Soy el villano

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Las semanas pasaron y la tensión entre los chicos aumento, Kendra y Lucius seguían sin aparecer, el extraordinario control de Hermione con la magia oscura cada vez era menor, lo que ocasionaba tensión entre ella y Draco todo el tiempo.

—Aquí estás… te busque por todos lados

Draco miro a Hermione que se encontraba cerca de los límites de la madriguera arrimada a la baranda contemplando el paisaje.

—Lo siento… olvide que debo reportar cada movimiento que hago

—Hermione no empieces quieres… —contesto Draco molesto —intentamos protegerte

—Lo se Draco! No hacen, ni hablan de otra cosa que no sea yo…

—Intentamos protegerte no lo entiendes

—Esto era lo que no quería! Te lo advertí Draco… ¡y no quisiste escucharme!

—Y que quieres que haga ahora!

—No hay nada que hacer… ya no!

—No voy a volver a tener está conversación —dijo cansado el rubio, se dio la vuelta para irse, pero Hermione volvió a hablar antes.

—Se nos acabó el tiempo… —dijo la castaña con tono triste pero lo suficiente alto para que el rubio lo escuché.

—No… —se apresuró a decir Draco acercándose a ella —aun no… aún podemos encontrarlos, solo…

—No los vamos a encontrar… han pasado semanas y no hay pista de ellos, no quieren ser encontrados

Draco aparto la mirada de la castaña ante lo último dicho por ella.

—Has? ¿Has hablado con tu padre? —Pregunto nerviosa por la respuesta

—Estoy intentando encontrar una solución —contesto de manera calmada y lenta, pero evitando su mirada.

—Ya hay una —dijo Hermione al cabo de unos segundos de silencio. Respiró hondo mientras cerraba sus ojos para evitar que las lágrimas cayeran por su rostro sin éxito.

—De que hablas?

—No puedo desatar el poder y destruirlo todo… —miro a Draco ya sin preocuparse por demostrar los afectada que estaba y después de varios incómodos segundos de silencio continúo hablado —tampoco quiero dejarme consumir…

—Voy a encontrar una solución… —se apresuró a decir Draco mientras la tomaba del rostro limpiando sus lágrimas

—Te amo Draco… más que a nada en este mundo

—Lo sé y yo a ti…

No pudo continuar pues Hermione acortó la poca distancia que había entre los dos para fundirse en un beso despertado, uno con sabor a despedida, lo que hizo que el rubio se apartará confundido

—Hermione…

—Mátame… —soltó la castaña antes de que Draco siguiera hablando

—¡Estas, loca! —grito Draco furioso y confundido

—Draco por favor… mátame… no puedo seguir con esto…

—No… no me pidas… haré lo que sea por ti… pero no eso… no me pidas eso —suplico

—No hay otra manera…

—Si la hay… —dijo rápidamente Draco, luego tratando de calmarse se acercó de nuevo a la castaña —mira yo… sé cómo arreglarlo… solo… debo irme y te juro que arreglaré esto

—Irte a dónde? ¿De qué hablas?

—Se cómo convencerla…

Varios segundos pasaron en silencio hasta que Hermione lo miró fijamente haya entender la situación.

—Kendra

—Si la ayudo ella…

—Ayudarla… a qué?

Draco no respondió, tampoco hizo falta, Hermione conocida perfectamente los planes de Lucius.

—No puedes hacerlo… si te atrapan con ellos… si te llevan a Azkaban…

—Hey tranquila eso no va a pasar…

—No lo hagas… Tu eres una buena persona

—Y de que mierda me ha servido eso! Casi pierdo a T/N, casi te pierdo a ti también! No lo entiendes yo no soy un puto héroe… ¡Yo no voy a sacrificarte para salvar a nadie!

—Tienes que hacerlo, se llama hacer lo correcto Draco!

—Me importa una mierda! Soy capaz de destruir todo el puto mundo mágico si eso implica mantenerte a salvo.

—No tú no eres así…

—Soy, claro que sí, soy manipulador, un maldito niño mimado que quiere todo y si no lo tiene hará lo que Sea para conseguirlo, soy egoísta y no voy a permitir que nadie te arrebate de mi lado y si la única manera de hacerlo es volverme una mierda de persona, Hermione Granger no dudes en que lo haré.

—Draco se lo que estas pensando por favor —suplico la castaña con lágrimas recorriendo su rostro —esa no es la solución

—Y morir si lo es!

—Así no lastimo a nadie…

—Me lastimas a mí! ¡Soy yo quien terminará destruido si te pierdo no lo entiendes!

Hermione se acercó a Draco para intentar abrazarlo, pero la aparto bruscamente.

—Qué piensas que pasará cuando no estés, enserio crees que lloraré en tu tumba y luego iré a mi gran mansión a seguir con mi vida? ¡No! Si te pierdo olvídate del Draco que intenta ser mejor persona, si te vas me volveré el puto mortifago que siempre debí ser, no descansaré hasta que todos sienta el mismo vacío, el mismo dolor que quedará en mi pecho cuando me dejes.

Draco respiro profundo mientras recuperaba el poco control que tenía, paso las manos, pero su cabello y luego miro a Hermione con dolor, con miedo.

—Perderte no es una opción… no lo permite… Lo siento Hermione, sé que es egoísta ponerte por encima de la seguridad de todos, pero no me importa, por qué ya te lo dije yo no soy un héroe, soy el villano que no le importa ver el mundo arder si eso implica mantenerte a salvo, y si me quieres odiar por el resto de mis días… hazlo, ódiame, prefiero que me odies y pudrirme el resto de mis días en Azkaban antes de verte morir…

El rubio dio unos pasos hacia atrás tratando de alejarse, pero la voz de Hermione lo hizo detenerse

—Si te vas… alguien más lo hará, ¡Yo lo haré!

Draco soltó una risa sarcástica y miro fijamente a la castaña

—Claro que no… en el momento en que salga de aquí y este con mi padre, tu harás lo que sea por encontrarme por hacerme entrar en razón, así que no intentaras nada para lastimarte, no hasta que me recuperes y solo lo harás cuando te quite ese poder y solo lo haré cuando ayude a mi padre

—No aceptaré que Kendra me quite el poder…

—Te amo Hermione —soltó Draco después de unos segundos ignorando lo dicho por la castaña —jamás lo olvides

Luego despareció del lugar mientras en un intento fracasado de Hermione trato de detenerlo, logrando solo terminar en el suelo con lágrimas recorriendo su rostro y la respiración pesada.

—Hermione! —grito Harry llegando hasta ella para abrazarla, pero cuando lo intento los ojos de la castaña cambiaron por completo, esos dulces ojos color miel se volvieron negros y fríos. —Hermione mírame… respira y mírame! —pero la castaña no respondió

—Hermione, escúchame —dijo T/N llegando hasta ella —se lo que se siente ese poder intentando recorrer tu cuerpo, pero no lo dejes entrar, piensa en Draco, en lo mucho que te ama, y lo mucho que te necesita con tus sentimientos intactos, así que Hermione regresa…

De a poco el dolor de ojos de Hermione regreso a la normalidad, haciendo que se dejará abrazar por su amiga.

—Y Draco? —pregunto Harry notando su ausencia

—Se fue con su padre —fue lo único que la castaña pudo decir antes de romper en llanto otra vez.

Consecuencias (2da parte de Sentimientos Ocultos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora