Keira y sus problemas [COMPLETA]

Capítulo 08 🚬

Gen a veces era insoportable y hasta chillona, pero tenía momentos en donde me gustaba su forma de pensar. Por ejemplo, en la clase de debate arrasó a todos con su discurso de razones para dejar de llevar brasier.

Y de hecho, hasta me convenció un noventa por ciento. Principalmente porque soy alérgica a los ganchitos de estos.

 —¿Qué harás por la tarde? —me preguntó Gen, mientras caminábamos por el pasillo.

Yo estaba tranquila, pero ella estaba atenta por si alguno de sus amigos se acercaba.

Aún no le decía a Peter lo que sea que le tenía que decir para dejarlo y eso, la estaba atormentando.

—Probablemente comer helado hasta morir —respondí con simpleza.

—¿Quieres que vaya a tu casa y cocine unos brownies? 

—No —me apuré a contradecirle.

Nunca había llevado una amiga  a casa, así que la simple idea me ponía incómoda.

—Pero me salen ricos —insistió.

—Que no.

—Y se puede comer con helado...

Arqueé una ceja interesada, si eso era cierto, no me incomodaba tanto la idea de tenerla rondando por mi casa, no si cocinaba algo rico en grasa y encima, le podía poner helado.

—Bien. Tú ganas, pero haces todo tú. Hasta limpiar lo que ensucies —mascullé, viendo como se le iluminaba el rostro poco a poco.

Fingí desinterés a pesar de que la idea de comer lo que cocinaría me gustaba.

—¡Genial! ¡Genial! ¡Es que en casa no me dejan cocinar! —exclamó saltando de emoción.

—¿Y eso por qué?

—Porque me tardo mucho grabando y sacando fotos para mi página. ¡Pero hoy podré hacer brownies!

¿Grabar? ¿Quién habló de grabar?

—No estaba en el trato que grabases mi casa —sentencié.

—Pero podrás comer todo lo que yo cocine...

—Si que sabes negociar —farfullé, abriendo la puerta de salida del instituto.

Ya era hora de irme a casa.

—¿Te pasa a buscar tu madre? —cuestionó Gen—. La mía siempre se demora.

—Mi padre viene por mí.

—Oh. Debe ser lindo que tu padre te preste atención, el mío solo... 

La miré cuando noté que dejó de hablar, eso era nuevo.

—Si tu padre no te quiere, que le den. Tampoco tienes que andar reganándole amor porque brindó un espermatozoide para concebirte  —dije seria.