —dijo Hoseok— y casi me lastiman, pero lancé a uno de ellos al espacio. Ahora estás en problemas por eso.

Jungkook miró serio a Hoseok y suspiró.

—Son los Namjoonistas. Ignoralos, dicen que Namjoon sigue vivo y si es así, de todas formas no puede regresar a ser Dios.

Yoongi llegó por la puerta a la oficina principal, él se encontraba mejor. Después de dos años había logrado superar lo de su mejor amigo. No estaba en sus planes matarlo, pero al menos salvó millones de vidas.

—Deberíamos buscarlo —opinó Hoseok.

—Sería una buena idea si no fuera peligrosa —dijo Yoongi.

—Piensen en qué pasaría si él regresa —dijo Jungkook—. Muerte.

—Guerras.

—¡Una reconciliación! —dijo con entusiasmo Hoseok—. Si Yoongi y él siguen siendo amigos, Namjoon no será malo y tampoco tendrá el deseo del poder. Jungkook no ha caído en eso porque nos tiene a nosotros.

—Es porque soy mitad robot, el poder no me interesa en lo más mínimo. No tengo sentimientos.

—Eres muy duro contigo mismo —Hoseok se acercó a Jungkook y comenzó a hacerle masajito en los hombros—. Relaja esos circuitos.

—No me toques —dijo molesto y Hoseok quitó sus manos de inmediato—. Si vamos a buscar a Namjoon tendríamos que traer a Taehyung porque si intenta lastimarnos, es el único que lo puede detener.

—No se han comunicado con nosotros desde hace un año —mencionó Yoongi.

—No cumplieron su promesa de ser amigos por siempre.

—Me preocupé porque Jimin me mandó un video llorando y luego otro diciendo que estaba bien y que él me marcaría y no volvió a marcar —dijo Jungkook algo decaído—. Después envió una foto de un blodito.

—Me pregunto por qué no se han comunicado…

🏠

Jimin acarició el pecho de Taehyung mientras lo besaba, bajó las manos hasta su pantalón de pijama, besó su barbilla, cuello y fue bajando hasta que el llanto de un bebé los hizo detenerse.

Ambos se quejaron.

—Vas —dijo Jimin y Taehyung negó.

—Haneul se calma contigo.

Jimin se levantó de mal humor y fue al cuarto de la bebé.

—Ya estoy aquí —dijo cargandola. La cargó y mientras la arrullaba su pecho se iluminó con una luz tenue blanca, al igual que la de la bebé.

La primera vez los había hecho gritar.

—No entiendo qué es eso —dijo Taehyung, quien se había levantado—. De verdad me parece tan extraño, pero es bueno porque así la bebé se tranquiliza más rápido.

—Si te ibas a levantar hubieras venido tú.

—Es más rápido contigo, así podemos seguir —dijo alzando ambas cejas repetidamente. Jimin asintió, dejó a la bebé en su cuna y se lanzó a los brazos de Taehyung.

[...]

Enamorado era poco para Park Jimin, estaba tan enganchado a Taehyung que olvidaba a veces que tenía una hija por eso siempre se la ponía en el pecho con una cangurera para no olvidarla en algún lado.

Anpanman || VMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora