¡ELLA ES MÍA! [Ayano x Harem]

Epílogo.

Miré a mi padre, estábamos en el aeropuerto esperando ser llamados para abordar el avión. Él sonreía con una mezcla de tristeza y felicidad, felicidad porque mi madre ya no estaba a nuestro lado y tristeza porque Yanagi ya no estaba a nuestro lado.

Oko seguía intentando comunicarse con Yanagui solo para tenerme feliz, volver a ver una sonrisa sincera, pero no había caso y eso me jode, lo quiero a él aunque este en mi mente, lo necesito para ser fuerte ahora que ya no tengo casi nadie a mi lado.

Me he mantenido "estable" para mi padre en lo que llevamos esperando a ser llamados, porque él a mi me necesita, a pesar de que no tenía una relación estrecha con Yanagi su amor ha sido inmenso por él. Me partió el alma ver como suplicaba que no lo apartaran de su hijo, que hicieran lo posible por revivirlo y yo también deseé que hubiese una forma para revivirlo.

Suspiré abrazándolo.

Cuando llegaramos a Estados Unidos recibiría tratamiento psicológico, ya había hablado con la mujer un par de veces sin que los chicos se enteraran, era una mujer de la edad de mi padre; muy hermosa y amable que me hacía sentir cómoda.

Espero tener una nueva vida, poder sanar, amarme, amar y seguir adelante. Volver a ser la chica que era antes, feliz. Extraño mucho a los chicos desde ya, sin embargo, es necesario dejarlos atrás para poder avanzar, además les hice mucho daño, no soportaría verles a la cara y ver su tristeza, con la mía es más que suficiente.

— Pasajeros del vuelo 202, destino a Estados Unidos, California por favor abordar el avión, primer llamado — me levanté de prisa cogiendo mi maleta, mi padre se tomó su tiempo.

Tragué grueso.

— Comenzaremos una nueva vida, Yan-chan, te lo prometo. Saldremos de esta — dio un leve apretón a mi mano para luego acariciarla — Vamos, es hora.

Asentí, a punto de caminar pero me detuve al escuchar una voz conocida.

Supongo que olvidé contarles algo a ustedes.

— ¿Te vas sin despedirte, idiota? — me volteé con felicidad hacia el peli-rojo. Ahí estaba, con un aura tranquila. Sonrió acercándose a mí y darme un abrazo — Si te ibas sin despedirte jamás te lo perdonaría.

— Lo sé. Eres muy rencoroso — bromeé. El me despeinó en forma de venganza — ¡Oy-

Me interrumpió.

— Akiro Kimura.

— ¿Eh? — solté confundida.

— Pasajeros del vuelos 202, destino a Estados Unidos, California por favor abordar el avión, segundo llamado.

Alcé la mano dispuesta a despedirme, mi padre me esperaba.

— Soy Akiro Kimura, un gusto, Ayano Aishi — sonrió y aprovecho mi mano levantada para darle un leve apretón — No te atrevas a olvidarme — susurró jalándome hacia él y dejando un beso en mi frente. Lo miré sorprendida — Ve, antes de que el vuelo te dejé.

Dio la vuelta y se fue perdiendo entre la gente. Info-kun, finalmente sabía su nombre luego de tantos ruegos.

No sé si sentirme celoso.

Oh, cállate.

Corrí hacia mi padre, algo feliz.

— Me cae bien ese chico, que bueno que nos vamos a otro país — No pude evitar soltar una carcajada.

Una carcajada... Él había logrado sacarme una carcajada, Vi su rostro iluminarse al escucharme reír. Seguía siendo el mismo padre bromista y sobreprotector. Solo esperaba que el nunca se vaya de mi lado.

Por favor, no lo hagas, no rompas tu promesa.

Fin.

Me da muchísima nostalgia ver esto, un primero de julio del 2020 iniciamos y hoy del 2022 por fin le damos un cierre. Gracias por haberme acompañado y haberse quedado conmigo para ver como crecía la historia, como llegaban nuevos personajes y otros se iban.

Quizás nos volvamos a ver muy pronto.

Atentamente, Hannah, su fiel servidora.